Mundo alterno, cambio de chicas

Estrategia aliada

Mikasa se sorprendió bastante, estaba a punto de morir si no hubiera sido por ese chico pelirrojo.

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Yelena apuntó a la cabeza de la azabache, asustando a la misma, retrocediendo.

— No dejaré que el plan de Zeke se venga abajo por un sentimiento estúpido y hostil —

Eren se acercó rápidamente con la intención de detenerla pero antes de que pudiera desviar la pistola, Floch entró y disparó a la mano de la rubia haciendo que la bala que ella dejó salir sólo rozara la mejilla de Mikasa, cortándola ligeramente.

— No intentes dañar a personas ajenas al plan -  dijo y otras dos personas se acercaron para esposarla.

— Siento mucho...que tu objetivo se haya estropeado, Yelena -  dijo Eren, mirándola con desprecio al saber el origen de su "apoyo"

— No puedes permitir eso!! Yo puedo ayudarte mejor a ti para liberar a los eldianos! —

— Sí, pero no aceptaré tu modo de solucionar las cosas, si planeas ayudarme será a mi manera, pero como no es así entonces ya ayudaste lo suficiente -  concluyó para después quedarse solo Mikasa, Floch y él.

Mikasa seguía en shock.

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Retrocedió dos pasos al ver y sentir la sangre en su mano y rostro, llamando la atención de ambos chicos.

Eren se acercó a ella, tomandola por los hombros, asustando por la sangre que manchaba su camisa.

— ¿Estás bien? —

— S..Sí, solo...solo fue un corte -  dijo y se sostuvo de la parte alta de los brazos del chico, aferrándose.

Dicha acción, demostraba todo su miedo, sintió cerca, muy cerca, su muerte

Al confirmar que ninguna parte de su cuerpo estaba gravemente herido se calmó un poco más.

— Floch, ¿ya preparaste al equipo? —

Se volteó a verlo, sin soltar a Mikasa

— Sí, dos minutos más y salimos —

— Bien, quiero que tú vayas al puerto y te hagas cargo, yo iré a las murallas, mantente muy atento —

— Sí! — 

Dijo y salió del lugar.

Ambos conectaron sus miradas, Mikasa se notaba preocupada pero feliz por saber que Eren cumplirá aquel deseo suyo.

— No morirás, verdad? -  preguntó con diminutas lágrimas en sus ojos

— No lo sé, pero espero que no -  acarició su rostro, Mikasa parpadeó con pesar pero al mismo tiempo con satisfacción de sentirse querida por aquel chico tan serio y frío.

— Yo también espero que no sea así -  suspiró  - Aunque, quiero que sepas y seas consiente de que si tu nuevo plan de difundir odio al mundo entero para alejarlos, no funciona, estaré de acuerdo con lo que sea que tengas en mente...para que te libres y libres a los demás de ese peso -  confesó, tomando su mano con fuerza, demostrando seguridad, la cual sorprendió a Eren.

Lo que también lo hacía cuestionarse si la Mikasa que el conocía, en el fondo de su ser, apoya su plan.

— Me agrada que así sea -  dijo después de analizar sus palabras

— Pronto comenzará todo, te pido que por ninguna razón, por ninguna, salgas de ésta habitación, por favor —

— Pero, y si... —

— Ningún pero, lo que menos quiero es que estés involucrada en un problema que no iniciaste tú -  volvió a acariciar su rostro.

Mikasa se conmovió por ello y se acercó con lentitud e inseguridad para volver a abrazarlo, sentirlo y reconfortarse al menos un poco por la despedida.

Rodeó su torso, no sin antes acariciarlo con suavidad, cariño.

Eren correspondió tal acto, rodeando su espalda, acercando aún más su cabeza a su pecho, aceptando y otorgando ese cariño. Ambos suspiraban por sentirse tan cercanos como nunca antes.

En esa corta conexión, sintieron ese verdadero sentimiento al descubierto, ese amor que crecía a pesar de la difícil situación, esa necesidad de tenerse el uno para el otro siempre.

— Por favor, ten mucho cuidado -  pidió

— Lo haré —

Se creó un silencio donde la calidez aumentó más en los brazos de Eren, eso estremeció el corazón de Mikasa, dibujando una sonrisa en su rostro.

— Te amo -  dijo en voz algo débil, dejando a ambos sumidos en esa tranquilidad que se debía romper.

— Y yo a ti -  respondió.

Una lágrima recorrió el rostro de ambos.