Jin un Alfa de la especie de lobos Bora, que desde la muerte de su Omega, perdió toda motivación. Pasaron 15 años y sólo queda el rastro de aquel gallardo lobo, que sacaba suspiros a todos a su paso.
Cierto día decide obedecer a su amigo guardaespa...
. . Si la vida te da tenues pistas, ¿Uno es capaz de reconocerlas? Si fuera así, nunca nos quedaríamos de nuestras malas decisiones. . .
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Un nuevo día empezaba, al fin su celo terminó, por lo que muy temprano se levantó para darse una ducha y estar listo lo antes posible.
Con el cepillo de dientes en la boca, ingresó de golpe a la habitación contigua dónde yacía un muy dormido Yoongi que Jin juraba haberlo escuchado ronronear.
-Despierta- pedía meciéndolo, pero el contrario sólo se tapaba más murmurando un -déjame dormir- Jin no tuvo más paciencia y terminó jalando las sábanas con un fuerte grito - ¡Despierta de una jodida vez!-
Yoongi se levantó de golpe, asustado por los tremendos gritos, tomando su arma para atacar al desconocido.
-Tranquilo, Min. Soy yo- se quejaba Jin al ver esa reacción tan torpe y repetitiva.
-Pude haberte matado, no me vuelvas a despertar así- guardaba su arma en la funda.
-Ni siquiera le quitaste el seguro, no me vengas con mentiras- bufó, Yoongi siempre reaccionaba así cuando despertaba de golpe.
-¿A qué se debe tu alegre manera de despertarme?- preguntó sarcástico.
Jin rodó los ojos - debemos ir a la casa de té, sabes que necesito buscar a V- le lanzó sus pantalones de la pijama que estaba tirado en el suelo.
-Anoche volví al Host Club- se puso el pantalón de pijama - no me mires así, tu Omega no estaba allí y el mío tampoco- bajó el tono de voz, estaba triste por no haber podido hablar con ese tierno Omega, por ese motivo sólo se quedó como dos horas y regresó al hotel.
-Eso me alivia- Jin se fue al baño de Yoongi a terminar de lavar sus dientes.
-También averigüé que tu Omega ya trabaja en la casa de té, ayer lo vi en su show de la ceremonia del té, todo el público quedó maravillado- informó entrando al baño para también lavar sus dientes.
-Es obvio, él es perfecto- respondió con orgullo.
-No te pongas tan feliz, si el que maneja ese lugar ve lo popular que se está volviendo, estará entre los favoritos y será más difícil que te lo den todo un día, porque perderían calientes que sólo quieren ver su show-
-No me interesa, aunque dos horas con él me es suficiente- respondió secando su rostro.
-¿Vas a cogerlo sin descanso en dos horas? Porque yo lo haría si tuviera tan poco tiempo - exclamó insinuante moviendo sus cejas una y otra vez.
-Eso es porque tu sólo piensas con la cabeza de abajo- se defendió, aunque la verdad esa idea le pareció muy tentadora - quiero hablar con él, conocerlo más, no sólo tomar su bonito culo- argumentó sonando ofendido.
