•|𝕮𝖆𝖕𝖎𝖙𝖚𝖑𝖔 11|•

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Narra ________.

Sentí como mi mundo regresaba en si, me sentí acostada en un lugar muy cómodo. Abrí mis ojos lentamente, la luz del sitio donde me encuentro es tenue, parpadee rápidamente, recuperando la visión.

Me encuentro en una habitación de hospital. Intenté levantarme pero un dolor punzante en la pierna derecha me lo impidió, la mire y ésta estaba enyesada. Rápidamente los recuerdos volvieron a mi mente. Raditz llegando a Kamehouse, el contándonos nuestro verdadero pasado, luego raptando nos a Gohan y a mí, la pelea, mi pierna rota...Goku sacrificando su vida para derrotarlo.

Una lágrima llena de tristeza se asomó y deslizó por mi mejilla. No había sido una pesadilla, todo lo que había acontecido anteriormente, había sido real. En ese momento, escuché la puerta abrirse, giré mi rostro y una cabellera azul se asomó, era Bulma con una bandeja de comida en sus manos.

—¡Buenos días ______!—con alegría se acercó, dejando la bandeja encima de una mesita a lado de la cama—Me da gusto que hayas despertado, ya te estabas tardando—golpeo con delicadeza mi hombro, yo entre abrí mi boca y fruncí mi ceño con confusión—

—¿A qué te refieres con que...ya me había tardado?—cuestioné, ella acercó una silla justo a lado de la cama y se sentó en ésta—

—Lo digo porque estuviste inconsciente una semana—habló en tono neutral—

—¿¡Una semana!?—exaltada me senté de golpe, pero de la misma rapidez sentí dolor en mi pierna—Agh—me quejé del dolor, regresando mi espalda a la cama—

—No intentes levantarte, te vas a lastimar—se puso de pie, en ese instante entró a la habitación Krilin—Oh, hola Krilin

—¡Hola!, veo que ya despertaste—entró Krilin con un ramo de flores—

—Hola Krilin—sonreí serena—¿Son para mí?

—Si, espero que te gusten—me las entregó, yo las olfatee, su aroma era relajante—

—Me encantaron, gracias—cerré mis ojos sonriendo alegre, dejando las flores en un florero que había a un lado de la cama—

—Oye Krilin, ¿Ya llegaron los demás?—le preguntó Bulma—

—No tengo idea, pero no tarda en venir el Maestro Roshi—se sentó en otra silla—

—Oigan muchachos, ¿Dónde está Gohan?—pregunté, ellos me miraron nerviosos y asustados al mismo tiempo, esas miradas me preocuparon—¿Acaso le pasó algo?—me senté nuevamente sintiendo el dolor, pero evitando lo—

—T-te dije que no te levantes ______, te vas a las...—dijo Bulma reincorporando me, pero la interrumpí—

—Les hice una pregunta y quiero la respuesta—hablé sería sentando me recta—¿Donde está mi hijo?—cuestioné firme—

—Amm, b-bueno y-yo—tartamudeo Bulma—¡Que esperas tonto, dile!—empujó a Krilin quien estaba temblando—

—¿Ha?, ¡¿Porque siempre yo?!—molesto recriminó mirando a Bulma, pero ésta lo fulminó con la mirada—E-este—bajó su mirada jugando con sus dedos—E-este, Go-Gohan, Es que tú, b-bueno, Piccolo, e-entrenando, m-mimado, un año—empezó a balbucear, acabando con mi paciencia—

—¡Deja de balbucear!—grité apretando mis puños, mirándole con un rostro asesino, el se inclinó hacia tras cubriéndose con sus manos—

—Piccolo se lo llevó para entrenarlo durante un año—escuché la voz del maestro Roshi detrás de nosotros—

𝕃𝕒 ℙ𝕣𝕚𝕞𝕖𝕣𝕒 𝕃𝕦𝕟𝕒 •|𝓖𝓸𝓴𝓾 𝓨 𝓣𝓾|• (PAUSADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora