Juro que no quería hacer esto, pero me lo han pedido demasiado. Tómenlo como un regalo por el 14:) ¡Feliz día del amor y la amistad!
Lo dejaré solamente dos días, es como un final alternativo.
Si el accidente no hubiese ocurrido.
Aidan.
—Ya te dijo ____ que estamos por llegar, no te preocupes.
—¡Aidan, cuidado! —Mi vista se posó en la carretera y pude esquivar al coche que venía directamente a nosotros. —Ya te dije que pongas atención. —Dejo un beso en mi mejilla para luego caer dormida.
Rayis.
—Ey... pequeña, princesa. —Escuché murmullos, tenía demasiado sueño como para hacer caso a mi llamado. —¡Despierta babosa! —Un impacto me hizo brincar del susto.
Me encontraba bajo la cama y Orlando solo se reía de mi.
—Jodete Johnny, déjame dormir. —Me levante con pereza y volví a mi cama.
—Los chicos te están esperando a bajo ¡Es navidad!
—Que bueno que sea navidad, ahora largo.
—¡Santa Claus ya trajo tu regalo! —Me giré para verlo mientras levantaba mi sabana.
—Le pedí a Santa que me dejarás en paz por un día y sigues aquí. —Solté una risa burlona.
—Sabes qué, jodete. —Y se fue dejándome en paz y tranquilidad.
Estaba dispuesta a dormir cuando unos leves golpes se escucharon en la puerta.
—¡Déjenme dormir, joder! —La puerta se abrió levemente y lo pude ver, mi esposo.
—Buenos días dormilona, alguien esta de mal humor.—Se acercó a mi con una sonrisa, se sentó a mi lado y comenzó a acariciar mi cabello.
—Son las 2 de la tarde, ¿Quién se despierta a esa hora?—Refunfuñe.
—Tienes razón, las personas normales se levanta mucho antes. —Lo mire indignada. —Es broma amor, pero tienes que levantarte. Vamos a comer.
—Bien, ahora vete. —Asintió mientras besaba mi mejilla. Salió y con mala gana me metí a la ducha.
***
—¡Que vivan los novios! —Ese era Orlando gritando.
—Son esposos, baboso. —Todos reíamos mientras Johnny cantaba, gritaba, tomaba y lloraba.
—Es que... no puedo creerlo. —Se limpió la nariz. —Ya estas casada, pero si eres una bebé. —Tomo un largo trago de esa botella que habíamos pedido hace unos minutos. — Ya no crezcas, no me dejes —Derramaba lagrimas dramáticamente. Todos reíamos y las demás personas a nuestro al rededor se alejaban en cuanto veían a Orlando haciendo su drama.
—Tranquilo, el que debería de estar llorando soy yo.—Finn también tomo un trago. — El amor de mi vida se casó con otro hombre. —Soltó burlonamente.
—Cállate, Wolfhard. —Reímos.
—Pues yo digo que brindemos por nosotros. —Emilio extendió una copa del centro de la mesa, todos repetimos su acción. —Tú no. —Le quitó la copa que sostenía Johnny antes de que la tirara encima de Joaquín. Enserio ya estaba muy borracho y solo teníamos como 2 horas aquí.
ESTÁS LEYENDO
"El novio de mamá "||Aidan Gallagher.✨ -SIN CORREGIR
De TodoCuando escribí esta historia no tenía en cuenta lo importante que es la ortografía. Decidí no editarla para no perder los lindos comentarios. #1 en original durante 4 meses.