Lo que compatimos {joshler}

06

Era como si todo su mundo se moviera bruscamente en solo un parpadeo, aún estando en su trabajo no podía dejar de pensar en las palabras de Josh.

Tyler soltó un largo suspiro, hasta ahora Josh solo quería llevarse bien con él pero dadas las circunstancias ni siquiera una amistad era posible, sería difícil tratarse el uno al otro como si nada, aunque en realidad solo lo sería para Tyler. Además, estando tanto tiempo cerca de Josh sabía que le causaría un peor sentimiento de culpa, ser amigos lo haría todavía más horrible.

No podía vivir tranquilo si Josh estaba cerca, pero tampoco podía decirle que se alejara ya que una parte de él, la débil, se sentía mal de hacerlo, ya hacia mucho tratando de forma grosera sin razón como para hacer eso.

—Simplemente estás buscando excusas...

Al pensar eso, Tyler negó con la cabeza, no era de forma, para nada, ni un poco, o eso creía.

Tuvo un turno pesado pero al salir del trabajo tenía que llegar con su médico, necesitaba mas supresores que aunque su celo estaba muy lejos de pasar, se sentía nervioso de no tener aunque fuera un frasco, odiaba cuando su naturaleza le hacía actuar débil y sumiso, así que se había encargado de "cancelarlo" un tiempo después de que Theodore nació.

—¿Estás seguro de que necesitas otro frasco?, tengo entendido que aún no es tiempo—preguntó el hombre, alzando una ceja.

—No, todavía no lo es pero me conoces, me pongo nervioso si no tengo en casa—respondió Tyler alzando los hombros.

El hombre soltó un suspiro, entregándole la medicina—¿Sabes que puede pasar si sigues tomando esto de forma tan continua, no?.

—Lo sé, tranquilo, no pasará nada y si llega a pasar...no importa de todos formas—dijo de forma tranquila, sonrió poniéndose de pie—Adiós.

En cuanto salió y subió a su auto para irse, pensó en las mismas palabras que recibía siempre, su doctor siempre decía lo mismo, y sabía que solo le advertía por su bien, pero tenía miedo de que pasara algo como la vez anterior, si bien amaba a su hijo y estaba feliz de tenerlo en su vida, no quería que volviera a pasar, no quería volver a pasar él solo por algo así, no podría.

Tyler soltó un largo suspiro, estaba aún en su auto frente a su hogar, sabía que Theodore saltaría hacia él en cuanto cruzara la puerta. Dio un saltito cuando tocaron la ventana de su auto, era Josh, frunció el ceño y bajó la ventana.

—Hola...

—¿Estás espiándome?—preguntó repentinamente con enojo.

—No, no, lo siento, es que salí a comprar un café a un sitio que siempre iba seguido cuando vivía aquí y te vi, solo quería saludarte—Josh sonrió levemente pareciendo intimidado.

—¿Es ese lugar cerca de la fuente del centro?—preguntó Tyler, a lo que el pelinegro asintió—Vaya hace tiempo no voy a ir.

—...puedo ir contigo—dijo Josh amable.

—Pero tu ya tienes uno.

—Puedo tomarme otro—Josh rió bajito, movió el vaso de cartón dando a entender que ya estaba vacío—O simplemente puedo acompañarte.

Tyler se mordió el labio inferior mirando a otro lado—Solo unos momentos, ¿está bien?.

Josh asintió rápido, subió al auto cuando Tyler le abrió la puerta—Te ves algo cansado.

—Vengo de un turno de 12 horas, Josh—Tyler lo miró de reojo con una risa burla—No voy a verme como una princesa.

—Podemos salir otro día para que descanses—sugirió Josh.