CAPÍTULO 12

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Jonathan y Nancy tocaron el timbre de la casa donde según vivía Heather, al ver qué nadie salió a causa del llamado todos miramos a Once, la cuál no dudo ni un segundo en abrirla con su telequinesis.

Pasamos lentamente, todos estábamos alerta y nos manteníamos atrás de Once, ya saben... Por si algo llegase a suceder, pero me sentía tan protegida a causa de que literalmente estaba en medio de todos los chicos, Mike y Will atrás de mi, Max y Lucas a mi lado y Once frente a mi. Me sentía como una niña.

— Tom... — exclamó Nancy mirado a su alrededor — ¿Heather?.

Pero –otra vez– nadie respondió. Asi que seguimos avanzando sin miedo. Aún que aun estábamos alertas.

— Rayos, está helado — menciono Max.

Yo no tenía tanto calor, de hecho me gustaba el frío... Aún que ahora que lo pienso bien, es extraño y no debería decirlo en voz alta. Mire a mi alrededor Will, estaba temblando con sus manos juntas al igual que Mike.

— ¿Huelen eso?.

Caí en cuenta que olía mucho a químicos de limpieza, al entrar a la cocina estaban muchos de estos químicos regados por la mesa, haciendo un no muy grato olor para nuestras fosas nasales.

— Más químicos — menciono Nancy acercándose a la mesa.

Había un refrigerador volteado y quemado de un extremo gracias al cloro y otro tipos de químicos. Jonathan tomo uno de estos y lo observó por algunos segundos hasta que hablo.

—¿Crees que han estado tragando está mierda? — pregunto Jonathan mirando a su novia.

— Si, eso, o les dio una obsesión por la limpieza...

Max interrumpió — Pero, el año pasado Will no comió químicos. ¿O si?.

Will negó — No, esto es algo nuevo.

— El señor Clark, quinto grado... Pensemos ¿Que pasa cuando mezclas varios químicos? — pregunto Mike mirando a Lucas, después a Will y termino poniendo sus lindos ojos sobre mi.

— Creas una nueva sustancia — respondimos los tres.

— ¿Que tal si están creando algo?.

— ¿Dentro de ellos? — pregunto Max — Es decir, si bebés está mierda te matará.

Hablo Lucas — Si, si son humanos — aclaro.

Todos nos quedamos mirándonos entre sí hasta que seguimos a Nancy quien se empezó a mover hacia la cocina, al llegar miramos un gran banquete que estaba medio vacío, fruncí mi entrecejo e hice una sola línea con mis labios.

Segundos después Nancy visualizo una botella tirada en el suelo. Se acercó, la seguí.

— Chicos... — llame — ¿Eso de ahí es sangre? — apunte a la alfombra.

Nancy se agachó y miro a Jonathan — Ayer, Tom tenía un vendaje.

Tomo la botella en sus manos y la miro, habia un poco de sangre regada en la botella de vino. Esto solo quiere decir que...

— Fue atacado — menciono Nancy robándome los pensamientos.

Una alfombra a nuestra izquierda estaba regado y con un poco de sangre con este, todo estaba siendo descubierto poco a poco.

Trague saliva siendo un poco ruidosa, jamás me considere miedosa pero tampoco me gusta estar involucrada en un asesinato... Todo esto causaba un poco de ansiedad en mi. Tanto que comencé a respirar pesadamente. Will al darse cuenta de esto tomo mis hombros.

— ¿Estás bien? — lo mire.

— No... — me miro confundido — Solo estoy asustada...

Mike me miro — Tranquila, te protegeremos.

Asentí estando un poco más tranquila, toque las manos de Will y le dedique una sonrisa que era más una mueca.
Voy a hacer mi mayor esfuerzo.

Llegamos al porche donde estaba una cuerda en medio de la habitación, seguro los ataron. Y eso el lo que dijo Jonathan segundos después.

Se levantó — Debieron llevarlos a alguna parte.

— La señora Drisco — menciono Nancy — No dejaba de decir... Tengo que volver. Que tal si... ¿El dezollamentes ocurre en otra parte? Debe haber un lugar de dónde todo esto empezó. Una fuente.

— Un lugar que no quería que viera — menciono Once llamando nuestra atención.

— Si encontramos la fuente, tal vez podamos detenerlo. O almenos impedir que se esparza y dejé de hacer lo que tenga en mente.

— ¿Cómo lo encontramos? — pregunté.

— La señora Drisco... — mire a Will, y de inmediato supe de que hablaba.

Exclamé — ¡Si! Si tiene tantas ganas de regresar ¿Por qué no la dejamos?.

...

Llegamos al hospital donde se suponía que estaría la señora Drisco, tuvimos una pequeña pelea con la secretaria que estaba a cargo de dar autorización de entrar a las habitaciónes. Tuvimos que decirle que somos todos sus nietos.
Sin mucha confianza acepto, nosotros nos quedamos en la recepción. Me senté en una de las sillas mientras mordía mi uña del dedo gordo.

Eleve la mirada al ver qué Mike y Lucas iban a comprar algo de golosinas para merendar, había recordado que no he comido nada y pues debía tener energía para lo que pueda pasar. Así que me levanté, agradecí al ver qué tenía un dólar en mi vaquero.

— ¿Hay KitKat? — pregunté y mire el delicioso dulce — Quiero...

Puse el dólar y aplaste algunos botones para que después esa cosa casi sacará el dulce, digo casi por qué se quedó atascado.

— ¿Que? ¡No! — me altere.

— Tranquila...

Mire a Mike — Jamás me digas que me calme Wheeler, jamás.

Lo asesine con la mirada, puse mis manos en cada extremo de la máquina expendedora intentando batirla un poco, la golpee con mi pie, apenas hice una pequeña grieta en el vidrio. Los chicos me miraron sorprendidos. Bueno, cuando estoy enojada y con hambre me pongo demasiada agresiva.

— Eres genial — menciono Mike con una sonrisa tímida.

Lucas nos miro sorprendidos pero no comento nada.







Me imaginé a t/n como Número Cinco JAJA

Tanto tiempo sin actualizar, perdonen ya voy a actualizar más seguido🤸‍♀️

Las amooo✨


PROMISE 3 || S.T ||©🔚Donde viven las historias. Descúbrelo ahora