23.

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La última semana de diciembre pasó en una ráfaga de velas encendidas, papel de regalo roto y un clima lo suficientemente frío como para estar todo el día en la cama. La gente de Wonwoo pasó por allí el día de Navidad y la familia de Mingyu los visitó dos veces más, y según todos los informes, la familia colectiva Kim-Jeon debería haber estado abrumada por el cansancio, en cambio, la energía atravesó a los cachorros y su energía se alimentó a sí misma, pasando de un cachorro a otro como líneas eléctricas entre torres de electricidad.

"Quiero tener una fiesta de Año Nuevo", dijo Mingyu al techo, dos días antes de la festividad en cuestión.

Wonwoo hizo esa estúpida y adorable cara de confusión somnolienta cuando miró por encima de la parte superior de su iPad, cuando estaba leyendo un libro (le compró a Mingyu uno para Hanukkah. Probablemente debería haber esperado a que el último día fuera un gran final, pero los cachorros delataron a Wonwoo y él terminó dándoselo a Mingyu temprano. Había visto a Mingyu comprarse rápidamente una gran biblioteca digital, una mirada de satisfacción en su cara de alfa tonto y un olor alfa complacido flotando a su alrededor), y colocó sus gafas de lectura con montura de plástico sobre su despeinada cabeza rubia. Él aventuró: "¿Quieres hacerlo?"

"Sí", dijo Mingyu. Se movió para sentarse un poco más y explicó: "Escucha, sé lo que estás pensando".

Wonwoo arqueó una ceja.

"¡Lo sé!" Mingyu insistió: "Hemos estado haciendo muchas mierdas, pero escucha, Wonwoo. Esto es ... es ... es importante. Sé que el día de Año Nuevo es solo otro día, pero es como ... simbólico o algo así. Sé que los bebés y yo tuvimos un nuevo comienzo cuando llegamos aquí, pero esto es como una fiesta para eso. Como si hubiéramos llegado tan lejos de donde comenzamos, y ahora ... ahora estamos comenzando algo nuevo".

Wonwoo no dijo nada de inmediato.

"O no", añadió Mingyu, "quiero decir. Es solo que, tal vez fue una idea estúpida".

"Gyu", dijo Wonwoo en voz baja, "no es estúpido. Vamos a hacerlo. ¿A quién quieres invitar?".

"A Minseo, al menos", dijo Mingyu, "y Minghao, Seokmin y Chan".

"¿Los sospechosos de siempre?", Wonwoo preguntó: "Hansol traerá bebidas caras si lo invitamos".

"Siempre y cuando traiga a su compañero para controlarlo", bufó Mingyu. Mingyu no sabía dónde estaba parado con Hansol. Le gustaba sobre todo porque sabía que, aparte de las interacciones mordaces entre los dos, Wonwoo se preocupaba profundamente por Hansol y era uno de los amigos más antiguos y queridos de Wonwoo. La naturaleza bulliciosa de Hansol no encajaba bien con Mingyu en sus días malos, pero Año Nuevo no sería uno de los días malos, o eso esperaba Mingyu. El año nuevo sería una celebración.

Mingyu pensó en privado en la fiesta de Año Nuevo como una celebración de 'De alguna manera estoy malditamente vivo y en la mayor parte del tiempo bien'.

Seungkwan sí que refrenó a Hansol, ya que para la fiesta trajo una caja enorme tan llena de licor que el peso se tensó contra el suelo. Hansol abrió las cosas duras sin parpadear, y él y Minghao se sentaron a la mesa de la cocina para un concurso de bebidas a base de vodka.

Por mucho que Mingyu quisiera dejar de lado la precaución y desmayarse para la víspera de Año Nuevo como se imaginaba que haría cuando era un adolescente, mantuvo su consumo de alcohol en un sorbo de cerveza (que no le gustaba) y un vaso de champán (que estaba bien). Siguiendo la letra del consejo de Joshua, evitó las bebidas alcohólicas fuertes, aunque sentía tanta curiosidad por el atractivo ahora como a los catorce, escuchando a los estudiantes mayores susurrar sobre la cerveza comprada por los mayores y el bourbon robado del gabinete de licores de sus padres.

Lo que solía ser - MinwonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora