INEFABLE (Volkacio)

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HORACIO

¿Ósea que nunca signifique nada para él verdad?, me parte el alma imaginar que el me utilizaba de alguna manera, me duele pensar que yo en verdad lo quería, él verlo me trasmitía algo que no puedo explicar, pero nunca fui nada para el... aunque debí saberlo desde el principio. A decir verdad ya debería estar acostumbrado a que estas cosas me sucedan ya que nunca soy suficiente para nadie y duele como no se pueden imaginar, estoy intentando no llorar más, mi cabeza duele terriblemente y después de todo lo que Gustabo me contó y de todo lo que le dije, estoy agotado física y emocionalmente, intento no pensar más en ello y procedo a intentar dormir.
Son alrededor de las 10 am, me despierto con un fuerte dolor de cabeza y me levanto para observar la gran vista que se pueda ver desde aquí, es un día frío y se nota que hoy va a ser un día bastante apagado, -Hola guarro, vamos a comer algo afuera ¿no?, para despejar la mente- dice Gustabo quien ya está despierto y se acerca hacia donde estoy, -Está bien- digo mientras sigo viendo hacia la ventana, los dos nos quedamos admirando lo bella que es la ciudad y en eso digo -¿de que sirve tanta belleza si todos estamos jodidos por dentro?-, Gustabo me observa y respira hondo -Horacio, el héroe de esta ciudad no diría algo como eso, ponte algo decente y vamos, ánimo Hostia- dice mientras se va a colocar los zapatos, miro una última vez el hermoso paisaje qué hay a mi alrededor y me alisto para salir.
       Salimos del departamento y siento un poco de presión en el pecho, no quiero verlo, salimos con rapidez y subimos al coche, Gustabo va manejando mientras intenta poner una buena emisora, pero me duele tanto la cabeza que lo detengo, veo que intenta hacerme sentir mejor, pero definitivamente nada lo hará. Llegamos a una cafetería y pedimos cada uno nuestro desayuno, mientras llega la comida le digo a Gustabo lo que venía pensando de camino aquí -Gustabo, he tomado una decisión- le digo mientras él me mira un poco intrigado, - que vas a hacer- dice mientras se sienta bien en su silla, -creo que lo mejor para mi es mudarme de aquel edificio, no quiero sentir miedo de salir y encontrar.. encontrarme a.. à ya sabes quien- digo mientras se me dificulta un poco hablar , -joputa me habías asustado, pensé que querías matarte o algo así, yo te ayudo a cambiarte de casa- dice mien atrás suelta una ligera sonrisa y se acerca para darme dos palmadas en el pecho.

GUSTABO

     Terminamos de comer y mientras vamos de salida, recibo una llamada *llamada entrante de Tio Tom* (Gustabo tiene guardado a Conway de esa manera) decido responder y antes de que pueda decir algo le comento, -papu, andamos ocupados ahora, tomaremos vacaciones Horacio y yo para hacer una cosas- digo mientras volteo a ver a Horacio y me mira sorprendido de lo acabo de decir, a lo que el superintendente responde - ¿pero es que ahora nadie quiere trabajar o que coño?, mira capullo como me enteré que están haciendo el gamberro les voy a partir esa puta cabeza- dice muy cabreado, mientras yo menciono - ¿quien más pidió descanso?- a lo que el súpervergaardiente dice -el hijo de puta de Volkov, ya nadie quiere trabajar O QUE COÑO- luego de decir eso cuelga y me quedo un poco impactado, decido contarle a Horacio lo que hablé con el superintendente, pero no lo de que Volkov está descansando, prefiero no agobiarlo más sobre ese tema, nos subimos al coche y lo llevo a mi casa para que pasemos allí la tarde y se despeje un poco de todo.

CONWAY

    Ya son casi las 9 am y ni los Capullos de Horacio y Gustabo, ni el cabron del comisario Volkov han dado señales de vida, decido llamar a uno por uno y comienzo con Volkov, llamo varias veces pero al parecer no responde, unos cuantos minutos después me llega la notificación de que me ha mandado un mensaje de texto, *mensaje si leer de Volkov: Superintendente, lamento no contestar, no estoy en condiciones, remitiré una carta para pedir mis vacaciones, luego nos vemos*,me quedo extrañado, el no es una persona que de la nada haga este tipo de cosas, tendré que averiguar más a fondo qué sucede, me canteo un poco pero lo dejo, luego llamo a Gustabo y me dice que él con Horacio también tomarán vacaciones, ahora al parecer todos se van a la puta y la comisaría se queda sin gente, -FANTÁSTICO- digo mientras saco un tabaco y me lo voy fumando mientras me voy a mi coche para patrullar.