01. Deseo inherente

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Esa era una tarde más sin Scott, su amigo realmente se había tomado enserio el mejorar en la escuela y considerando sus calificaciones y lo atrasado que estaba, necesitaba dedicarle mucho tiempo y esfuerzo si quería verdaderos resultados y Stiles como buen amigo no interferiría en sus planes, porque sabía que eso también le ayudaba a lidiar mejor con la ausencia de Allison desde que se fue a Francia.

Así que sin Allison y con un Scott recluido, Stiles y Lydia empezaron a pasar más tiempo juntos, al principio solo se había ofrecido a ser el intermediario entre los apuntes de la chica y Scott, pero ahora que las clases estaban por terminar y sin mucho por hacer, visitaba muy seguido a la pelirroja, aunque para ser honestos la chica lo ignoraba la mayor parte del tiempo, pero no parecía molestarle la constante presencia del castaño.

Esa tarde Lydia se encontraba traduciendo el bestiario de los Argent para practicar su latín y Stiles estaba acostado boca arriba con su cabeza fuera del borde de la cama, sostenia las hojas hacía arriba con sus brazos estirados, leía distraído el trabajo de la chica y todo transcurría con normalidad hasta que un párrafo llamo su atención y al girarse rápidamente estuvo a punto de caerse.

— Lydia ¿estas segura de esta traducción? — dijo el castaño intentando permanecer calmado mientras se levantaba para señalar una línea.

— Claro que estoy segura — Contesto la pelirroja sin siquiera ver el párrafo al que se refería Stiles.

— Pero aquí dice que los omegas son los encargados en las manadas de procrear y no hace distinción entre hombres o mujeres — Lydia se acercó a leer el manuscrito original.

— Si, es lo que dice el original, supongo que realmente no importa el género, mira esta imagen — y Stiles la observo con atención, era el dibujo de una manada donde todos eran hombres, pero había unos niños al cuidado de uno de ellos y eso no era todo, ese hombre tenía abultado su vientre como si estuviera embarazado.

— Esto es increíble Lydia ¿puedes imaginarlo? — Dijo Stiles y ya no podía ocultar su emoción.

— Creo que los hábitos de reproducción de los hombres lobo, no es lo más importante ahora Stiles, aún nos quedan muchos seres sobrenaturales de los que no sabemos nada — contesto la chica restándole importancia.

— Pues a mí, si me parece importante — replico el castaño un poco indignado. — De ser real sería un gran descubrimiento, no puedo creer que te de igual, cuando deberíamos estar investigando más al respecto.

— Aquí no hay más información y si tanto te importa ¿Por qué no le preguntas a Derek? él nació en una familia de lobos, es probable que él sepa más de ese tema — Y el castaño dejo las hojas impresas en la cama y rápidamente se dirigió a la salida.

— Tienes razón iré a buscarlo, adiós Lyds — la chica se despidió con su mano sin girarse a verlo y él tomo sus cosas y salió de la casa con una esperanza más grande de la que quería admitir, para conducir hasta el edificio donde entrenaba la manada de Derek.

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Erica y Boyd estaban esperando su turno para combatir al líder de la manada, lo habían hecho primero individualmente obteniendo un resultado lamentable y ahora lo intentarían en equipos, era el turno de Isaac y Jackson que intentaban esquivar sus ataques para poder empezar la ofensiva, la luna llena estaba muy cerca y eso había fortalecido sus capacidades, pero aún les faltaba mucho para que pudieran hacer frente al mayor, de pronto un sonido de motor los distrajo un segundo logrando que el alfa los dejara en el piso nuevamente.

Derek advirtió de inmediato la presencia de Stiles incluso antes que cruzara la puerta, pero al parecer también Jackson lo había detectado, porque se levantó rápidamente y como aun no controlaba sus instintos, se veía como si en cualquier momento se lanzaría hacia la entrada para atacar al chico que estaba por entrar.

¡JACKSON! — Grito Derek con su voz de alfa haciendo retroceder al rubio — Eso es todo por hoy —les comunico al resto de su manada — y prepárate porque mañana es luna llena y no puedes perder el control así de fácil — dijo lo último dirigiéndose solo a Jackson, aún era temprano para terminar el entrenamiento, pero sabía que ya no iba a poder concentrarse con el castaño ahí.

— ¿Qué haces aquí Stiles? — pregunto cuándo el chico entraba saludando a Erica y Boyd y permanecía ajeno a lo que acababa de pasar.

— Hola Derek también me da gusto verte — Dijo con sarcasmo.

— Sabes que estoy entrenando a Jackson, nuestra alianza con Scott termino y no puedes venir aquí cuando quieras, no somos amigos — dijo irritado el alfa y aunque estaba molesto, sobre todo sentía preocupación por la seguridad del menor, después de todo era un humano rodeado de hombres lobos en el día previo a la luna llena.

Stiles pareció ofendido, pero su expresión se desvaneció al recordar porque estaba ahí — Entiendo que no soy bienvenido Derek, pero necesito preguntarte algo... es... es importante — dijo bajando la vista y mordiendo suavemente su labio, su olor reflejaba la ansiedad de siempre pero además duda y necesidad, debía de ser algo importante para Stiles porque poco después levanto su mirada rendido — Por favor Derek... — dijo el castaño y el mayor supo que sería ya incapaz de negarse, incluso se permitió perderse un segundo en su mirada, pero recupero rápidamente la compostura al recordar que el resto de su manada los observaba.

— De acuerdo, sígueme — le indico y subieron unos pisos hasta donde estaba su loft, el mayor se hizo a un lado para dejarlo pasar y se recargo en una columna y el castaño se sentó en un sofá frente a él.

— Y ¿Qué es eso tan importante que querías preguntarme?

Deseo inherente (Sterek)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora