Show me this life (Terminada)

You Here

Capitulo 11

El sol iluminaba el más suave pliegue de mi piel, cubierta por mantas delicadas que no la lastimaran, me sentía bien, me sentía fuerte…abrí los ojos para darme cuenta de que mi madre me esperaba con esa sonrisa que la distingue

—    Ya llamé a la escuela, retrasarán el evento unas horas más – dijo tiernamente

—    ¿Qué hora es? – tallé mis ojos para despertarme cuando me senté en la cama

—    Son las 8 de la mañana, se supone que el evento empezaría a las 9…pero mi princesa debe quedar lista así que comenzará a las 10 *-*

—    Gracias madre – sonreí y me abrazó, sabía que estaba destrozada por dentro, pero no quiso demostrarlo

—    Tu vestido esta listo, si necesitas ayuda, puedo venir a echarte una mano

—    Esta todo bien…yo…yo sola puedo

—    De acuerdo – besó mi frente y salió de mi habitación para escuchar sus pasos lejos

Suspiré al ver a mí alrededor y no podía dejar de lado ese vacío que me hacía sentir tan sola, solo una persona es la que me hacía falta de despedirme, pero esa persona no aparecía por ningún lado. Caminé al baño y me di una ducha, no haría esperar mucho a los maestros ni a mi madre solo por mi culpa de estar enferma, no quería tener prioridad…al salir, como de costumbre, puse música…esta vez de Metallica, algo fuerte para que mis sentidos se centraran en algo positivo y sonreír, me descargué al cantar mientras me colocaba la ropa interior, si…estaba delgada, pero no tanto como para demostrar mis huesos…como las anoréxicas aquellas…solo es que había bajado de peso por la falta de apetito, pero mi figura seguía conservada…. El hermoso vestido corto de color vino, resplandecía en el armario gritando que me lo ponga, así fue, lo deslicé por mi cuerpo de una manera sutil y me lo terminé de poner…escuché la puerta abrirse y sin mirar hablé…

—    Madre, ¿puedes subirme el cierre, por favor? Es que no alcanzo – dije con una sonrisa al sentir sus manos subir el mismo con suma delicadeza, pero algo me hizo abrir los ojos, un beso chocar en mi cuello, reconocer sus labios fue lo que me perturbó…

—    Que hermosa te ves – me dijo en suaves susurros sobre mi piel, me giré y con lágrimas en mis ojos quedé feliz de tenerlo aquí — lo siento tanto – me dijo con su rostro triste, con sus ojos empañados, con esa sonrisa apagada, no tuve de otra que rodear su cuello con mis brazos y ahogarme en llanto sobre su cuello

—    ¿Por qué me abandonaste cuando más te necesité? – repetía a cada instante apretando la chaqueta de cuero que tenía puesta, sus brazos me aferraban por la cintura

—    Lo siento amor, tenía miedo…un miedo estúpido que no me dejó abrir los ojos, de que estaba perdiendo a lo que más amo en la vida – me decía con su garganta cerrada — ahora se que con esto no voy a remediar nada, ni retroceder el tiempo perdido que la pasé ciego…en verdad…lo siento, es lo más que puedo decir

Entre caricias y varios “te amo” se iban los minutos, y quedé lista, el maquillaje sencillo, con unos finos tacones medios, él me tomaba de la mano al bajar las escaleras, notaba su mirada de tristeza al ver mi piel blanca y mi cuerpo a punto de romperse, pero mi sonrisa blanqueó aquellos ojos opacos, quería verlo feliz…este día tan importante para mí…

Así fue como llegamos, las ruedas de una silla me daban el impulso que necesitaba para poder llegar a ese evento, la gente me miraba y me sonreía, sabía que era por pena y por quedar bien, solo las sonrisas sinceras de mis mejores amigas y de mi segunda familia, fueron las que me rompieron el corazón. Todos los alumnos por graduarse estaban al frente recibiendo cada uno sus diplomas, sin más yo fui la última, y me levanté de la silla con ayuda de Brian para subir al podio y tomar el micrófono…

—    Creo que muchos ya saben lo que ocurre conmigo, no es fácil, pero si puedo decirles que llené mi vida con sus alegrías, con sus palabras, con sus consejos, terminé un ciclo escolar, y terminé mi ciclo de vida, quiero agradecer a todas esas personas que soportaron mi carácter, que sostuvieron mis ideas y me apoyaron…en verdad muchas gracias…en mi memoria quedaran…y espero, en aquellas personas importantes para mí, quedar en un espacio…dentro de su corazón, gracias – sonreí al levantar el diploma y bajé de nuevo

Aplausos y lágrimas fueron lo que me hicieron entrar en razón y darme cuenta de lo que había dicho…quizá serían mis últimas palabras…. Fiestas y abrazos, despedidas y lágrimas…todo acumulado en una sola noche, todo perturbado por un dolor interno…gritos, corridas, lágrimas de nuevo…solo recuerdo el movimiento rápido de los autos, llamándome…llamándome de no quedarme dormida…

—    ¿Cómo esta doctora? – escuché a la lejanía, fuera del cuarto donde estaba inmersa

—    Creo que usted sabe las palabras que voy a decirle – su llanto me conmovió y apreté las sábanas

—    Tranquila amor…yo estoy aquí – abrí mis ojos y en efecto…ahí, ese par de ojos marrones me sonreían con una claridad que jamás olvidaré

—    Me alegra que estés aquí – mi voz se escuchaba rara y agarré mi garganta con mi mano libre, pues la otra estaba enjaulada en sus delicados y largos dedos

—    Jamás me voy a ir – acarició mi cabello — es una promesa – veía en sus ojos que estaba a punto de llorar

—    ¿Brian? – este me miró y acaricié su mejilla — bésame ¿quieres? – suspiré con mis ojos cansados

Este rió despacio con sus ojos cristalinos, y se acercó a mí, sus ojos se cerraron para así sentir el choqué eléctrico…como el de la primera vez en ese concierto, nos sumergimos en el tiempo y no esperamos nada a cambio, solo el placer de aún seguir aquí…y demostrarle cuanto lo amaba de verdad, no estaba enojada por que me hubiera dejado, sabía su miedo…pero ahora que lo tenía aquí, quería que se quedara hasta que mi último suspiro se lo llevara él…en lo más profundo de su ser.