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— Espero que te hayas disculpado con él — dice Seulgi, enviando una bola por la pista. Derriba tres pinos.

Mark se disculpó, durante su escaso desayuno de tostadas sin nada encima que comieron en el estruendo de la máquina de café pasado el mediodía, así que dice:

— Lo hice — Donghyuck se limitó a asentir. La tostada estaba tan seca que se pegaba al paladar de Mark.

Seulgi observa a Mark preparándose para un lanzamiento.

— Te gusta, ¿verdad? — ella pregunta.

Mark falla el lanzamiento -por supuesto que sí- y tartamudea:

— ¿Salgo contigo? —

— Sí — admite Seulgi, como una reflexión tardía. Mark mira la pelota rodar y rodar y rodar para evitar mirarla. Suena ligeramente perturbada — pero es bastante guapo, ¿no? Y tiene poderes mágicos. No te culpo —

Mark se da la vuelta por fin para mirar a Seulgi imitando los chispeantes estallidos de magia con sus manos. Lo peor es que rebusca en todos sus archivos mentales pero no encuentra nada que refute su evidente creencia de que está loco por Donghyuck.

— ¿Pero tú también eres mágica? — chilla.

— Te diré algo — Seulgi inclina sus caderas hacia la izquierda. Levanta una bola rosa y gesticula con ella — Si gano esta ronda, me invitas unos fideos y luego vas en busca de Lee Donghyuck —

— ¿Cómo puedes estar tan segura de que me gusta? —

Seulgi simplemente sonríe y se da unos toquecitos en la nariz.

— Es cosa de dragones —

Mark suspira.

— ¿Y si gano? —

— No tienes que comprarme comida, pero igual tienes que conquistarlo — concluye Seulgi encogiéndose de hombros.

Mark gana. De todos modos, le compra a Seulgi una taza de fideos instantáneos.

A Mark le cuesta creer que a Seulgi no le moleste en absoluto. Cuando le pregunta si realmente está bien, ella le da un beso en la mejilla, le da unas palmaditas en la espalda y le dice:

— Hay cosas que van más allá de los amoríos de instituto. Oh, y dúchate o algo así, ahora mismo estás desfilando para que todos sepan que has pasado la noche abrazando a un chico —













La madre de Mark abre la puerta y lo golpea accidentalmente en la cabeza con ella. Pasa por encima de él con cuidado. Mirándolo, apenas moviendo la boca, le pregunta:

— ¿Qué haces en el suelo? —

— Pensando — responde Mark, porque intenta no hacerlo.

Mark está rodeado de trozos de papel. Son fragmentos de los poemas que ha escrito. Ya no está tan seguro de sobre quién los escribía ni de qué quería decir Seulgi con eso de cosa de dragones y si él es el único que está confundido.

La madre de Mark le pone un tazón de arroz salteado al costado de su hombro.

— Come, podrás pensar con más claridad — le ordena, y luego vuelve a salir de la habitación de Mark.

Mark se pregunta qué demonios ha pasado.















































¿Recuerdan el capítulo donde Mark va a la casa de Hyuck y el padre de Hyuck esta sentado en la entrada porque dijo que algo sucedería si lo hacía?

Me hace pensar que Mark quizo hacer lo mismo, se sentó a esperar a que algo sucediera en sus pensamientos

Y con Seulgi diciendo cosas de dragones me hace creer que sus amigas y ella saben que Donghyuck gusta de Mark o tal vez solo un sexto sentido

sim sala bim || markhyuck || Donde viven las historias. Descúbrelo ahora