Mi odioso amor » Park Jimin

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Llevaba una hora sentada en el pie de la escalera y me dolía el trasero de estar ahí casi agachada. ¿Que mierda entendía Taehyung por SOS? Estaba de más decir que que estaba de mal humor. La gente aquí parece que pensaba que se acabaría el mundo y mas nunca tomarían alcohol. Me había encargado de lanzar mi cara de Pitbull asesino a todo aquel que quería subir para usar una habitación, no me hacia falta ni hablar ellos solos se iban por donde vinieron. No eh visto a Haechan, pero cuando lo vea lo voy a matar, juro que aunque sea mi hermano y a mamá le duela lo voy a   matar lenta y dolorosamente.

Estaba que echaba humo por las orejas, miraba la pantalla del teléfono constantemente mirando la hora o pendiente de una llamada o mensaje de mi amigo que aun no ha llegado. Por ahí venia otra parejitas con el chico abrazándole la cintura por atrás y ella riendo con lo que el le decía en el oído. Cuando llegaron a la escalera me vieron y sus sonrisas se borraron en cuanto dije:

— joder, vayanse a follar a un árbol, ¿que no entienden que esto no es un puto motel? — se miraron los dos antes de el cogerla por la mano y murmurar algo mirándome que por la musica no escuchaba bien, antes de que se perdieran en la multitud me pare y grite a sus espaldas — ¡eso, largate y no me lo digas a la cara maldito conejo!

Me senté de mala gana de nuevo en el escalón. Estaba muy molesta, a cualquiera le daba una bofetada. Lleve mi mano a mi frente y luego la deslice por mi pelo, se me estaba pegando esa maña de Jimin, pero necesitaba relajarme. Alguien se sentó a mi  lado, no mire quien era, tenia la cabeza gacha, así que dije sin mirar quien era.

— ni por favor ni leches, no pasaras a arriba — sentí que se reía, era un chico, levante mi vista para ver quien era, era el rubio de bote, afloje mi entrecejo pero no sonreí, mas bien levante mis cejas preguntándole con la mirada que hacia al lado mio

— parece que hoy no es tu día, señorita Yuri — otra vez vuelve a llamarme señorita, le miro entrelazando mis manos y apoyando los antebrazos en las rodillas con las piernas casi abiertas

— ¿que quieres?

— cálmate seño...

— me dices de nuevo señorita Yuri y te arranco las pelotas — el me miro sorprendido y luego levanto las manos en son de paz

— perdón — veo que reprime una risa pero en cambio sonríe, tengo que admitir que tiene una linda sonrisa pero ya ningún chico hace ese efecto en mi gracias a Park Jimin — oye, creo que empezamos con el pie izquierdo,  no soy un pesado por si lo pensabas

— ¿no me digas? — dije sarcástica y el se acerco mas a mi sentándose mas cerca

— no entiendo por que me odias pero quiero que sepas que me caes bien, a pesar de que me recibiste con gritos y en la gala me diste calabazas

— no te odio — el me vuelve a mirar sorprendido, tal parece que para el soy una caja de sorpresas — simplemente has llegado en momentos que quiero mandar a quemar el mundo — el vuelve a sonreír y niega divertido

— ¿podemos empezar de nuevo? — ahora la que lo mira sin entender soy yo, entonces el extiende su mano para que la tomara y eso hice — soy Taeyon, un gusto — aflojo mi expresión facial, tal parece que el rubio de bote no es un idiota como a lo que estoy acostumbrada

— soy Yuri y ni se te ocurra decirme señorita — el se ríe y yo por su contagiosa risa logro sonreír por primera vez en todo lo que va de día

— y...¿por que estas tan molesta? — el pregunta como quien no quiere la cosa, giro mi vista al frente y me encojo de hombros

— nada, lo normal, todos los días el anormal de mi hermano monta fiestas a borbotones de gente y ni siquiera da la cara — el vuelve a reír por mi evidente sarcasmo