Abrió los ojos lentamente, su mirada no recorrió más que el techo. Se sentó en aquella espaciosa cama y miró alrededor, solo vacío. Aquella cama parecía estar flotando en el agua, la ventana abierta permitía pasar al helado viento que en esa mañana se hacía notar y aunque llevaba varias prendas puestas gracias al frío, aún así sentía como el aire las atravesaba, no podía sentirse más fuera de lugar, más expuesta... nunca se sintió más sola. Había una silla... tipo coloquial con el tapizado rosa y un lindo estampado, preciosa. El recuerdo de Diane conversando desde ella había llegado a su mente como un fantasma.
"-No lo sé... Creo que este es el definitivo Dee -susurró emocionada como una niña pequeña.
-¿Cuántas veces he oído eso salir de tu boca Diane? -le dije, puse los ojos en blanco. 'Ella jamás entiende... ¿Cuántas veces tienes que caerte para saber que no debes cruzarte con las mismas piedras, hermana?' Pensé mientras la miraba agachar la mirada.
-No lo entiendes Dee, él es diferente... no es como Frank, ya sabes... -Seguía sonriendo como si quisiera que sintiera empatía por ella, pero no quería saber mas... al final vendría corriendo por qué ese chico nuevo le había roto el corazón ¿y yo? por supuesto que la escucharía, pero últimamente me estaba cansando de hacer esto todos los meses..."
Cerró con fuerza los ojos y negó. ¿Por qué ahora? Ya había sobrevivido muchos meses sin recordar. Se tocó la frente esperando que solo se sintiera mal, estaba muy caliente pero lamentablemente no era así. No quería recordar a su hermana pero una cosa llevó a la otra y entonces todo volvía a su cabeza...otra recaída. Su pecho se llenó de dolor y nostalgia, y automáticamente las lágrimas salieron sin cesar. Todo se desmoronaba dentro de ella, se caía a pedazos, le lastimaba... le desgarraba el corazón... El sollozar parecía tanto como una necesidad y se sentía tan común como el respirar, como una vieja costumbre que jamás se iría... No quería seguir... No sin ellos... ¿Por qué tenía que pasarles esto cuando eran una familia feliz?
Pataleaba y se retorcía en la cama, rasguñaba sus brazos, sus piernas, enredaba sus manos en las sábanas, jalaba con fuerza su cabello desde las puntas... así dolería más, pero no tanto como el vacío que habían dejado. Odiaba recordar, sus caras, sus nombres... las razones de sus partidas acababan con ella aún más... hasta que unos fuertes brazos la sostuvieron y detuvieron el dolor que ella misma se causaba. No supo cuándo ni cómo, solo quería ver esos ojos marrones tranquilizarla, decirle con ello que todo estaba bien cuando nada de eso pasaría... sorbía con la nariz hasta que su respiración se tornó regular.
Se sentó en la cama y lo miró confundida, pero más que nada avergonzada...
-No tenias que ver eso... -se limpió la nariz con la mano.
-No era una opción -él observaba detenidamente sus actos-. ¿Quieres hablar de eso? -preocupación y dolor acompañaban la voz de Brian, ¿había algo más triste que verla así?
-Por supuesto que no... -dijo muy segura de sí, ni siquiera parecía que intentaba suicidarse hace unos minutos con sus propias manos-. ¿Acaso quieres irte ya? -preguntó desconcertándolo.
¿Qué? Se preguntó a sí mismo Brian, ¿Que tenía que ver una cosa con la otra?
-¿Irme? No... Claro qué no... ¿Q-quieres que me valla? -preguntó temeroso sin mirarla, no quería verla a los ojos y que dijera un frio si.
-No... por eso no quiero hablar de esto... -se levantó de ahí y dejó a Brian sentado muy confundido. Él volteó la mirada pero solo vio la puerta del baño cerrarse. Mientras estaba ahí trataba de encontrarle sentido a lo que había dicho, pero a cualquier conclusión a la que llegara no concordaba con nada.
Doreen salió del baño y se sorprendió un poco al encontrarlo ahí todavía.
-Respeto tu espacio... -soltó él rápidamente-. Pero si sigo viéndote desmoronar así, la próxima vez tendré que hacer algo al respecto.
