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Los tres hombres llegaron a la oficina en silencio y el medico se sentó en el escritorio para llenar una receta medica.

Alexander siguió a Antoine quien intentaba sacar el teléfono que repuesto que guardaba dentro de la caja fuerte.

"Tengo una duda." Hablo el medico y ambos voltearon confundidos.

"¿Qué sucede? ¿Hay algo mal?" Hablo Alexander preocupado.

"¿Qué apellido debería usar? ¿Andrews o Halloway?" Pregunto el hombres sin levantar la cabeza y Alexander parecía no tener voz para responderle.

"¿Qué?"

"Sabia que algunas veces te gustaba ir contra las reglas y desafiar a tus mayores... pero, ¿una hija? ¿esperabas que no lo notaria? me ofende que dudes sobre la capacidad de mi memoria al poner frente a mí una copia exacta de mi buena amiga Margaret Halloway y esperar que no lo notara." Alexander se sentía como un niño de nuevo al escuchar a uno de los hombres que lo miró crecer desde el vientre darle un sermón. "¡Tiene quince años! ¿America? ¿La escondiste en America?"

"Finalmente" dijo sonriendo Antoine al saber que la furia del hombre le daría una lección a su mejor amigo que él deseaba evitar. "Me retirare a entregar esto, regresare en un momento." Dijo alejandose de ellos y caminando tranquilamente hacia las habitaciones "Pueden hablar tranquilos... Doctor Johnson, no debería preocuparse por sí necesita gritar. No se escuchara nada hacia afuera." le sonrío de oreja a oreja y Alexander lo miró incrédulo cuando la puerta se cerro.

Bastardo.

"¿Acaso tu padre te crió de esa manera? ¿a ser un Mentiroso sin sentido de la responsabilidad?"

"Yo no soy un mentiroso." Dijo en un susurro.

"Lo lamento, olvide que no estabas mintiendo... ¡simplemente estabas ocultando la verdad! tu padre estaría muy decepcionado de ti."

"No, la decepción de mi padre iría a otro lugar... Usted no tiene la menor idea de lo que luche para tener la custodia de mi hija ¡Mi hija! de que la cual no sabia de su existencia hasta hace unos meses." Se levanto de la silla intentando mantener la calma. "Si quiere señalar a un culpable, entonces vaya con mi madre. Ella es la responsable de todos los problemas que rodean a esta familia por los últimos dieciocho años." El hombre lo miro confundido. "Había una carta en el cajón de mi madre, era de una antigua novia con la que tuve una cota relación en America. Estaba embarazada y si no me casaba con ella, iba a dar al bebe en adopción." se rio agriamente. "Creo que ya sabemos cuál es el resto de la historia ¿no?"

La puerta se abrió lentamente dejando ver a Elizabeth con una mueca de confusión total en su rostro, Alexander la miro impaciente y esa respondió tartamuda.

"Es la madre de Delilah Andrews, quiere hablar con él director."

"Creí que..." Hablo el doctor en un susurro.

Miss AmericanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora