Capítulo 18

350 24 9
                                    

Pasé mi dedo anular por mi labio inferior dando pequeños golpecitos en este así arreglando mi labial y mirándome por última vez en el retrovisor de mi auto. Me encontraba justo afuera de aquel lugar en donde se supone que sería "la fiesta" de cumpleaños de Styles. Este me había comentado que era de tema formal y que no tenía que tener prisa alguna para llegar, solo debía de prometerle que estaría ahí. Y tal y como lo había prometido. Había llegado hace como treinta minutos y estaba intentando calmarme un poco, me sentía nerviosa porque sabía que toda su familia estaría ahí y yo... estoy sola.

Lentamente tomé mi bolso de mano, el pequeño regalo del bastardo y mi celular mientras salía de mi auto. A paso calmado empecé a acercarme a la entrada del lugar. Cuando abrí la puerta pude escuchar voces en todas partes, supongo que había demasiada gente. Sostuve mis cosas con un poco más de fuerza mientras bajaba las escaleras que daban hacía el gran salón en donde muchos se me quedaron mirando, incluyendo Anne y Gemma a lo lejos. Me miraban como si fueran capaces de matarme ahí, y en frente de todas esas personas.

Ignoré por completo a aquellas dos y empecé a caminar hacia donde la gente no me notara demasiado. Hoy tenia muchas cosas en mi cabeza, estaba completamente ida.

-¡Boo!- pegué un salto luego de sentir unas manos frías tocar mis hombros.

El típico traje negro con una camisa blanca con los tres botones superiores sin abotonar y hasta parecía que los botones restantes en algún momento saldrían disparados. Su cabello estaba peinado de forma impecable, ni un solo mechón estaba fuera de lugar, y por supuesto su sonrisa brillante, esa que me estaba dedicando en esos instantes me hacía sentir enferma.

-Me asustaste.- fue lo primero que dije mientras este se acomodaba en frente mío -esto es para ti. Feliz cumpleaños.- le extendí la pequeña caja que este no tardó en aceptar.

-No me esperaba un regalo, no debiste.- sonrío -tu sola existencia ya es un regalo para mi.- no pude evitar hacer una mala cara a lo que este empezó a reír -fue muy cursi, ¿verdad?- el mismo asintió en respuesta -lo abriré luego.- guardó el regalo en uno de los bolsillos de su saco -pero déjame decirte que llegaste tarde.- bromeó tomando una de mis manos.

-Lo siento, tuve problemas al llegar.-

-Lo dejare pasar solo por esta vez.- besó mi frente -la verdad es que te estaba esperando para empezar con la cena, así que...- me hizo una seña para que lo siguiera.

Mis manos estaban sudando a medida que todos empezaron a caminar hacia la gigantesca mesa de comedor de aquel lugar. Este me ayudó a sentarme justo a su lado, por desgracia su madre y hermana estaban justo en frente mío.

Evité mirarlas. Hice todo lo posible mientras la comida empezó a llegar. Mi pierna subía y bajaba con rapidez debajo de la mesa y justo cuando empezaba a comer tan rápido para poder irme Harry a mi lado golpeó con cuidado una de las copas de vino con uno de los tenedores llamando la atención de todos los que estaban en la mesa.

De reojo vi como se colocó de pie.

Mierda.

-Primeramente les agradezco mucho a todos por venir hoy, no saben lo emocionado que estoy por todo, esta noche también nos acompaña mi hermosa novia Artemis Ikeda aquí a mi lado.- sentí una de sus manos en mi hombro -¿podrías ponerte de pie, por favor?-

Mordí el interior de mi mejilla, no quería hacerlo. Miré a todos a mi alrededor, la gente esperaba a que yo hiciera lo que esté me pedía tanto que sentí la presión. Lentamente me coloqué de pie mirando al hombre a mi lado que tomó una de mis manos.

-Es una noche muy especial, no solo porque es mi cumpleaños, sino porque estoy aquí con la persona más maravillosa de este mundo.- sentía las caricias de su dedo pulgar en el dorso de mi mano -la verdad es que tengo algo preparado para esta noche y estoy muy nervioso.- escuché risas de fondo -pero, Artemis, bonita...-

Tragué con fuerza, ¿por que tanto silencio? ¿Que está ocurriendo?

Entendí todo cuando lo vi empujar su silla hacia atrás y como este se arrodilló en frente mío mientras sacaba una cajita del bolsillo de su pantalón.

Mierda, esto no puede ser verdad.

-Nos conocemos desde hace mucho tiempo. Y siempre te he amado más que a nada en este mundo, ahora me gustaría seguir teniendo este tipo de recuerdos juntos para siempre.- sonrío y empezó a reír -No se si tuvo sentido, es solo que estoy muy nervioso.- los invitaron lo imitaron -¿que dices, mi amor? ¿Te casarías conmigo?-

Miré a todos a mi alrededor estos me hacían señas para que respondiera, una y otra vez. Empecé a respirar con rapidez, yo no quería esto.

-Yo...- mi voz se fue perdiendo -e-esto...-

-¡Vamos di que si!- alguien levantó la voz.

No pude contenerme después, eso fue demasiado.

-Yo... no puedo, perdón.- tomé mis cosas y salí corriendo del comedor.

Me abrí paso hacia la salida en donde ni bien abrí la puerta me detuve por culpa de la lluvia. Estaba enojada, quería gritar, no se que mierda había ocurrido ahí adentro pero eso había sido demasiado.

Ya me cansé, estaba harta de él.


Yoongicutiie.

Artemis;; hsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora