La pequeña estaba ya con Aizawa, estaban los dos en el cuarto del mayor, ya era tarde y era hora de dormir. Se encontraba en el sofá, acostada tratando de dormir. Escuchaba callada como sonaban las teclas de la tablet del pelinegro, pues tenia el aparato con sonido. Tenia un puchero sin saber que hacer, se sentía mal, ya no le estaba gustando estar con Aizawa. Tal vez si él le dice a Mic que existe el rubio la pueda ver.
—Oye, ¿se te a ocurrido algo más?
—Oh, no... Umh, ¿Mic es tu amigo?
—¿Te gusta Hizashi o algo?
—¡Claro que no! ¡No, no!
—Bromeaba, niña. —Shota suspiro viendo la cara de pena y molestia de la menor, dejó la tablet en el cajón y se acomodo en la cama— Perdón, supongo, ya vi mi error.
—¿Cuál error?
—Estabas sola, rondando por ahí, ahora que me encontraste yo te sigo ignorando, sigues estando sola. Mira, a pesar de ser profesor y todo, no sé tratar mucho con niños, puedo darte apoyo y todo, pero cuidarte y estar preocupado por ti 24/7 ya es otra cosa, ¿comprendes? No digo que no te ayudaré, pero ya sabes como soy, si llego a ser tosco tienes que decirmelo. No lograremos nada si te quedas callada y solo piensas en alguna manera de hacer que Hizashi te vea.
—Que... No, no hago eso.
—Está bien, Hizashi hubiera sido el indicado para ayudarte, no sé porque yo lo puedo hacer y él no, él estaría dispuesto a ayudarte, te hablaría y estaría concentrado en ti todo el día. Claro que querrías que el te viera, no tienes que negar que no te gusta estar conmigo, lo entiendo.
El silencio apareció, la pequeña comenzó a llorar, le frustraba todo, quería solo ya irse, poder estar tranquila. Solo sentía que molestaba, eso empeoraba todo aún más.
—Está bien llorar.
—Perdón... No me gusta esto, no me siento bien, es desesperante, de verdad lo siento. Solo lo molesto, señor Aizawa. Trataré de mejorar...
—No tienes porque mejorar, relajate, descansa y piensa, todo con calma. No tienes porque estar bien, haz sufrido mucho, no es obligación seguir con una sonrisa. Está bien frustrarse, enojarse, estar triste. Está bien no estar bien.
Shota se sentó en la cama y observó a la niña, la menor asentía, sin dejar de llorar.
¿Qué se supone que tenia que hacer? Solo sabia de ella su pasado y que tenia que cumplirle un deseo. ¿Abrazarla? Ahora recién se dio cuenta que ni siquiera a visto si puede tocarla. Suspiro y puso una película en la tele, para irse a sentar al lado de ella.—Deja de pensar tanto y desconcentrate, elige una película y veamosla.
Eso hicieron, Shota calmo a la niña, ella lloro por un buen rato, tenia mucho guardado. Y si, estaba frustrada, enojada, desesperada y triste, pero eso estaba bien, estaba bien sentirse así, logró calmarse gracias a las palabras de Aizawa. Sufrió mucho, estaba bien no estar bien.
Las horas pasaron, llevaban ya tres películas, la tercera es la vencida dicen por ahí, la pequeña por fin se estaba quedando dormida.
—¿Y usted? ¿Cómo está? —Susurró, entré despierta, quería seguir hablando, pero tenia mucho sueño.
¿Él? ¿Cómo estaba él? Se quedó callado, no sabia cómo estaba él. Nunca lo pensó, no le gustaba pensar en eso. Suspiró al pensar en su situación, ¿con qué derecho le dijo todo eso si cuando él no estuvo bien ignoró todo y siguió adelante? ¿Cuando entrenó a niveles innsanos por todo? Le hizo pensar en él y eso no le gusto.
¿Su vida estaba bien? Estaba solo y matándose a trabajo. Se dejo de lado como hombre, todo era U.A y ser un héroe. Suspiró otra vez y se acomodó para dormise él también.
—Si, bien... —Respondió en susurro, la niña ya dormía, él quedó callado mirando la película, esperando a quedarse dormido.
Tendría que hacer feliz a alguien cuando no podía hacerse feliz él mismo. Las cosas eran complicadas, pero solo habia que seguir. Shota era alguien que daba muy buenos consejos, pero no los sigue. Está bien no estar bien, pero eso no le entra en la cabeza al pelinegro, sigue convenciéndose de que está todo perfecto.
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Deseo [ Aizawa Shota ]
FanfictionLas cosas estaban tranquilas en U.A. Estaban todos tranquilos menos Aizawa Shota, cómo siempre, ese hombre se mataba trabajando. Dejando de lado el estrés, el cansancio y soledad, estaba todo bien. Todo bien hasta que comenzó a ver a una niña. Apare...