BAILE ROJO

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Dolor, miedo, sangre todo parecía la mas horribles de las pesadillas, corrí hacia ti sin importar que mi cuerpo se quejara verte allí de pie sobre un charco de sangre tu sangre y tu expresión vacía inmutable me partió el corazón por primera vez me sentí insuficiente ante ti

la aventurera actitud de Luffy nos arrastro a una isla siniestra donde un esqueleto, si un esqueleto nos guio para ser libre y convertirse en nuestro nakama, porque Luffy no desistiría de su musico la isla de una especie de zombis y demás seres en verdad extraños nos acogió en lo que era la isla del shichibukai Moriah todo tan extraño y siniestro envuelto en uno estela de oscuridad de esclavitud para con sus marionetas de lo mas cruel el destino del navío que cayera en las garras de este personajes terminando con cualquier sueño pirata, hasta que sin medir consecuencia Luffy decidido a acabar con la dictadura del shichibukai sobre la isla, ganando contra la desfavorecedora situación, pero la suerte nos abandono coincidiendo el fin de la batalla con la visita de un Pacifista herramienta del gobierno, que mostro su peculiar poder aterrador e invencible, puesto que desaparecer la chica gótica frente a sus ojos los dejo en completo pánico, ni Luffy y el esfuerzo de todos parecía rendir frutos, cayendo todos en una gran explosión donde un zoro consiente de la situación, ofreció su vida a cambio de la de su capitán, sanji trato de tomar su lugar pero esa idea era inconcebible para Zoro quien lo noqueo al instante, el martirio que sufrió fue grande pero no era el momento de morir para el ex cazador de piratas y sobrevivió, totalmente herido hasta donde no se podía sentir de pie como hombre de honor termino de pagar el trabajo de proteger a su capitán como primer oficial, la vida se le iba entre sus manos sanji lo tomo y gritaba desesperado por atención para con el marimo que daba una de las imágenes mas desgarradoras jamás vistas, al resto se le hizo extraño todos pelearon pero solo Zoro recibió tanto daño nadie mas que el Pacifista y Sanji conocía el sacrificio silencioso que hizo par Luffy para que la banda siguiera su nuevo barco los llevaría un paso mas cerca del sus sueños oh cumplir promesas como en el caso del simpático nuevo miembro que conto su nostálgica historia con Laboon su soledad y nakamas perdidos, todo en su aun buen humor por la música, la meta era mas que clara, Luffy como parte de los supernova de la peor generación tenia una ruta y debía pasar por SHABONDY

el triunfo como de costumbre lleno de algarabía un banquete de reyes y ahora acompañado de música una muy especial que venia perfecto con el estilo pirata, en un cuarto apartado reposaba el herido Zoro, mientras que en el salón la fiesta se desarrollaba, la abundante comida se dejo a merced del fiestero ambiente que no notaron que el rubio se escabullo, la melancólica y hermosa melodía del piano que tocaba Brook el esqueleto pervertido, el nuevo integrante de lo sombrero de paja, zoro miraba por la ventana, ensoñado con la música que se colaba hasta su lugar que le transportaba a unos recuerdos que hace mucho no tenia pero conservaba como lo mas bonito de su niñez

"su sensual cuerpo femenino ya acostumbrado a ciertas posturas de baile por no decir sugestivos movimientos, un desconocido artefacto para el pequeño peliverde que entonaba melodías en su siempre silencioso hogar pero hoy era su cumpleaños y la mujer se esforzó en cocinar lo que le gustaba extrañamente sin pastel como lo dicta la tradición porqué el pequeño no gustaba de lo dulce, ropa bonita y decorado con abundantes flores naturales como era costumbre el no podía salir y tampoco lo pedía el pequeño lugar era todo lo que conocía, los relatos de su madre de todo lo que había afuera lugares personas su comportamiento y un sin fin de cosas que abrumaban al pequeño hoy en su día conoció como se grababa la música y seguía entusiasmado y descoordinado los pasos a lo que su madre le llamaba baile, movimientos que diariamente practicaba mientras su madre salía y que ahora con el sonido que producía el aparato cobraba mas sentido y un sentimiento de satisfacción"

ese era solo uno de muchos de los recuerdos de su madre que recreaba constante, para no volver a perderlos, esos eran sus tesoros y nadie mas que su memoria podía abandonarlos y luchaba aun con recuperar el resto que había perdido como ciertos regaños y lo que parecían instrucciones de su condición que siempre se quedaban a mitad y Zoro se esforzaba seguir el recuerdo pero no lo alcanzaba simplemente despertaba con un sentimiento de tristeza, esa mujer le trasmitía un amor que el anhelaba, la nostalgia de antaño siempre le acompañaba,

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