Sonrió-. Con abrazarme todo pasará... -siguió su camino y salió de la habitación. Brian se quedó de nueva cuenta sentado recordando la imagen de la chica tirada en la cama mientras su universo se desmoronaba. No le quedaba más remedio que seguirla. Desde las escaleras la vio en la mesa con el computador enfrente de ella pero entonces la sangre se le heló. Esa canción...
Solo supo agachar la cabeza mientras la piel se le erizaba, podía sentir los ojos de Doreen sobre él... quemándole.
Recordar los buenos tiempos era maravilloso pero con esa canción ningún recuerdo bueno venía, solo de despedidas y mentiras es lo que llegaba a su mente.
-Oh Dios, Brian... ¡Estás en YouTube! -él levantó la vista para poder ver su reacción. Sonreía alegremente y sus ojos no podían abrirse más... Esos ojos rojos que junto con su pecho sollozaban minutos antes se escondían tras felicidad. Vaya cambio.
Sonrió de lado. Ya lo había descubierto... sabia su secreto, y eso no era bueno, contar historias tristes no era lo suyo y tampoco lo de Doreen así que los dos seguirían ahogándose en su desgracia.
-Demonios, ven acá... -se levantó de la mesa y fue por él a las escaleras tomándolo fuertemente del brazo y juntos fueron corriendo hacia la mesa. Ella lo hizo sentarse a regañadientes a ver el video que estaba en la pantalla. "...Nightmare - Avenged Sevenfold - [Official Music Video]..." con letras grandes. Brian tragó saliva.
-¿Eres tu?...Oh, pero que pregunta... ¡Claro que eres tu! El mismo pelo alborotado, esa nariz inigualable... -rió melodiosamente-. ¿Cuándo ibas a decírmelo "Inquisidor"? -preguntó burlona.
-Yo... -pensaba en que decir pero nada de lo que había en su cabeza era lo suficientemente parecido a la verdad, porque no la diría-. No es la gran cosa -se encogió de hombros.
-Pero por supuesto que lo es, tiene mas 64M de visitas. Todo indica que es una banda muy famosa -decía sorprendida sin dejar de navegar por el canal de la banda-. Hay más vídeos... Más canciones... -pero su rostro oscureció junto con su tono de voz-. Y tu estás aquí... -lo miró de arriba abajo y como si Brian creyera que ella entendía el por qué, él comenzó a ponerse nervioso.
La chica notó la tensión que se había acumulado en la habitación en tan sólo tres segundos así que habló rápidamente-. Eres muy bueno Bri.
Sonrió al oír su nombre abreviado-. Yo... no conocía esta banda, soy una idiota -rió-. El cantante... Wow... que voz... -dijo mirando fijo a la pantalla, Brian frunció el ceño, la veía y luego a la pantalla congelada donde estaba Matt en la camilla. Su antiguo compañero.
-Si, él es un gran cantante... -dijo, rogándole a Dios por dentro que dejara de ver la pantalla como una adolescente enamorada y lo volteara a ver a él.
Doreen cerró fuertemente el computador volviendo en si después de ver ese lindo pecho descubierto en la pantalla y lo miró con una sonrisa. Brian la miraba atentamente sin expresión en su rostro y trataba de sacar algunas palabras pero nada venía a la mente.
-Yo... -Brian comenzaría a hablar pero Doreen se lo impidió con el simple hecho de posar su mano en su rodilla, Brian automáticamente se relajó.
-No te preocupes. Tal vez tengas muchas cosas que no quieras explicar, y yo no pediré que lo hagas -sonrió dulcemente.
-Gracias Doreen -dijo por fin después de sacar el aire que se había convertido en angustia. Se sentía tan bien decir su nombre, era hermoso, ella era hermosa.
ValeryA7X: ¿Y que tal... les gustó?
Doreen en la multimedia ♡~♡
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Tu Maldita Pesadilla [Synyster Gates]
RomanceUna sonrisa no siempre es señal o resultado de que existe una vida llena de felicidad y paz, para Doreen era la máscara perfecta con la que ocultaba la tragedia que la acompañaba día tras día. Derechos de autor♡