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Nam estaba sorprendido, ¿Cómo Seokjin lo había encontrado? Él sólo le había dicho a una persona y...Maldito Jeon bocón Jungkook.
Con un leve asentimiento y tragando fuerte decide salir de su casa y enfrentar a su esposo.
Al salir, lo encuentra tan guapo como siempre, con unos jeans desgastados, una básica blanca, su cabello revuelto y unas gafas de sol que lo hacen ver perfecto, sin embargo, Nam lo puede notar más delgado y pálido, un sentimiento de pesadez y preocupación lo atraviesan.
Cuando sus orbes se encuentran es como si el mundo se detuviera, ambas constelaciones se encontraron creando un universo precioso demostrando el amor que se tenían.
-H-hola- el menor traga, aliviando su seca garganta y no queriendo volver a tartamudear- ¿Qué haces aquí?
-Yo...Yo estaba preocupado, no contestabas mis llamadas ni mi mensajes, ninguno de nuestros amigos sabían donde estaban y yo, yo realmente temía que algo malo te hubiera pasado y cuando me di cuenta de mis actos ya era demasiado tarde para arrepentirme, así que quise buscarte para pedirte perdón porque si no quieres estar conmigo lo entiendo completamente, fui un completo idiota cuando solo querías protegerme, pero no podría seguir viviendo sabiendo que me odias o que te hice demasiado daño porque te amo y-
-Tenías razón.
-¿Qué?
Nam suspira tembloroso, tratando de no llorar demasiado temprano, limpia sus manos sudorosas contra su pantalón y abrazándose así mismo, se dirige a su mayor.
-Y-yo realmente lo siento, tenías razón sobre lo que decías, estaba tomando una decisión en tu vida que no me correspondía y en cierto punto te puse entre la espada y la pared, no quería darme a entender así y mucho menos quise sonar egoísta, sólo te dije lo que sentía porque realmente te amo Seokjin- inhala, sus ojos se llenas de lagrimas y muerde su labio inferior con fuerza- Te amo demasiado que no soportaría verte otra vez en una camilla gravemente herido, pero también te amo como para saber que vivirás triste sin correr porque estar en ese auto, compitiendo, te da vida-Namjoon inclina la cabeza hacia arriba en un intento en vano de retener las lagrimas, sus hombros un poco encorvados y la nariz roja gracias al llanto- Perdóname si me vi como un egoísta, yo...Yo solo no quiero perderte Kim.
Ante el siguiente sollozo ahogado de su menor, se lanza en un abrazo apretado negando rápido con su cabeza.
-Te amo, te amo, te amo muñequito- repite apretando aún más el abrazo- Te amo más que nada en esta vida y no deberías pedir perdón por un idiota como yo, tienes razón al decir que hacer carreras me da vida pero, tú eres mi vida Kim Namjoon, y no soportaría dejarte ir y tampoco me perdonaría el que te sientas culpable por una estupidez mía.
-Te amo igual Jin- Se separa un poco del abrazo y con sus manos, limpia las lagrimas del contrario, deja un leve besado en sus labios y recuesta su cabeza contra el pecho del otro sintiendo sus latidos acelerados- Amor, me hiciste daño, las palabras dichas ya están dichas y me rompieron de a poco. Sé que la situación no era la adecuada, pero me dolió escuchar lo que dijiste.
-Lo sé, lo sé, estaba cegado de la ira por el momento y dije cosas sin pensar, me di cuenta que solo buscabas mi bienestar, que nunca lo harías por un capricho o por algo tuyo, porque eres una de las personas más hermosas que conozco con un corazón noble que solo vela por el bien de los demás, cuando lo entendí...Ya era demasiado tarde-suspira tembloroso, sus dedos acarician en un suave toque la espalda de su esposo y pequeños besos son regados en sus castaños cabellos- No quiero que pienses que no eres importante para mi Nam, porque lo eres más que nada.
Sus belfos se juntan, llevaban demasiado tiempo sin tocarse y cuando lo hacen, es como si estuvieran el cielo con la pinta de sus dedos, sus manos sienten hormigueos por tocar el rostro contrario y un revoltijo extraño se instala en su pecho.
Cuando se separan, Jin es el primero en abrir los ojos y soltar una pequeña risita enamorada- Ven, vamos a tu cuarto, hablemos bien lo que no pudimos en el hospital.
Ambos tomados de la mano entran a la casa de los padres de Nam, Jin saluda con una reverencia a sus suegros y le promete al señor Kim quedarse para almorzar, al estar en el cuarto miles de recuerdos los invaden, la foto de ellos siendo adolescentes abrazados permanece enmarcada en el escritorio, el recuerdo de cuando ellos pasaron juntos la primera navidad con la familia de Nam llega como un torbellino y entonces sonrisas nostálgicas tiran de sus labios.
Acostados con la cabeza del menor en su pecho y la mano del mayor dando leves caricias en su cintura, hablan, hablan, ríen y recuerdan, Jin le aclara que no pensaba bien lo que decía y que se llegó a sentir atacado, Nam le entiende y le explica que nunca se había preocupado tanto como cuando llegaron gritando que tuvo un accidente, Jin pregunta sobre el divorcio y Nam le responde que nunca se quito el anillo, Jin pide perdón de nuevo y Nam lo acepta, comparten un beso y saben que lo han superado.
Se quedan allí horas siguiendo hablando, recuerdan cuando fueron novios y cuando se casaron, recuerdan sus primeras vacaciones y planean las próximas, hablan de como deberían volver a la cabaña en las montañas o como deberían ir a la playa, Jin pregunta por su celular, él le responde que se había dañado, Nam habla que volviendo a Corea iba a comprar otro bonsái y Jin le planta la idea de que el enseñe a manejar el auto, expresan lo mucho que se aman y que tanto se extrañaron.
Sonrisas sinceras y tranquilas quedan plasmadas en sus rostros y su corazones vuelven a latir en el mismo compás.
Cuando son las cinco, Jin emprende en su auto despidiéndose con un suave toque de labios para Nam, un elogio y gracias por la comida al señor Kim y una promesa de que volvería con sus padres para la madre de Nam.
Decidieron tomarse un tiempo, para ellos y para descansar, Nam se quedaría con sus padres para sanar y Jin se tomaría un tiempo para ser mejor persona.
Pero ahora están mejor, ahora ya no hay un dolor en sus pechos ni el sentimiento de agonía, porque lo arreglaron y van a superarlo, porque solo fue una prueba para demostrar que su amor seguía sobre ruedas.
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Gracias por leer♡¡! A racingJin ya le queda poquito para que se acabe :(
