Deseo inherente (Sterek)

09. Consecuencias desafortunadas

Stiles se tomó muy enserio la invitación abierta de Derek, así que los días siguientes en cuanto salía de clases manejaba directo al loft, era apenas la primera semana, pero parecía tan natural, todos los chicos, pero en especial Derek se aseguraban de hacerlo sentir cómodo, era Jueves y esa tarde no estaban Erica ni Boyd, el mayor había pedido pizza para comer, casualmente después que el día anterior mencionara que esa era su comida favorita.

A Isaac le sorprendía lo complaciente que era Derek con Stiles, pero se alegraba mucho por ellos, incluso creía que la constante presencia del castaño, lo había ayudado a lidiar mejor con el vacío que le dejo la partida de Jackson, desde que el rubio llegó a Londres solo había recibido un mensaje y él reescribió muchas veces una contestación, que al final no fue capaz de mandar, no sabía que decirle, sentía que había más cosas que lo separaban de Jackson que solo los kilómetros de distancia, hace una semana había pasado una de las experiencias más felices de su vida y ahora estaba solo y con el corazón roto, comenzó sentirse triste y no tenía hambre así que para no arruinarles el momento después de intentar comer un poco, les dijo que saldría a caminar.

Stiles no pudo ocultar su emoción al quedarse a solas con Derek porque debía admitir que todo ese asunto del cortejo no había involucrado tanto contacto físico como esperaba y es que además de los toques ocasionales de manos y los abrazos que le aceleran el corazón no habían llegado si quiera a primera base y eso estaba confundiendo un poco al menor.

— ¿Quieres más pizza?

— No, juro que si como una rebanada más estallaré — dijo el chico sobándose su estómago haciendo que Derek le sonriera y Stiles se quedó observándolo, nunca podría cansarse de verlo así de relajado y feliz, lo hacía sentir especial en más de un sentido.

— Y ¿qué quieres hacer? — pregunto Derek.

— ¿Podemos acurrucarnos? — aventuro Stiles que ya se dirigía a su cama y Derek dudo un segundo pero aún así lo siguió, Stiles había lanzado sus zapatos lejos y se hizo a un lado donde se acomodó Derek, podía escuchar los latidos de Stiles y su delicioso aroma a nervios por su cercanía, puso su mano con suavidad en su mejilla y el chico cerro sus ojos al contacto, el mayor admiraba el bello rostro del castaño y estaba haciendo uso de todo su autocontrol — bésame Derek — pidió el menor apenas en un susurro y la lucha interna que estaba librando la perdió y cedió para unir sus labios lentamente.

Sus labios parecían estar hechos para estar juntos, Derek beso con suavidad al menor por tanto tiempo que incluso cuando Stiles llego a su casa aun podía sentir los labios del mayor sobre los suyos y su barba raspando su piel.

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El día siguiente era el último entrenamiento del equipo y Scott esperaba a Isaac, le preocupaba la ausencia del rubio, debía admitir que los últimos días había estado al pendiente del omega, o en palabras de su amigo estaba actuando como todo un acosador, llevando casi un registro de sus estados de ánimo y de los olores que estaban sobre él dónde el aroma de Derek era el más persistente, pero Stiles le aclaro que ellos eran especialmente unidos y cuando lo vio entrar le dio una sonrisa pero cambio al ver la expresión desmejorada del rubio y se acercó rápidamente a su lado y estuvo a punto de caer cuando el moreno lo tomo de la cintura y lo ayudo a sentarse

— ¿Estas bien Isaac? — pregunto con preocupación en su voz.

— Si solo me siento mareado — apenas había querido comer, por lo que pensaba que era normal la debilidad que sentía, pero a Scott le extrañaba porque los lobos no se enfermaban.

— Estoy bien Scott ... ya puedes soltarme — dijo el rubio y solo en ese momento se dio cuenta que aun seguía su mano en su cintura, y la retiro rápidamente.

