Horas después el doctor fue a buscarme, su rostro era inexpresivo, temía lo que me fuera a decir
Ya al estar cerca de mi dijo que mi madre estaba estable pero las convulsiones les indicaba que aunque puede despertar del coma lo más probable era que al despertar quedara el un estado vegetal
Para ellos no había nada probable pero el imaginarme a mi madre en ese estado, solo logrando mover los ojos me derrumbó totalmente, volví a la habitación de mi madre.
Se veía tan tranquila, rompi en llanto porque aunque ella despertara si quedaba en estado vegetal de cierta forma seria como si no estuviera y eso no era vida para nadie, pero solo me quedaba esperar.
Al día siguiente Erika llegó al hospital, yo me encontraba dormida en un sofa al lado de la camilla de mi madre.
Erika me despertó diciendo - cariño vamos a casa para que tomes una ducha, comas algo y descanses - negué con la cabeza, no dejaría a mi madre, si despertaba quería que viera que estaba con ella, que no la deje ni por un segundo.Erika insistió y levantando algo el tono le dije que no dejaría a mi madre, que ella me debía ver tomando su mano al despertar.
Después de unos segundos le pedí disculpas porque se que su intención solo era ayudar, ella me dio un pequeño beso y me pidió que fuéramos a la cafetería por algo
Voltee la vista a mi madre y Erika puso su mano en mi mejilla diciendo - ella estará bien, en cambio tu si no comes algo no lo estarás-
Decidí ir a comer algo con ella aunque no tenía nada de apetito, mientras estábamos en la cafetería ella trataba de poner tema y sacarme una sonrisa pero yo no lograba dejar de preocuparme por mi madre, era lo único que tenía en mente y lo único que me importaba
Tenia la mirada caída y Erika la levantó diciendo - así no me estés hablando, así no me quieras ver estoy aquí contigo, tu madre estará bien porque ella es igual de fuerte que tu, ambas saldrán de todo esto... juntas, a parte yo estaré contigo en cada paso-
Solté una pequeña sonrisa, sentí unos brazos a mi espalda, era Laura y las chicas, todas sonriendo me dijeron -ya que nos evitas, llegamos de sorpresa, recuerda en las buenas y malas siempre juntas -
Rompí en llanto, soy una sentimental de mierda y tenía tanto en mi interior que pensar en mi madre, lo que me dijo Eika y ahora las chicas me movió aún más el corazón
Estaba tomando un café con Erika y las chicas, alguien tocó mi hombro y era el doctor que estaba a cargo de mi madre, pidió que si podríamos hablar a solas
Me levanté y seguí al doctor a una de las esquinas de la cafetería, le pregunté si algo le había sucedido a mi madre, el mirándome a los ojos respondió, -hay un tratamiento en Londres, su madre deberá viajar esta misma noche, es lo único que podemos hacer - antes de que pudiera dar una respuesta una enfermera llegó agitada pidiendo al docto que subiera a la habitación de mi madre de inmediato
Su pulso era débil sin aviso tuvo una falla masiva en los organos los doctores no sabían como o porque, la estaban dejando morir, el monitor dejó de registrar, silencio total y solo mi largo grito se escuchó
Mi madre se había ido, me odiaba por no haber estado con ella, no le pude decir que la amaba, caí al suelo y lo último que recuerdo son las chicas y Erika tratando de evitar que me golpeara la cabeza.
Adiós mamá...
ESTÁS LEYENDO
Un Amor Poco Común
Novela JuvenilEn la historia podremos ver todas las dificultades por las que pasará Koral, en especial que tendrá un amor fuera de lo común y por el que podría darle un giro total a su vida