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Había pasado una semana desde que Hyunsuk le había confesado su orientación sexual, el mayor había ido esos días a visitarlo e irse justo cuando la hora de visitas terminaba. Jihoon al principio se sintió incómodo y nervioso, pero después de hablar con el mayor, de convivir con él y escucharlo.

Llegó a la conclusión.

Seguía igual o más enamorado de él.

Y tenía miedo.

No quería que le vuelvan a romper el corazón, no quería sufrir más.

Hyunsuk fue quien lo había animado cuando no tenía ganas de nada, cuando pensó que ya todo había terminado para él. Y gracias a eso, es el que se convierte en la misma persona que puede acabar con él con sólo unas palabras.

Le faltaban unos días más para salir del hospital, y sentía el miedo de que Hyunsuk ya no le hable al salir. Porque no confía completamente de que el mayor esté con él sólo porque quiere ser su amigo.

Y esa es otra cosa. Hyunsuk dijo que quería ser su amigo. Leyó la libreta y llega a decir eso, acaso se estaba burlando?

Sus pensamientos se dispersaron al ver a Hyunsuk regresar de la cafetería. El mayor había llegado en la mañana para estar con él desde temprano, había llegado sin comer, por lo que Jihoon le exigió que fuera a comer algo.

- Te traje un jugo. - Hyunsuk le extendió la cajita.

Jihoon todavía no podía comer cosas pesadas, y lo único más o menos bueno en el hospital y que no sea pesado, eran los jugos de la máquina expendedora. - Gracias. - agradeció Jihoon al tomar la cajita.

- Sabías que está mal pegarle a la máquina expendedora? - mencionó Hyunsuk abriendo sus barritas. - El oficial quería sacarme del hospital por hacerlo. - rió. - Pero la mamá de Doyoung estaba por ahí, espero que no le diga a mí mamá que estaba aquí.

Jihoon miró a Hyunsuk con duda. - Tu madre no sabe que estás aquí?

Hyunsuk negó. - Algo así, sabe que estoy con un amigo, pero no que estoy en el hospital.

Jihoon lo miró con ojos entrecerrados. - Le mentiste.

Hyunsuk abrió de más los ojos, mordiendo su barrita de fresa. - No! Sólo no le conté toda la verdad.

- Eso es mentir.

- No lo es. - volvió a negar. - Le dije que iba con un amigo y eso hago. - lo apuntó. - Ella no me preguntó a donde, así que si ella no pregunta, no le tengo que decir.

Jihoon pensó en sus palabras, para después asentir. - Bien, tú ganas.

Minutos después, Jihoon notó las ojeras que cargaba Hyunsuk, a parte de sus ojos cansados que amenazaban con cerrarse.

Hyunsuk siempre llegaba temprano y se iba tarde, en ocasiones hacía su tarea en la habitación, pero siempre lograba distraerse con Jihoon. Se sintió culpable, le estaba quitando tiempo a Hyunsuk.

- Suk. - le habló, haciendo que el contrario abriera los ojos de golpe. - No quieres... acostarte?

- Eh? - soltó confundido. - Acostarme?

Jihoon asintió. - Te ves cansado, no quieres dormir?

- Pero no puedes estar mucho tiempo parado.

- Me refiero... - mordió su labio avergonzado. - A acostarte a mí lado.

Las mejillas de Hyunsuk pasaron a color rosado. Algo de lo que se había dado cuenta Jihoon, era que al mayor sí se le sonrojaban las mejillas, dándole el aspecto a un cerdito.

ɴᴏᴛᴇʙᴏᴏᴋ ● ꜱᴜᴋʜᴏᴏɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora