Capítulo 9: Siesta

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Y ahí se encontraban, los miembros mas importantes de Black Hat inc. comiendo el desayuno como si fuera un día cualquiera y eso es lo que parecía, aunque había algo ciertamente distinto, una sensación diferente en el aire, como si algo hubiese cambiado...

-...-, la chica pelirroja veía al doctor, después a su jefe y de nuevo al doctor, todos los presentes estaban extrañamente callados. Buscaba dentro de su memoria cual podría ser la causante de estas actitudes.

El día anterior Black Hat había estado en su habitación hasta las dos de la tarde y al salir fue directamente al laboratorio, después estuvo atendiendo clientes por un rato, volvió al laboratorio, se enojo cuando le dio una muestra de su amor y eso había sido todo... Lo único diferente es que por algún motivo había visitado a Flug mas que de costumbre y por mas tiempo...

La respuesta era mas que evidente, incluso para alguien que podía ser algo lenta como ella...

-Así que... ¿Cuándo será mi fiesta sorpresa?-, preguntó con una pícara sonrisa sintiéndose satisfecha de haber descubierto sus planes.

-...-, tanto el doctor como el del sombrero, 5.0.5 e incluso cambot voltearon confundidos a ver a la chica.

-Emm... Demencia-, comenzó a hablar Flug, -ya tuviste tu fiesta este año...-

-Oh, si-, se había quedado sin opciones, no tenía la mas mínima idea de lo que estaba sucediendo.

-Así que... Ustedes dos estaban haciendo mucho ruido anoche, ¿acaso probaron un nuevo invento sin mi?-, cuestionó dejando ver un leve tono de molestia en su pregunta, no era la primera vez que sucedía pero detestaba que la hicieran a un lado.

Ni el del sombrero ni el de la bolsa respondían pero ambos lucían sospechosamente apenados y lo peor... Al voltear su mirada notó que 5.0.5 se había puesto algo nervioso.

-¿¡Invitaron a 5.0.5 y no a mi!? ¿Cómo pudieron probar inventos sin mi? Desde ahora, ya no los quiero y... Emm... No dejaré que usen mi shampoo y ya no pueden entrar a mi cuarto y-.

La chica lagartija seguía y seguía mencionando amenazas al aire, mientras tanto el hombre de la bolsa solo se hundía mas y mas en la vergüenza, por otro lado, el del sombrero estaba igual solo que el tenía otras maneras de expresarlo.

-¡¡SUFICIENTE!!-, exclamó el demonio haciendo que alrededor de todos los presentes una capa de fuego se alzará hasta el techo y posteriormente bajara, ya no podía mas con aquello.

-No probamos inventos sin ti-, dijo Flug en cuanto su jefe termino con aquel berrinche.

-Oh, okay-.

La chica volvió a concentrarse en su plato, acabando su desayuno, al parecer el par se había salvado de dar una incomoda explicación.

-Un momento...-, o tal vez no, -si no probaban inventos... ¿qué hacían?-.

El doctor tomó algo de aire, decidido a darle una explicación clara y sensible, sabía que ella estaba enamorada de Black Hat y que lo veía a el como su hermano mayor, probablemente le parecería raro o necesitaría tiempo para procesarlo. Abrió su boca al acabar de acomodar las palabras en su mente, apenas iba a pronunciar la primer palabra cuando...

-Tuvimos sexo-, dijo Black Hat con su característica falta de interés.

El científico se quedo en blanco tras oír eso, un poco de aire salió por su boca en un sorprendido suspiro, por otro lado la chica estaba impactada, sin saber que decir o hacer simplemente dejó la mesa y camino a su habitación, escuchando como el doctor regañaba ligeramente a su jefe por su falta de tacto.

[•••]

La chica finalmente salió de su habitación, tras llorar un poco, un baño caliente en la tina y una larga siesta se encontraba mas relajada, comprendía que si eso hacía feliz al amor de su vida lo mejor era dejarlo ir, necesitaría un tiempo para asimilarlo pero estaba segura de que lo lograría, estaba dando su mayor esfuerzo cuando decidió ir al laboratorio a explicarles a ambos lo que había concluido y que no tenia problema alguno con su relación, abrió la puerta lentamente y apenas pudo ver algo de la habitación.

-Chicos...-, comenzó a hablar pero justo en ese momento se le fueron las palabras pues había visto el resto de la escena. Estaba Flug sentado en la silla de su escritorio con Black Hat sobre el, abrazado cual koala a su madre.

-Oh, Demencia, ¿estas bien?-, preguntó quedándose sentado, se movería si pudiera pero tener a Black Hat encima era como tener encima a un gato, ¡no podías moverte! En lo absoluto.

-Lo estaré-, dijo algo sorprendida de haber visto aquello y cerró rápidamente la puerta, al parecer necesitaría mas siestas y baños calientes.

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Actualización corta, lo sé pero es básicamente para volver a escribir y necesitaba algo mas tranquilo para volver a agarrarle la onda a la historia, el siguiente capítulo será el último pero también haré un especial para San Valentín, lamento haber desaparecido tanto rato y espero que disfruten de lo que se viene.

Algo útil para soñar (Paperhat)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora