Deseo [ Aizawa Shota ]

🌷1.

Aizawa dormía pacíficamente, estaba metido en su saco, soñando con un gato con lentes, estaba sacado de onda en su propio sueño, pero lo disfrutaba. Nemuri por otra parte, estaba parada enfrente de la clase, estaba enseñando sobre el cuerpo femenino, cosas que pasan, esta vez: La menstruación.

Las chicas miraban tranquilas, pero no faltaban los niños como Mineta que ponía cara de asco, Midoriya miraba asustado, al parecer Inko ni nadie dijo nada de esto, además, no podía creer que sus compañeras pasaran por todo, refiriéndose a las experiencias que han contado. Era todo un drama la clase en estos momentos.

—¡Ya, mierda, tanto drama hacen! ¡Montón de idiotas, es algo normal! —Claramente ese fue Bakugo.

—Eso fue inesperado, jaja. —Mina río a lo bajo, junto a Sero.

—Pero-, ¿¡Y les duele!? ¡Oh, no, que horrible lo que te paso, Uraraka! Eh, yo traere chocolate todos los días, muchos dulces para darles. —Kirishima grito eso, todas las chicas miraron sorprendidas, después desviaron la mirada cada una haciendo una cara de emoción y ternura, fue lindo escuchar eso. Por otra parte, los chicos... Unos miraban en silencio, otros reían y uno que otro hacía una mueca.

Aizawa entre abrió los ojos al escuchar tanto alboroto, Nemuri estaba encantada dándole anotaciones positivas a Bakugo y Kirishima.

Miró hacia la puerta, había una chica apoyada, solo gruño y suspiro.

—Ya sientate. —Dijo, todos le miraron en silencio, él solo siguió durmiendo. Estaban todos sentados, miraron a la Sensei-Mid que comenzó a reir.

—¡Tan estresado lo tienen que ahora esta soñando que hacen desorden! Ni en sus sueños esta relajado este hombre, Dios mio. —Los demás le siguieron la risa, al menos la mayoría. 

El tiempo paso así, entre risas y sustos, jugar y molestar, las clases de MidNight eran una de las mas divertidas. Los chicos querían seguir escuchando las experiencias de sus compañeras, pero ya era hora de salir, ya era hora de volver a los dormitorios.

Nemuri solo movió a Aizawa con un pie para reir e irse, así lo despertaba para que el se fuera también, el pobre hombre trabajaba todo el día, llega a ser insano, necesitaba un descanso el pobre. Pero bueno, nada que hacerle.

Shota se levantó de mala gana, observó el salón vacío, en un profundo silencio, soltó un suspiro y se levantó para ya irse, tenia que ir a su cuarto a revisar trabajos.

Salió del salón, caminando en un profundo silencio por los pasillos, pensando en que hacer, Hizashi y Nemuri saldrían a beber junto a los demás, tal vez debería ir, pero realmente no tenia ganas de nada. Se quedó quieto, analizando si era buena idea pasar a la oficina de Mic, que justo pasaba por afuera de ella.

Se dio vuelta rápido al escuchar un quejido, juraba haber oído caerse alguien a lo lejos, solo rodo los ojos y gruño, no iría a ver que pasaba, ya no era su horario de trabajo. Sin más, entró a la oficina de Hizashi.

—Uh... Eraser! —Exclamó el rubio, Shota suspiró y se fue a sentar al sofá que había. Que mejor, venir a ver al gritón de tu amigo, si que estaba mal para venir por su cuenta a que le griten en la oreja.

—Dame café, por favor.

—Claro, un momento. —Mientras que Hizashi tarareaba una canción, él le miró en silencio, recordando cuando eran jovenes. Hizashi siempre fue alguien muy extrovertido, alguien que pasaba cantando y gritando, siempre insistió en ser su amigo, no reclamaba, lo logró y hacia buena compañia. Además, en sus peores momentos él le acompaño y apoyo.

Lo odiaba como lo quería a la vez, siempre sabia cuando estaba mal y eso no le gustaba. Cómo ahora, sabia que Hizashi había notado algo raro, pues solo tarareaba, tarareaba en susurro, sin hablar ni gritar. Supongo que esperando a que hablara.

—Si, estoy estresado, no me sigas estresando, habla o haz algo, grita, no sé.

—Sólo creo que deberías tomarte un descanso, que tal que en las vacaciones que se vienen descansas en vez de estar de allá para aca.

—No.

—Ah... Ibamos a salir con Nemuri, tenia planeado que fueramos los tres, cómo amigos que somos. Vamos, iremos a Corea.

—Ya dije que no... Estaré ocupado, lo lamento.

Recibió el café y lo tomó, Hizashi con una mueca se sentó a su lado, hablando y siendo escuchado por el pelinegro. Cómo siempre, solían hacer eso una que otra vez, los dos en la oficina, Hizashi hablando y Shota en silencio, corrigiendo exámenes y tareas. Era solo para tener algo de fondo, para no estar solo.

Porque por mas que Shota Aizawa se vea como un hombre serio, es muy sensible, es alguien que no está bien. Y bueno, el lo sabe, pero que puede hacer, solo seguir adelante. Solo trabajar a mas no poder y dormir.