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31 de enero de 2021. (Madrugada)

Escucho los sonoros ronquidos de An y suelto un gruñido al darme cuenta de la hora que es.

2:00 am.

Me levanto de la cama y me dirijo hacia la cocina a oscuras, conociendo ya el camino a la perfección de tantas veces en las que las noches anteriores hice exactamente lo mismo. Cuando llego, abro el congelador y saco el helado que compré esa misma mañana antes del ensayo, sabiendo que esta noche no iba a poder dormir. Siempre me quedo hasta tarde mirando el techo hasta que An se duerme del todo y puedo escaparme al salón para ver una serie o simplemente ser yo misma y ponerme a escribir canciones que nunca serán escuchadas por el mundo.

Algo me hace saltar del susto y fruncir el ceño al sentir una extraña vibración en el bolsillo de mi pantalón de pijama. Saco el móvil aún confundida por las horas que son, dudando que sea Eric y preguntándome porque no he puesto el móvil en silencio como hago siempre durante la noches. Lo desbloqueo y me encuentro con un mensaje de "Mejor profesora", cosa que me hace sonreír y preocuparme al darme cuenta que tampoco duerme igual que yo. Entro al mensaje y lo leo en un susurro.

"De verdad estás conectada a cualquier hora?"

Eso me hace sonreír al recordar mis palabras y decido responderle enseguida ya que ella parece que está igual de aburrida que yo.

"Yo nunca miento"

Dejo el móvil en la encimera y abro el bote de helado, sacando una cuchara grande del cajón que tengo al lado. Lo cojo todo con una sola mano mientras busco con la otra el mando de la televisión y me siento en el sofá poniéndome cómoda sin inseguridad. Subo los pies en la mesa y pongo Netflix, lista para seguir viendo friends hasta las 5 de la mañana. Mi móvil vuelve a vibrar y antes de desbloquearlo le doy al play, comenzando a escuchar las voces de los protagonistas.

"Eso es una gran cualidad"

Sonrío no se porque y contesto con un simple:

"Lo se"

Por mensaje soy algo fría, debo admitir. Su respuesta no tarda en llegar y yo dejo de prestar atención a la serie que ahora están poniendo la canción inicial.

"Puedo preguntarte algo"

Frunzo el ceño y por una extraña razón asiento con la cabeza aunque no puede verme. Me río de mi propia tontería cuando me doy cuenta de ello y comienzo a escribir mi respuesta:

"Por supuesto, lo que quieras"

Tarda 10 minutos en contestar y por un momento pensé que ya se había acabado la conversación y que sin querer le había espantado. Intenté pensar en otras cosas y mirar tranquilamente la serie, centrándome en los problemas que tienen Monica y Chandler por esconder su relación de sus amigos. Me parece una tontería, pero me encanta la pareja así que no tengo quejas. Siempre me ha parecido que era mejor que Rachel y Ross, me encanta como se quieren y lo poco tóxicos que son. Cuando mi móvil vuelve a vibrar yo ya me había olvidado de él.

"¿Qué haces despierta tan tarde?"

Lo pienso.

¿Le digo la verdad o me invento una excusa?

Parece más viable decir que simplemente no podía dormir o que me hacía pis y acabé viendo friends en el sofá comiendo helado por un antojo nocturno. Aunque eso suena a embarazada. Tal vez le puedo decir que ya me iba a dormir, que me he desvelado viendo una película, pero suena a algo un poco irreal. O tal vez no. La verdad sería que es mi único momento para hacer lo que me dé la gana sin ojos mirándome mal por ser inútil y poder llevar la ropa que quiera sin que mi estilista le de un mini infarto por si alguien me ve. Pero suena hasta inventado eso ¿no? Se supone que yo soy libre, no le voy a decir a una desconocida que no lo soy. No la conozco, aún. Espero hacerlo. Tal vez estoy tardando mucho en contestar y tal vez le he dejado en visto sin darme cuenta, tal vez debería contestar, y tal vez ya me está afectando el hecho de dormirme tan tarde.

Lo pienso.

Nah, estoy bien.

"Comiendo helado ¿tu?"

Simple, pero efectivo.

Vuelvo a poner en marcha la serie y comienzo a reír por las tonterías. Normalmente no lo hago, no solo para no despertar a An sino porque no me encuentro lo suficientemente feliz como para reír por una tontería. Me cuesta hacerlo, desde hace varios años y por una extraña razón, ahora no puedo parar de sonreír. Bajo el volumen de la televisión y dejo el helado en la mesa, levantándome para coger una libreta y un bolígrafo, pero sin encontrar ninguno de los dos objetos. ¿Por qué no encuentro nunca nada en esta casa? Siempre viene todos los días una chica a limpiar y se supone que lo deja todo en su sitio, debería encontrarlo todo a la primera.

Uf, estrés en plena noche no es bueno.

Me rindo y desbloqueo mi móvil encontrándome con un nuevo mensaje suyo.

"No podía dormir"

Por dos amiga, por dos. Espera, ¿somos amigas? ¿tengo una amiga? Esto me va a costar de entender...

"¿Pesadillas sobre la realidad?"

Le pregunto sin poder evitarlo. Vale, entenderme, quiero saber si está tan rota como yo, ya que mañana nos tendremos que levantar temprano para el ensayo y no deberíamos ninguna de las dos estar despiertas.

"Premio"

Su contestación me hace sonreír, por una extraña razón.

"¿Y qué haces para distraerte?"

Muerdo mi labio inferior y pego un salto al escuchar ruidos provenientes de la habitación que compartimos An y yo. Apago el móvil y me acerco de puntillas a la puerta, comprobando que sigue dormido en su sitio, roncando como siempre. Suspiro con alivio y vuelvo al sofá, tapándome con una manta y colocando bien el cojín debajo mío. Debo admitir que ya he dormido varias veces en el sofá, no me gusta mucho eso de compartir la cama, no puedo dormirme si tengo a alguien al lado. Me acuerdo que tenía un conejo que siempre se tiraba media hora en mis pies por las noches y hasta que no sentía que se iba no conseguía conciliar el sueño. También, me incomoda, soy muy joven para ya parecer casada con un hombre y teniendo un trabajo "estable" por el momento. Prefiero dormir en el incómodo sofá y como siempre me levanto antes que él, pues no se da cuenta.

"En estos momento, hablar contigo mientras veo friends"

"Haces bien, yo estoy haciendo lo mismo ;)"

"Te sonará raro, pero... ¿Te puedo llamar? Así ponemos el mismo episodio y lo comentamos, ¿qué te parece"?

Mi corazón se acelera y siento como mis manos comienzan a sudar de una forma incontrolable. Mi ansiedad conecta con mi cerebro y las inseguridades invaden mi sistema haciéndome sentir pequeña y queriéndome esconder debajo de una piedra hasta que la tierra explote y todo el mundo muera. No, no me gusta socializar y menos en llamada. No puedes ver cuando la otra persona va a hablar y os vais interrumpiendo la una a la otra de una forma muy incómoda si no tienes confianza. Lo odio. Normalmente en las llamadas yo me quedo callada mientras la otra persona me regaña pidiendo explicaciones que nunca le doy. Siempre la respuesta es "lo haré mejor la próxima vez" antes de colgar. Pero esta vez no es así y me da miedo.

Después de analizarlo todo y notar que hay más contras que pros, presiono el icono de llamar y me pongo el móvil en la oreja, sin contestar el mensaje.

-Hola- escucho su voz y sonrío, sabiendo que esto ha sido la opción correcta.

Es hora de tener una amiga.

Cruel verdadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora