𝐁𝐎𝐍𝐍𝐈𝐄 𝐀𝐍𝐃 𝐂𝐋𝐘𝐃𝐄 [ UsArg ]

O6

Estados Unidos sentía que la cordura se desprendía poco a poco de su cuerpo. Y ni sabía que hacer.

Cada sonido era un estimulante más a su paranoia. No solo el miedo lo invadía, también era la duda y la angustia. Simples cosas que no podía creer o imaginar, que no sabría cómo explicar.

California le hacía preguntas a modo de juego y estás lograban ponerlo aún más tenso, en cualquier momento preguntaría algo más de Argentina y él pensaba seriamente en optar por tirarse de aquel maldito auto. Podría estar siendo dramático, no era justo no responderle por su otro padre.

Pero no podía.
Solo no podía.

Eran preguntas tan simples, que lograban causarle escalofríos.

──Dad.

──Yes, darling?

──¿Cuál era la película favorita de papá?

Las lágrimas fueron inevitables para el estadounidense, frenó a un costado de la ruta y se dejó caer sobre el volante, totalmente destruido.

La californiana se asustó por esto mismo, fue muy repentina la reacción del anglosajón y ella sentía que fue su culpa.

Lo era en si, pero no entendía porqué.

──Dad?

Estados Unidos se quitó el cinturón pues éste lo asfixiaba, ella hizo lo mismo.

──Dad, no llores, please, sabés que me lastima verte así.

"Sabés" demonios ese maldito acento tan marcado e inconfundible que tenía él. Todo lo que tenía ella era parte de lo que tenía él.

──¿Cuál es el problema, papá? Realmente me asustas.

Odiaba que California hablara tan parecido a su madre, sentía que era él mismo quién hablaba y eso era capaz de volverlo loco. Siempre amó que fuera de ese modo, pero en ese momento solo estaba matandolo, estaba odiandolo, lo detestaba más que a nada. Intentó calmarse, pero los olores eran más fuertes y lo dañaban aún más.

Olores inexistentes que solo él podía percibir.

Respiró hondo un par de veces mirando el espejo retrovisor, giró a ver a su hija quien estaba demasiado asustada y le extendió los brazos para abrazarla.

──Lo siento, darling, solo... lo extraño demasiado. ──Ella no sabía cómo estar emocionalmente, lo que era seguro fue su falta de comodidad que eligió disfrazar de paz luego de lo dicho por su papá.

──Lo entiendo, pero estamos cerca y podremos volver a verlo ¿No es así?

USA sintió su corazón romperse. Si es que era posible un poco más.

──Si, es así.

──"USA". ──Llamó "Argentina". Recibiendo la atención de su marido. ──Hay una película que me recuerda mucho a nosotros y una vez la nombraste.

──Really? ¿Cuál? ──Tomó su mano izquierda besando sus nudillos al mismo tiempo que lo miraba, como siempre, respondiendo a sus ocurrencias casi instantáneas.

Esta acción le sacó una sonrisa avergonzada al argentino.

──"¿Acaso crees que somos los malditos "Bonnie and Clyde"?" ──Citó en un tono burlón, jugando un poco con las expresiones de su rostro.

"América" sonrió por como "Argentina" lo imitó, poniendo una voz chillona de adolescente alterado.

──¿Que tiene que ver con nosotros? No me digas que ahora eres narco o alguna estupidez así. ──Bromeó. ──Y tampoco lo pienses hacer ahora, ya estamos viejos.

──No, créeme que es algo mucho más cursi. ──Aseguró golpeando sus dedos de la diestra contra la mesa. ──Supongo que sí somos los malditos Bonnie and Clyde, después de todo sin importar qué, se amaban incondicionalmente.

"USA" sonrió con ternura. Si era mucho más cursi de lo que esperaba. ──"Arge..."

──Déjame terminar, además le tengo apego a esa película porqué... supongo que es parte de lo que somos.

Somos eso.

Amor incondicional.

Pura complicidad.

Intensa confianza.

Somos los jodidos Bonnie and Clyde.

──I love you, darling.