Las cartas del destino

Parte 5

Al despertarme, no había nadie a mi alrededor, era de noche y estaba en un hospital. Mire por la ventana, parecía que era Texas.

-Enfermera, enfermera- dije - ¡Enfermera!- replique gritando.

Y entonces apareció un niño que me resultaba familiar; se parecía ha alguien de Borni. Era Jack, un amiguito mío al que le cuidaba cuando el era un poco mas pequeño. Cuando vi que me miraba cerré los ojos. Y Jack con cara de desanimo se marcho. Al fondo se escuchaba gente correr hacia mi habitación.
-No era el, seria otro paciente- dijo Jack apunto de romper a llorar.

Vi como se movía una sombra asta la puerta de la 202. No sabia muy bien quien podría ser, asta que se sentó en mi cama y empezó ha cantar. Sonaba a una nana que solía cantarla en clase.¿Quien podría ser la persona misteriosa? Cuando esa dulce a la vez que angelical voz acabo de cantar aquella música que me transporto a la infancia, note como una piel suave como una flor de orquídea recién nacida me quitaba la mascara de oxigeno, note como sus labios carnosos se juntaban con mis agrietados labios, note esas diminutas mariposas que revolotean en el estomago, sus labios se separaron de los míos al terminar aquel maravilloso beso. Aun seguía dormido asta que escuche el chirrido de la cama cuando una persona se levanta de ella, escuche sus tacones de madera chocando contra el brillante suelo de hospital.

-¡Espera!- grite excitado.
Cuando se dio la vuelta vi su cara dulce y lisa cara, también me era familiar. Se trataba de la chica a la que intentaba enamorar, era Curni. Se acerco a mi corriendo para darme un largo beso y un enorme abrazo. Empece a ver como llegaba todo el mundo para verme que tal estaba. Allí estaban todos mi seres queridos, el señor y la señora Flophi, Mario Locke, Melodie, Jack y Curni. Me empezaron ha contar que había estado medio año en coma. Y lógicamente pregunte por que estaban todos allí. Me dijeron que casi me muero horas antes de despertarme, y que todos estaban muy preocupados.