Confinado dentro del pecado, eternos universos nos rodean.
Sin embargo no pude atormentar el dolor.
Tu risa fue el principio que trajo sentido, el que pudo darle pelea al dolor.
Pero en otro tiempo aquel dolor nos recibió con los brazos abiertos y las líneas nos marcaron para siempre.
Entre los poemas y las letras perdidas yacen almas concebidas con penas de muerte.
Nos atan de manos, ciegan tus ojos para que no les creas, usan tus palabras para engañar.
Déjame, demonízame, hazme sentir el principio del dolor, el que hace dormido en el interior.
Escribiendo vacíos en la lluvia, la tormenta se lleva mi mente y me atasco en aquel lugar.
En medio de las líneas, las lágrimas yacen ocultas de mis ojos, me ciegan en un ahogo que no puedo sentir.
El principio del dolor quisiera conocer, me detiene aquí y es imposible respirar con tranquilidad.
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Letargo (Pensamientos Perpetuos IV)
PoesíaA veces un sueño puede mas que una triste realidad. A veces los sueños nos salvan de esta terrible falta de humanidad. A veces dormir de por vida no es tan malo cuando tus sueños se hacen realidad. A veces los sueños son sólo ilusiones para escapar...
