Uncover - LIPSOUL

02

"Te voy a extrañar mucho."

Jungeun se dio la vuelta y se volvió hacia la chica que yacía a su lado en la cama. Su novia, Yena extendió la mano y ahuecó su rostro mientras le sonreía.

"No nos preocupemos por eso ahora" respondió Jungeun mientras le sonreía a la chica, "Todavía estoy aquí por ahora, deberíamos aprovechar nuestros últimos días juntas".

"Supongo que estas en lo correcto." Yena suspiró mientras envolvía sus brazos alrededor de la cintura de Jungeun, acercando a la chica a ella.

Jungeun estiró su mano hacia arriba, despeinando el cabello de la menor mientras se reía suavemente.

La Universidad de Chodang era una universidad enorme y le sorprendía que de alguna manera ella y Yena hubieran logrado cruzarse. La primavera anterior, Jungeun se había graduado del Colegio Público de Appleton en su ciudad después de un semestre bastante "agitado". Había sido admitida en la universidad de sus sueños para especializarse en Historia. Ir a la universidad en Jeonam era muy diferente.

Por supuesto, estaba el clima. Jeonam era cálido un buen porcentaje del tiempo, esto era un gran contraste con Appleton, apodada como 'ciudad de la lluvia' debido a la cantidad de lluvia que se producía. Jungeun tardó un tiempo en acostumbrarse a que el exterior estuviera seco en lugar de mojado. Estaba acostumbrada a irse a la cama con el sonido de la lluvia y tuvo que descargar una aplicación en su primera semana que reproducía el audio de la lluvia para usarla mientras se dormía. Era un territorio completamente nuevo en muchos sentidos.

Yena, por otro lado, estaba acostumbrada a grandes multitudes de personas y grandes espacios. Habiendo venido de la ciudad de Seúl, había sido aceptada en la Universidad de Chodang para estudiar Biología Marina. No tuvo problemas para establecerse y adaptarse a la escuela.

Parecían provenir de orígenes opuestos, por lo tanto, fue sorprendente para Jungeun que incluso estuvieran saliendo ahora. Había conocido a Yena en una fiesta. Era una de las primeras fiestas universitarias a las que había ido. Por lo general, pasaba las noches sola en su dormitorio. Esta noche en particular, Jungeun había oído hablar de una fiesta de una chica en una de sus clases y se había obligado a ir.

Dudaba incluso que se divertiría en dicha fiesta. Pero pensaba que debería ir, al menos una vez, para satisfacer la curiosidad que tenía. Evidentemente, Yena fue quien se acercó a ella. Pero para ser honesta, Jungeun la había estado mirando durante toda la noche.

"Oye, ¿te estás divirtiendo?" Yena le había gritado por encima de la música.

Jungeun se había vuelto tímida al instante, así que solo asintió con la cabeza, sin confiar en su voz. Estaba avergonzada de lo incómoda que se veía.

Yena, por otro lado, había encontrado que la tímida chica era muy intrigante. Siguió hablando con ella hasta que salió un poco de su caparazón. Al final de la noche, Yena la llevó de regreso a su casa donde terminaron viendo una película y conociéndose un poco más.

Jungeun no había esperado eso en absoluto. Cuando Yena le preguntó si quería volver a su casa, asumió que la chica solo estaba tratando de meterse en sus pantalones y se sorprendió mucho cuando Yena desapareció en su cocina y reapareció con un tazón de palomitas de maíz.

Su relación pareció florecer desde entonces. Fue un soplo de aire fresco para Jungeun, estaba ese consuelo que sentía cada vez que estaba con Yena.

"Bueno, sé lo que definitivamente voy a extrañar mucho durante el verano". Yena susurró al oído de Jungeun.

"¿De verdad?" Preguntó la mayor, su voz era burlona, ​​"¿y qué sería eso?"

Una pequeña sonrisa pareció arrastrarse por el rostro de Yena mientras admiraba a la chica que tenía delante. "Prefiero mostrártelo."