Pretty Boy [AiDeku] (+16)

#1

Cerro la puerta detrás de él, dejando su saco colgado en un gancho en la pared caminando hasta su habitación.

-Buenos días, Izuku - Saludo una de las chicas del lugar.

-Buenos días Sasha, ¿Como estas?

-Muy bien, gracias por preguntar.

Entro a su habitación y se sentó frente a su escritorio, sacando libros de su mochila y haciendo su tarea.

-¿Izuku? - Oyó la voz de su madre.

-¡Pasa!

La dulce Beta entro a la habitación vistiendo sus mejores ropas y su elegante sombrero que usaba para sus viajes, la sonrisa del menor decayó un poco al saber que nuevamente viajaría, pero no importaba, ya estaba acostumbrado.

-Tengo que decirte algo.. - dijo moviendo sus manos nerviosamente.

-¿Otro trabajo? - pregunto tranquilo sin dejar de escribir.

-Si.. P-pero pagaran más y solo iré por un tiempo, no te preocupes - dijo acariciando su cabello.

Dejo la pluma sobre el escritorio y volteo a abrazar a su adorada madre.

-Descuida, estaré bien por el tiempo que no estes - dio una de sus mejores sonrisas con mejillas sonrojadas.

Dejo la tarea a un lado y acompaño a su madre hasta la puerta para despedirse, dejando sus valijas en el auto y recibiendo muchos besos de su parte.

-Volvere lo mas pronto posible cariño.. - dijo con ojos llorosos -No olvides tus supresores bebe.

-Esta bien, cuidate mucho mamá.

Inko se subio al auto y se despidió a la distancia mientras el auto avanzaba y se perdia entre las calles, sintió una mano posarse en su hombro y volteo encontrandose a su abuela paterna, Tenko.

-Vamos adentro cariño, tomaras frío aquí.

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Sintió como su felicidad aumento al escuchar la noticia de su abuela.

-Deberas de trabajar un tiempo con las demás - fueron sus palabras.

Él no sabia muy bien en que trabajaban las demas Omegas y Betas de la casa, pero le fascinaba oir tantas risas en la casa durante las noches, queriendo él participar en las reuniones y saber de que tanto se reían.

Cuando les contó a las chicas estas cambiaron su rostro curioso a uno anormalmente triste y decepcionado, no supo por que, ninguna quiso decirle. Cuando un Omega estaba cambiando su ropa y maquillandolo de una forma que sus lindos rasgos se notaran más, pudo escuchar como Sasha discutía con su abuela, recibiendo una bofetada por parte de la Alfa por levantar su voz.

Pasadas las 8pm las personas comenzaron a llegar y las risas se comenzaron a escuchar, acelerando el corazón de Izuku al saber que por fin participaría en las reuniones.

-La jefa dice que ya es hora - Dijo un Omega al que peinaba a Izuku.

Sonrió emocionado al chico castaño y este lo acompaño hasta la sala donde de inmediato recibió todas las miradas de los Alfas y Betas que habian en el lugar, tímido se escondio detrás del hombro del Omega, recibiendo varias sonrisas de los hombres.

-Un Omega virgen, señores. - Dijo su abuela, presumiendolo cual trofeo.

Izuku paseo feliz entre los hombres sin saber bien de lo que hablaba su abuela, pero emocionado de estar entre tantas personas nuevas.

-¿Que edad tiene? - Un Alfa pregunto.

-¿Quieres que me manden a la cárcel? Tiene la edad suficiente - Contesto la mujer y todos rieron.

No había entendido bien de que se reían pero él tambien lo hizo, con mas suavidad que el resto, como le habian dicho que lo hiciera para verse bonito. Un Beta lo ayudo a subir a un pequeño escenario frente a la chimenea donde todos pudieran verlo mejor.

-Mercancia de la mejor calidad, señores - Dijo la anciana.

-¿Como sabemos que es virgen? - pregunto alguien entre la multitud.

-¿Alguna vez les he fallado? - Devolvió la pregunta -Un Omega virgen, es lo que es.

Se siente un poco incomodo al sentir tantas miradas, acomodando un poco las casi transparentes vestimentas que le habian dado, sonriendo a los hombre como le habian indicado.

-Hagan sus ofertas, señores. - Dijo la anciana.

De inmediato comenzaron a decir varias cifras de dinero, mas de las que Izuku pudiera entender que las personas tenían. Finalmente luego de unos minutos de debate, un Alfa logro ofrecer la cifra mas elevada, haciendo sonreir a su abuela con un puro en la mano y por ende a Izuku, reacio a lo que sucedia realmente debido a su inocencia.

El Mismo Omega que lo llevo, lo bajo del escenario y ambos se dirigieron a una habitación a la cual Izuku nunca habia entrado.

-Escucha muy bien lo que te dire, Izuku - Dijo el Omega sosteniendo sus hombros -Por ningun motivo te resistas a lo que ese Alfa quiera hacerte, sera mas facil afrontarlo.

-Esta bien. - contesto un poco confundido.

El Omega puso un collar en su cuello, cerrando el broche de este con una pequeña llave.

-No dejes que te quite el collar y te marque, ¿entendido? - Pregunto mirando los ojos verdes rebosantes de inocencia del menor.

Izuku asintió y recibio un abrazo por parte del castaño antes de irse, dejándolo allí en espera del Alfa.

Cuando llego miro de reojo al peliverde para luego servirse algo de licor que habia sobre un mueble y tomarlo de golpe, quitando su saco y dejandolo sobre la silla, acercandose a él.

-Eres hermoso, Omega - Dijo el pelinegro.

-G-gracias Alfa... - contesto con mejillas sonrojadas.

El mayor ofreció un poco del liquido al menor, viéndolo tomarlo con desconfianza y hacer una mueca cuando el amargo liquido paso por su garganta, devolviendole el vaso.

-¿Sabes que es lo que haremos, Omega?

-No Alfa, no me dijeron. - contesto.

Un leve miedo se instalo en su pecho cuando el hombre sonrió de forma escalofriante, recostandolo sobre la cama.

-Solo dejate llevar...

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Miro el techo de la habitación, observando fijo una araña balancear se con tranquilidad. Volteo con lentitud su cabeza viendo al Alfa vestirse e irse, dejándolo allí.

Volteo su cuerpo abrazándose a sí mismo, intentando procesar que habia sucedido, sin notar que varios Omegas habían entrado a la habitación.

Sasha, su amiga, fue la primera en abrazar su desnudo cuerpo lleno de magulladuras y moretones, haciéndolo gritar de miedo y llorar al instante. Los Omegas de inmediato lo abrazaron y cubieron su cuerpo desnudo sintiendo lastima por él.

-¿¡Por que hizo eso!? - preguntaba entre lágrimas -E-él me toco.. ¿Por que lo permitieron?

Los omegas sollozaron junto a él, ahogandose en su dolor, compadeciendolo.

Su abuela lo miro desde la puerta con el rostro serio, sin emoción alguna al ver a su nieto perder todo rastro de inocencia en solo una noche.

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Espero les guste esta nueva historia.

Aclaraciones de este Omegaverse:

°Sin una marca, no hay embarazo, por eso el collar que le pusieron a Izuku se cerraba con llave, para que fuera poco posible de abrir y marcar al Omega.

°La edad de educación sexual en esta historia es de 17 años (Ciclo de celo en la mayoria de Omegas y Alfas), es por eso su inexperiencia.

°Izuku vivía en un prostíbulo pero él no lo sabia.