Mi odioso amor » Park Jimin

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La casa de Jimin no era tan lejos de mi casa, si era lejos pero a la vez no, solo que hay que caminar, cosa que me da bastante muuuucha pereza. En fin, era cerca de casa de Tae así que por eso no me perdí.

Llegue a un portón de hierro que cubría la entrada de la casa todo lleno de plantas enredadas. Antes de que tocara la puerta metálica esta se empezó a correr sola

— ok — Murmuré sin entender nada de nada mirando atónita esta

Cheque de nuevo el mensaje para ver si esa era de verdad la casa que me había dicho o escrito. Lo juro, flipo con este tipo.

— pasa — dijo una voz de no sé que lado, mire a mi alrededor, no había nadie, o me estaba volviendo loca o me estaban haciendo una broma — la voz sale de los altavoces de la entrada, pasa de una vez — ahora me sentía observada, no le di más vueltas y entre de una vez

Antes de llegar a la puerta pasaba por un jardín bastante grande. La casa por fuera era más grande que la mía, mucho mas grande. Caminaba con pasos lentos y antes de llegar a la puerta esta se abrió dejándome ver a un Jimin ...se podría decir muerto de risa, al verle me puse seria y camine más rápido hasta quedar frente a el

— ¡¿de que te ríes idiota?! — le dije molesta o simulando enojo

— debiste ver tu cara — me señalo con burla y volvió a reír aguantando su estómago — ¿ que creías ? ¿Que era tu conciencia?

— mira, la próxima vez que me hagas pasar vergüenza vas a cagar tus dientes por el muletazo que te daré en la cara — le dije y este disminuyo su risa — me podías haber avisado

— ¿avisado de que?

— de que tu casa era....así — señale a mi alrededor

— lo siento, no le voy diciendo a todo el mundo que mis padres son asquerosamente miyonarios y que vivo en esta casa que todavía hay partes que aun no he conocido — dijo con bastante sarcasmo

— ¿ que? ¿No traes amigos o que?

— solo Jungkook, ¿te quedaras aquí afuera desquitando tu rabia conmigo o pasaremos para estar más cómodos?

— ok, está bien además me estoy muriendo de frío.

Seguida de Jimin entramos a la enorme mansión. No pude evitar quedarme perpleja ante la casa de Jimin que si por fuera se veía grande por dentro más. Al pasar a dos lados estaba lo que sería el pie o los pies de la escalera que daba al segundo piso. Luego al fondo se veía la sala de estar que también era inmensa como todo aquí, excepto Jimin

— ¿ te quedaste sin habla o te comió la lengua el gato ? — pregunto en tono de burla seguro porque mi cara de sorpresa era muy notoria,

— tu casa es muy grande ,parece un castillo

— no exageres

— que,  tú mismo dijiste que habían partes que ni tu habías visto

—  eso se llama sarcasmo —  me señaló con su dedo índice — ven siéntate aquí — señaló donde había puesto su trasero que era en el enorme sofá de la casa

— ¿ en el sofá? — le mire con una mueca

— ¿ si que tiene?

— pensé que iríamos a la mesa o no se...a otro lado

— ¿quieres ir a mi habitación Lee? Que  pícara me has salido — me dijo con una cara socarrona, dios no se puede con el

— no me refería a eso ¡no empieces Park!