INEFABLE (Volkacio)

25-1

GUSTABO

Cuando Conway abrió la puerta decidimos poner un reflector que le diese en todo el rostro y luego si decir -SORPRESAAAA- todos estábamos felices. Conway cuando pudo entender lo que pasaba se quedó en silencio, camino lentamente hacia las bebidas y se tomó un Whisky hasta el fondo, todos sabíamos que aunque no dijese nada, no se esperaba esto y le hacía ilusión, -Feliz cumpleaños Superintendente- dice Volkov mientras se acerca a darle la mano, Conway hace mueve su cabeza haciendo ilusión a que gracias, para que luego todos lo empezaran a Felicitar, -es raro ver al papu tan tranquilo- le digo a Horacio que esta parado junto a mi, -no te preocupes que ahorita que pueda saca la porra y empieza a romper cabezas- dice Horacio mientras soltamos una carcajada. Esperamos un poco a que la gente se dispersara y nos dirigimos hacia él con Horacio, -Feliz un año menos de vida viejo- digo mientras le doy la mano y me burlo un poco, -feliz cumpleaños papi- dice Horacio quien también le da la mano, Conway nos mira y suspira -me tomaron por sorpresa la verdad, quería irme a tomar por culo, pero bueno, si ya estamos acá vamos a beber capullos- dice Conway mientras levanta su vaso para bebérselo hasta el fondo.
Son alrededor de las 10 y la fiesta hasta hora está comenzando, le subieron un poco más a la música y más gente empezó a llegar, puedo ver al súper un poco molesto con todo, pero en el fondo lo está disfrutando. Recibo una llamada que esperaba y por fin me dirijo a decirle a Horacio la sorpresa que le tenia, lo busco en la multitud y lo encuentro sentado tomando unas copas con Mussa, -Oye guarro, ven que te voy a decir algo- le digo mientras levanta la mirada y me sigue, -¿quieres bailar un poco o no hay huevos?- dice Horacio un poco feliz, -no seas guarro, te necesito por otra cosa, ¿recuerdas que te tenia una sorpresa?- veo a Horacio fruncir el ceño y emocionarse - ¿Que es????- dice Horacio, yo miro mi teléfono y digo -Mira hacia la entrada- veo cómo gira su mirada lentamente y gira la cabeza un poco para ver mejor, no alcanza a ver porque hay gente que tapa la vista, así que observo cómo pasa a persona por persona y cuando se da cuenta quien está allí, se queda inmóvil y sonríe.

HORACIO

Ha llegado bastante gente a la fiesta, me siento feliz de que el ambiente esté tranquilo, estuve sentado un rato tomando unas copas con Mussa, -hoy tengo ganas de tomar bastante-, digo en mi cabeza mientras veo cómo Gustabo se acerca y me dice que me nesecita, me levanto de la silla y me dice que si recordaba que él me tenía una sorpresa, evidentemente me emociono y le pregunto que cual es, a lo que él responde -mira hacia la entrada-, no sé qué clase de sorpresa sea, pero intento ver y no veo con claridad, por lo que empiezo a pasar por la multitud de gente y del ruido qué hay, empieza a acercarme más y más, no quito la mirada de aquella entrada y cuando por fin pude ver, logré ver una silueta, había una luz afuera así que yo estaba viendo a contra luz, pude ver cómo era una persona con traje, me acerqué un poco más y por fin pude distinguir aquel cuerpo que se me hacía conocido, era aquella persona con la que he estado hablando en las últimas semanas, era aquella persona que siempre se preocupaba por mi y me hacía buenos comentarios, era nada más ni nada menos que el Doctor muerte.
Cuando lo vi allí con ese traje que llevaba puesto, me fue imposible no sonreír, por un momento olvide que estaba en una fiesta y todo el ruido cesó, el entro lentamente y me dio un ligero abrazo de saludo, lo miré y le dije -¿Como... como es que terminaste aquí?- a lo que él responde -Gustabo me invito, aparte a algunos del hospital también nos habían dicho que habría una fiesta... te molesta que haya venid...- y antes de que pudiese terminar la frase dije con un tono un poco alto -No, no, para nada, ehh... es más, me alegra muchísimo que estés aquí- digo mientras él me da una sonrisa, giro para ver a Gustabo y el dice -Joder, aquí como que sobró, yo mejor me voy- Gustabo siempre con sus comentarios tan oportunos, nos hace señas de que se va y poco a poco veo cómo se aleja, regreso mi mirada a Claudio, que por cierto, gracias a estar hablando con él últimamente por fin pude saber su nombre. Nos miramos y digo -Bueno... este... ¿quieres algo de beber?- a lo que él menciona -Si, vamos- al parecer esta noche va a ser mejor de lo que esperaba.