Capítulo 8

251 38 2
                                    

Jeonghan empezaba adorar cómo su cuerpo se relajaba con la cercanía de Joshua. No entendía por qué reaccionaba de esa forma ante la presencia de alguien que conoció hace un par de noches, pero tampoco buscaba una explicación, simplemente lo iba a dejar ser y disfrutar de lo bien que se sentía.

Tal vez pudo quedarse en aquel perfecto estado de relajación, con sus manos envolviendo la cintura de Joshua, el viento agitando sus cabellos y con ello acarreando ese agradable aroma que olió en las sábanas esa mañana y que tanto lo hipnotizó, pero la imagen de alguien más se coló en su mente.

¡Seokmin!

Debido a todo el caos desatado anoche, Jeonghan no tuvo tiempo de pensar en su enfermero. Desconocía si volvió sano a casa o terminó siendo atrapado por la policía. Si lo último ocurrió, estaba seguro que ambos estaban arruinados. No solo le haría pasar el peor momento de su vida a Seokmin, sino que Ailee se enteraría y con ello su papá. Y adiós, a ese fugaz sabor a libertad.

Jeonghan apoyó la frente en la espalda de Joshua. De repente, ya no se sentía tan bien como al principio.

La moto se detuvo, pero Jeonghan no tuvo ánimos de levantar la cabeza o de alejar sus brazos de Joshua.

—La moto de Seungcheol está aquí. De seguro vino por Wonwoo —Comentó Joshua. A Jeonghan podría importarle menos si venía a sacar a Wonwoo o no, su mayor preocupación era Seokmin. El pobre, dulce, amable y encantador Seokmin quien probablemente estaba encerrado en un celda como un criminal. Era seguro que lo terminaría odiando después de esto. —Jeonghan, debo hablar con Seungcheol, y para eso necesito que me sueltes.

Los pensamientos del menor fueron interrumpidos ante esas últimas palabras. Joshua había tratado de deshacer el fuerte abrazo que ejercía alrededor de su cintura, pero al final fue el mismo Jeonghan quien terminó atrapando y acariciando de manera distraída esas grandes manos.

Se bajó con rapidez de la moto.

—L-lo siento. Yo... Estaba distraído —Joshua le sonrió con una mezcla de ternura y diversión.

—¿En qué pensabas?

—En Seokmin, mi amigo—Las palabras escaparon de inmediato de su boca. Sus ojos se encontraron con los de Joshua. Duda brillaba en esos ojos.

—Creí que no tenías amigos. —Dijo con seriedad. El corazón de Jeonghan se detuvo. Pero antes de inventar una excusa, Joshua repentinamente rió. Algo dentro de él se agitó cuando el índice de Joshua le golpeó de manera juguetona la punta de su nariz. —Ya acepté a qué te quedes en mi casa, no tiene que lucir asustado. Pienso que es gratificante que me escojas a mí sobre tu amigo, a pesar de que aún seamos casi desconocidos. Aunque no deberías tomar tanta confianza con los extraños.

Jeonghan sintió la necesidad de agregar algo ante lo último mencionado por Joshua, pero las palabras no vinieron. Así que se encontró admirando los ojos de Joshua, lo lindo y brillante que eran, cómo lo observaban con diversión y algo parecido al cariño.

No es cariño, se reprochó, nadie se encariña con un extraño trás un par de noches.

Deberíamos... —Las palabras de Joshua quedaron en el aire cuando su mirada se desvío hacía un lujoso carro negro que se estacionó a un par de metros —Esto no es bueno.

Joshua bajó de inmediato de la moto y, agarrando la muñeca de Jeonghan, siguió hacía la estación de policía a la persona que segundos antes se bajó del llamativo carro.

Jeonghan no estaba seguro porque seguían a la pequeña figura de ese chico, pero Joshua no lucía muy feliz, así que se abstuvo de hacer preguntas.

➸ Jihan 💫 HeartbeatDonde viven las historias. Descúbrelo ahora