— Lo siento Isaac — dijo apenado — ¿quieres que te acompañe al hospital? — por supuesto que recurriría a su madre para no responder preguntas incómodas con un doctor.

— No te preocupes, pero creo que me saltaré el entrenamiento de hoy.

Scott estaba en un dilema por un lado quería seguir al lado de Isaac, pero el entrenador lo necesitaba al ser el capitán así que le dijo que lo esperara y lo llevaría al loft saliendo, pero en cuánto se fue Scott el rubio se sintió peor y de alguna forma lo intuyo porque cuando regreso lo encontró en el baño vomitando.

— ¡Isaac! ¿puedes levantarte? — dijo levantándolo del suelo — tengo que llevarte al hospital.

— ¿Qué pasa? — dijo Stiles cuando siguió a Scott

— Stiles dile al entrenador que me tuve que ir ¿me dejarías usar tu jeep?

— Claro — fue a su casillero donde saco las llaves y se las lanzo a su amigo — le pediré a Lydia que me lleve, pero márcame cuando sepas algo.

Llegaron al hospital y Scott ayudo a Isaac a caminar, su madre ya los esperaba y los condujo por la puerta trasera, Melissa le hizo unas pruebas y el moreno estuvo todo el tiempo a su lado sosteniendo su mano, el rubio aspiraba su aroma y eso parecía ayudarlo a sentirse un poco mejor, después de unos minutos regreso, lucia preocupada y eso no ayudo a los nervios de los dos adolescentes.

— ¿Qué pasa? — pregunto el moreno.

— Scott me permites un momento a solas con Isaac — pidió la mujer.

— Pero él ¿está bien? ¿se pondrá bien? — dijo un poco alterado, su madre por respuesta le dio una mirada de advertencia que significaba que no le pediría de nuevo que saliera y entonces Scott se retiro del lugar ansioso.

— De acuerdo esperare afuera — dijo dándole una mirada de ánimo al chico y en la sala de espera se resistía las ganas de escuchar.

— Isaac ¿Tuviste relaciones sexuales sin protección?

— Sí, pero pensé que no podía contagiarme de nada, tal vez es que no he comido y dormido bien los últimos días... es decir eso fue hace pocos días no pensé que...

— Mira no sé cómo esto es posible — interrumpió la mayor — pero te hice todas las pruebas posibles y tu test de sangre dio positivo para un embarazo... ¿existe alguna posibilidad...? — aventuro Melissa y Isaac sintió como se le caía el alma a los pies.

— Es... es posible ... dios que voy a hacer...

— Lo primero que debes hacer es comer bien y descansar — dijo Melissa con un tono maternal — jamás he visto un embarazo masculino así que debemos investigar, pero te ayudare a llevarlo lo mejor posible.

Scott sentía el olor de Isaac y deseaba entrar ahí para hacer sentir mejor al rubio, pero poco después salió con los ojos vidriosos.

— Isaac ¿qué pasa estas muy mal? — pregunto impaciente, pero el más alto lo miro triste y bajo su mirada incapaz de contestar.

— Scott debo irme — el moreno vio a su madre y con la mirada le pidió una explicación, pero simplemente negó con la cabeza y entonces siguió al chico que caminaba rápidamente a la salida, salió y lo encontró sentado en la banqueta del estacionamiento.

— Isaac ¿Qué pasa? puedes decirme, iremos con Deaton él seguro sabrá que hacer, confía en mí te vas a curar.

— Lo que tengo no se cura.

— No puede ser tan grave, lo solucionaremos.

— ¡Estoy embarazado! — Casi grito Isaac, ante la insistencia del moreno y el decirlo en voz alta hizo que se derrumbara y comenzó a llorar, Scott no se esperaba eso, pero en cuanto vio sus lágrimas caer se acercó para rodearlo con sus brazos y dejarlo desahogarse.

¡Hola! perdónenme por hacer sufrir a nuestro bebé Isaac, pero necesitaba mi dosis de drama así que continuara por algunos capítulos más. 😅😅