Memories 2

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- Oye, Camz, vamos a ir a...

- ¡SALGAN DE AQUI, AHORA! - sentí una almohada llegar a mi cara y cerré la puerta rápidamente. Escuche un gritito al mismo tiempo que unos pasos se acercaron a la puerta, quizás a recoger la almohada.

Hace ya unas semanas Camila había llegado y ahora estábamos en Canada, en un hotel. Y creo que ella esta de mal humor.

- ¿que le pasa? - pregunte a Calum que pasaba tras nosotros tres. Abrió su boca para responderme pero otro grito lo interrumpió.

- ¡JODIDOS HOMBRE CON LA VIDA FACIL! - lloriqueo y estuve a punto de reír. Me daba gracia pero seguramente era algo que a ella le molestaba, muchísimo.

- el llamado de la madre naturaleza - Oh. Nunca vi a una mujer pasando por eso porque mi madre ya sabia soportarlo y no tengo una hermana. ¿Y novia? Ja, ni en sueños.

- ¿y no estará exagerando? - pregunto Luke con la oreja pegada a la puerta. La cara de Luke mantenía una sonrisa burlona, aunque Camila no podía verlo.

- ¡NO, LUKE HEMMINGS! - Luke se separo de un salto de la puerta y soltamos unas carcajadas, du cara demostraba un poco de espanto. Abrí sin hacer ruido y camine descalzo hacia ella, quien me daba la espalda acostada en la cama mientras abrazaba la almohada que antes había golpeado mi cara.

- pequeña, ¿duele mucho? - su mirada se giro hacia mi y vi como tenia los ojos un poco llorosos. Apretó levemente su abdomen. No sabia que hacer, pero me senté a su lado y acaricie su cabello.

Antes de contestarme me hizo morritos y unos ojitos de cachorro, cual niña pequeña. Sus ojitos se llenaban de lagrimas lentamente.

- si, Mikey - me hizo un puchero y mordí mi labio nervioso. Se giro completamente hacia mi con los ojos cerrados y respirando tranquilamente, se veía muy angelical y preciosa.

Casi igual como cuando llego el primer día del tour y la conocí. Solo que ahora tenia los ojos llorosos pero me miraba con la misma mirada de 'Ayúdame' del primer día.

- espera aquí, princesa - me dirigí al baño y una de esas toallas pequeñas que generalmente hay en los baños de los hoteles. Encendí el agua caliente y remoje el paño allí.

Lo estruje y volví donde Camila. Lo coloque en su vientre, obviamente antes le subí un poco la camisa y su pantalón estaba desde la cadera hacia abajo. Ella soltó un suspiro de satisfacción.

- oh, te amo, Michael - murmuro con ojos cerrados. Me sonroje y ella tenia una pequeña sonrisita en la cara - ¿no vas con los chicos?

- hm, ¿me puedo quedar cuidándote? - escuche como soltó un Aww contra la almohada. Pero estaba mezclado con un gemido de dolor.

- obviamente, Mikey - suspiro y me sonrío. Me recosté a su lado y acaricie su pelo - ¿por que te quedas conmigo, Mike?

- porque me gusta estar contigo - le sonreí, le di mi mejor sonrisa y sus ojos se suavizaron.

- ¿en serio? Eres un amor - murmuro en tono bajo.

- gracias, bebé - chillo levemente.

- ¿a Calum no le molesta? - su curiosidad aumento y su tono sonó algo burlesco.

- no me vio entrar - reí algo nervioso. La verdad si tenia un poquito de nervios pues Calum era un hermano celoso y sobre-protector.

- vale, chico malo, me gustas.

Idiot | M.CDonde viven las historias. Descúbrelo ahora