Capitulo 10: La guerra de amor, ganada

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-Hace mucho tiempo, en sus vidas pasadas, los tres habían sido sometidos a esta misma prueba solo que, había ciertas diferencias.-escuche con la mayor atención posible.-Ustedes tres tenían que elegir a la mujer que tendrían en su próxima vida. Para saber, que tan buenos eran para merecerse a esa mujer, se me ocurrió algo muy grato.

¿Que mejor que elegir entre tres tipos completamente diferentes? Aunque eso no fue lo mas curioso. Lo mas curioso es que eligieron justamente a una de tres. Cada uno eligió a una mujer diferente.

-¿Elegir mujeres? ¡Pero que clase de barbarie es esa! ¡¿Y vidas pasadas?! Con todo lo que ha pasado ya no dudaría de eso pero, jamas elegiría a alguien que no fuera Ge...-el coronel me interrumpió.

-Damien, no fue precisamente una elección en el sentido ético de la palabra. Ustedes tres, fueron llevados a este mismo lugar, en su vida pasada. ¿No sentieron calma al llegar? Era obvio que si, este era un lugar familiar. Aquí fue cuando tuvieron que elegir entre una mujer hermosa de cabellos dorados y labios carmín, o, una aun mas arreglada mujer de cabellos rojos, o una enferma mujer de cabellos castaños.-Todo encajo en mi cabeza. Jackie, Janelle, Genevievè. Pero, ¿como?- La prueba era elegir, como creerían que estaría su mujer en su próxima vida, si ustedes hubieran ido a la guerra, y sobrevivido. Gastón por sus instintos, eligió a la mas hermosa por así decir, ya que Janelle se veía mas feroz que el, y el sentía la necesidad de ser admirado y codiciado. Jaques, veía bondad en la mujer de cabello rojizo. El creía que podría cambiarla. Tu, tu querido Damien, fuiste el único sensato...elegiste a la mujer, que sabias que en verdad iba a quererte. Ellos pensaron que Genevievè se veía enferma porque así era, o simplemente porque estaba loca pero, ¿no es precisamente lo que pierdes al amar a alguien? La cordura, y la noción de lo que te rodea, son cosas que sientes que están de más, cuando amas tanto a alguien, que perderlo signifique perderlo todo-concluyo.

Me quede boquiabierto como jamas en mi vida. Jamas sentí tanto asombro. Pero, es que todo encajaba. Podrían haber pasado unos años, décadas, siglos y milenios. No me imaginaba con nadie mas que mi amada Genevievè. Sonreí.

-Lo se, no podría querer a nadie mas de esta forma-lo mire, radiante.

-Lo se, pero, no se trataba de elegir por apariencias, también tendrían que ganárselo. Gastón se volvió orgulloso y Jaques injenuo. Prevaleciste y, cambiaras el futuro de Genevievè. Se que cuando regreses todo sera amor y alegría. Ganaste dos guerras, Damien.

Lo mire atónito.-¿Quiere decir que en mi otra vida yo...?-No-sentencio.-Ganaste la guerra fácil, y la difícil.

En ese momento comprendí.

-Gane la guerra del amor-susurre.

Sonrió. Y en ese momento, desaparecí.

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El amor es guerra: la esposa del soldadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora