Uchihas

876 76 21
                                    

Mi mamá siempre se ha sentido feliz cuando invito personas a la casa por dos razones. La primera, siempre he sido tan distante que ella llegó a pensar que jamás podría simpatizar con nadie. Eso cambio cuando conocí a Naruto y poco a poco fue introduciéndome con todos, y claro mi familia lo quiere como a un hijo. En segunda, por la constante necesidad de mi madre por sentirse útil.

-Sasuke, me alegra tanto que trajeras a tus amigos-

-Ah sí, perdón por no avisarte antes pero ellos insistieron en venir-

-Oh no te preocupes, ¿crees que quieran algo de tomar?-

-¿Puedes preguntarles tú? necesito ir a mi cuarto rápido, así también platicas un rato con ellos-

Su rostro se iluminó, en seguida comenzó a preparar vasos y sacar golosinas de todos lados. Una culpa me invadía al sentir lastima por ella.

-Ah por cierto ¿Itachi está en la casa?-

-Fue a la oficina con tu padre-

Perfecto, eso significaba que no estaría aquí diciendo comentarios estupidos. Subí con rapidez y elegí un conjunto simple de ropa. No sabía qué idiotez estaba haciendo, pero el hecho de que Sakura venga me hace querer arreglarme aunque sea un poco. Tal vez hoy podría tener la oportunidad de hablar con ella a solas y averiguar un poco más de su vida. Justo en ese momento mi celular sonó, sin ver la pantalla podía sentir de quién se trataba.

-Hola-

-Hola Sasuke, soy yo Sakura Haruno-

-Ah sí dime, ¿ya estás afuera?-

-No, a Ino se le olvidó mandarme la ubicación y mi chofer se fue recoger unas cosas, así que no hay nadie que me lleve. Lamento no poder ir, pero espero que todos se diviertan-

Sentía un hueco en el estómago, como cuando tienes un examen sorpresa, o estás a punto de recibir una mala noticia, pero esto era totalmente diferente; sólo era una compañera que me cancelaba.

-¿Sasuke? ¿Estás ahí?-

-Mándame tu ubicación y ahorita voy- ¿Pero qué mierda estaba diciendo?

-No quiero molestarte, ademas estás en tu casa y tienes invitados- y ella tenía toda la razón, pero no podía desaprovechar esta oportunidad.

-Solo mándamela, no te preocupes por lo demás-

-Está bien-

Colgamos y en seguida me llegó el mensaje, la agende como "Haruno" y salí del cuarto. Mi corazón palpitaba cada vez más fuerte con cada escalón que bajaba. Yo no era así, jamás actuaba de manera impulsiva y menos por alguien. Pero me negaba a darle más vueltas al asunto, no era momento de psicoanalizar mi comportamiento.

-Sasuke ¿por qué te cambiaste?- Ino me miraba curiosa

-Quería estar más cómodo- agarré las llaves del auto.

-¿A dónde vas dobe?-

-No tardo mucho, cualquier cosa díganle a Naruto, de todos modos prácticamente vive aquí-

Huí de su vista antes de que hicieran más preguntas. Arranqué y puse la dirección, ya estando a punto de llegar me di cuenta del poco tiempo que hice. No quería verme desesperado así que me estacioné a una cuadra esperando que pasaran unos minutos más. Mierda Sasuke pareces un puberto en su primera cita.

Experimentos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora