En busca de mi alma.

Capitulo 2.

Luego de unos momentos de quedarme observando el cuerpo de Ana o lo que quedaba de él, escucho una carrosa acercarse mientras la multitud se abre paso para que la carrosa llegue a donde está el cuerpo de Ana.

-No cabe duda que son los líderes de los cazadores -Me murmura Erick al oído.

Los cazadores son los que se encargan de buscar y matar a las brujas.

Veo al viejo baboso de Selestine es el primero en bajar... Es un viejo de unos 50 años de edad, sus ojos no sé si son marrón oscuros o negros pero tiene una mirada tan fría que es imposible sostenérsela. Su cabello es blanco, tan blanco como la nieve que cae en el tejado de mi casa...

Una cosa que siempre me voy a preguntar es ¿Por qué siempre están vestidos de negro? ¿Será para que no noten la sangre en sus vestidos delas otras muertes? ¿Es una regla? No lo sé, quizás nunca lo sepa, pero eso sí, se ven perfectos.

Cuando Selestine sale por completo de la carrosa, sale una chica rubia alta, que lleva una cola de caballo en su cabello, desde donde estoy no le puedo ver bien los ojos en realidad, al único que he podido ver de cerca es a Selestine... Es primera vez que la veo debe ser nueva, al momento de bajar y colocarse detrás de donde esta Selestine su arrogancia nos cubre a todos, todos la notan, no podía ser tan perfecta después de todo.

-¿Quién es esta?-dice Erick señalando a la rubia.

Me encojo de hombros y sigo mirando.

El último en salir es Aron, él es el sobrino de Selestine, aunque en realidad es como su hijo, mi madre nos contaba que su madre falleció de una enfermedad y desde entonces Selestine se ha encargado de él.

Aron es un año mayor que yo, él tiene 19 mientras que yo tengo 18, es un chico de piel blanca, tan blanca como la sal del mar, su cuerpo es hermoso, tiene músculos, no tan grande pero están perfectos... Pueblerinas que se les han acercado dicen que tiene precioso ojos grises, aunque desde donde yo estoy solo puedo mirar su cuerpo y su cabello... Su cabello es hermoso, lacio y es negro, pero no un negro común es un negro como las plumas de un cuervo.

Al salir todos de la carrosa color gris que hace andar dos caballos blancos. Toda la multitud que solo hace minutos gritaba al cuerpo de Ana quemándose todos absolutamente todos se callan... Solo escucho como el viento fuerte pega en mis oídos haciendo un extraño ruido.

-Muerte... Muerte es lo que deja venderle el alma al Diablo acá una pequeña demostración, todos los que hagan cosas así terminaran de esta manera-Añade Selestine señalando las cenizas de Ana.

Mientras que los otros dos líderes ni siquiera abrían su boca, solo escuchaban lo que Selestine dice.

Mientras Selestine da un discurso de las brujas y sus muertes un recuerdo me llega a la cabeza haciendo que me maree del susto y el miedo se apodera de todo y casa milímetro de mi delgado cuerpo.

-Sí, tenemos que salir de acá- Me susurra al oído Erik.

Damos la vuelta para marcharnos y cuando nos dirigíamos a nuestra vieja carrosa llena hasta el tope de agua para tomar, una chica pega un grito que me eriza los pequeños cabellos de mis brazos...

Nos devolvemos hasta el sitio donde estábamos y vemos que una chiquilla sale de la casa de Ana y le grita a Selestine palabras que no logro entender.

Corremos rápidamente hacia donde se encuentra la multitud agrupada. Cuando llegamos al lugar Erick se sorprende y dice:

-Ho mi Dios, es Tazia... Zujei es Tazia- Me grita furete.

-¿Tazia?- Le pregunto a Erick muy desconcertada.

Vuelvo los ojos a donde está la pequeña que agita sus manos a Selestine y en seguida ese cabello alborotado que veo me hace caer en cuenta...

-Es Tazia Erick-Le digo a Erick para que se dé cuenta que ya la recuerdo.

Tazia es una niña de 12 años de edad que Ana cuidaba como a nosotros, aunque la diferencia es que Tazia vivía con ella.

- Maldita pactada-le dice Selestine dándole un latigazo en el lado izquierdo de su cara.

Quizás no compartí tanto con ella como lo hizo Erick pero igual se me invade el cuerpo de rabia e impotencia al ver cómo le dieron el gran latigazo a la pobre niña.

-¡TAZIA! - Exclamo tan fuerte que mis pulmones de quedan sin aires a los pocos segundos...

-Tazia-vuelvo a gritar... Pero esta vez toda la multitud se fijan en mí.

Doy unos pasos firmes y fuertes hacia el frente y cuando ya casi voy a salir de la multitud unos musculosos brazos me toman por las caderas.

-Ya no se puede hacer nada, igual la mataran. Y si te les enfrentas te mataran a ti también Sujei- me susurra Erick al oído mientras que los ojos de Selestine se clavan en nosotros.

-No Erick, no les tengo miedo- Le digo mientras que me libero de sus fuertes brazos. Luego de unos forcejeo entre él y yo, le doy un empujón que hago que se caiga de trasero en el pasto verdoso.

Salgo corriendo tan deprisa que en segundos me encuentro de rodillas antes la pobre Tazia... Su cabello alborotado color negro, su oscura piel y su cuerpo tumbado en el pasto hacen que se me salgan algunas lágrimas seguidas de muchas más.

-¿estás bien?- le pregunto a Tazia... Aunque sé que es una pregunta totalmente estúpida porque ella no para de llorar y tiene toda su cara cubierta de sangre.

Apenas logro entender lo que me dice, supongo que dijo "Me mataran".

-No, acá estoy yo para protegerte, le digo mientras sobo su enredado cabello.

Volteo su rostro delicadamente para ver el grado de daño que tiene en su rostro... Un fuerte látigo está totalmente marcado desde su frente hasta la parte izquierda del cuello, está llena de sangre y tiene la carne abierta, sobresaliendo... Esto nunca se le curara pienso.

-Todo estará bien-le digo a la niña mirando sus suaves ojos color café.

Mi corazón late más fuerte que nunca, pero me armo de valor y le grito a Selestine.

-¿Por qué lo has hecho?- le grito con todo el dolor de mi alma, mientras que la voz se me quebranta.

-Porque nadie me grita de ese modo, y mucho menos una hija de una pactada- dice Selestine sin ninguna expresión en su rostro.

Me quedo en silencio y bajo la mirada para observar por un momento el rostro destrozado de Tazia, y caigo en cuenta... Selestine Cree que Tazia es hija de Ana como Ana vendió su alma al diablo pensaran que Ana entrego también a Tazia en sacrificio porque es lo más común. Mis ojos se ponen tan grandes que parecieran que se fuesen a salir de mi rostro... Mataran a Tazia porque ellos piensan que su alma le pertenece a Satanás.

Tazia me mira a los ojos, ella a pesar de su edad también sabe que la mataran por eso. La abrazo tan fuerte que dudo que en estos momentos me la quiten de los brazos.

Mientras Selestine y los otros líderes dan la vuelva para montarse en la carrosa uno por uno, primero se monta Aron luego la rubia, y como siempre el ultimo es Selestine... Selestine susurra algo a uno de sus guardias.

El guardia se acerca y toma a Tazia por el cabello tan fuerte que en segundos tiene la mano llena de cabello de Tazia, ella empieza a gritar y esos esos gritos que me hacen caer en cuenta de lo que está sucediendo. Mientras el guardia se aleja arrastrando a Tazia por el cabello, me levanto como puedo y tomo una madera del lugar donde estaban quemando a Ana y alcanzo al guardia... Le doy con la madera tan fuerte en la espalda como puedo... Pero no es suficiente, él se voltea y con la mano izquierda que tiene libre y me tira un golpe que no veo venir... Justo en el rostro... Pierdo el equilibrio y caigo en el suelo inconsciente de lo que pasa a  mi alrededor.