SULTANA 2: Regresar y Enmedar Nuestros Errores (Hiccstrid) (Jelsa)

Complicaciones

Elsa

El aire se me iba de imprevisto, sentía mi cabeza reventar y mareos sin razón venían haciendo que mi cuerpo no responda.

No Elsa, ahora no puedes perder la cabeza.

Saqué mi careta como lo hacía con inversionistas nuevos o que se querían pasar de listos, mirada fría y sin ninguna expresión en mi rostro, miré al juez como también al abogado.

—. ¿Cuánto demoraría este nuevo divorcio?— pregunté al juez, sujetaba con fuerza mi cartera que llevaba.

—. Bueno, ustedes sin contar el divorcio llevarían cinco años de casados. En ese caso se haría esta vez un divorcio Express legalmente pero tienen dos hijos ¿si no me equivoco?— asentí— Bien, en ese caso no funcionaría en nada el divorcio Express, dado que los niños deberían conocer a su padre, la manutención para ellos y coordinar visitas del padre.....

—. Eso no será necesario— interrumpí— El señor aquí presente— mire de soslayo a Jack— nunca firmó algún documento donde el sea padre de mis hijos, el señor legalmente no tiene hijos conmigo y el está  de acuerdo.

Hace dos años le envié una carta donde no se responsabiliza de nada, mis hijos estaban registrados con los datos de Picht y Jack estaba de acuerdo.

—. Eso tomaría más tiempo de lo previsto Sra. Black, viendo eso tendríamos otra reunión porque Jack será un simple empresario millonario acá pero recuerde que es un sultán de India, esos niños.....

—. Mis hijos no necesitan nada de este hombre, créame que cuando digo que me encargo de ellos es porque sí. Mis hijos no merecerán más de esa fortuna en India porque aparte de ser empresaria de New York, también soy una princesa de India, mis hijos pueden tener más de lo que puede darle su supuesto padre— contra ataque, Jack se encontraba callado, tanto que daba rabia.

—. Elsa— me llamó, pero no hice caso.

Me encontraba furiosa y con una rabia iracunda pero me tenía unas terribles ganas de llorar. Miré a mi abogado.

—. ¿Cuántos años?— pregunté con la poca paciencia que tenía.

—. Esto demoraría más de un año Elsa— me respondió Raúl.

Sentí un balde agua fría debía de salir antes que me desestabilice y pierda la cordura, donde decir nada salí del lugar. Los gritos no se hicieron esperar pero no podía pensar con claridad necesitaba aire fresco y aquí no lo encontraría. Raúl me llamaba más no hacía caso antes de bajar las escaleras sentí que alguien me tomaba del brazo.

Me volteé decidida dándome cuenta que no era Raúl o el abogado Karin sino el mismo Jack.

—. ¿No te cansas?— le pregunte sin importarme que me vea llorar.

—. ¿De qué?

—. De hacerme daño— respondí, una lagrima rebelde salió sentí la calidez de su mano quitármela pero la aleje de imprevisto— te quiero lejos de mi vida, hagamos como su nunca nos hemos conocido.

— ¿Como olvidar algo que sigue en el presente?

—. Igual como decías sentir algo cuando no es verdad— lo encaré, puse ese rostro inerte que en el pasado me hacían colocar.

"Nunca muestres tus sentimientos Elsa"

—. Eso no.....

—. Jack, cállate. Tú jamas me amaste ¿El amor daña? No, y contigo sufrí bastante. ¿Por qué después de tanto sigues causandome daño? ¿Qué daño te hice para que me hagas miserable? Te di el divorcio Jack, te lo di porque estaba destrozada y cansada de aparentar algo que no soy, te di unos niños de los cuales dijiste que no eran tuyos y después de dos años me hablaste por teléfono para decirme "comprobé que son míos, quiero verlos" — comillas con mis dedos— si de eso se trata de amor, entonces todos sufrimos una ilusión y después esa ilusión se rompe trayendo el dolor— estaba dispuesta a irme pero nuevamente me agarró mis muñecas— aléjate me haces daño.

—. Elsa.....

Iba a quedarme, pero su celular sonó lo tomó y vio el identificador. Me soltó al ver el nombre de la persona que llamaba, me miró.

—. Solo un segundo— pidió.

—. No, entiendelo aunque me muestres amor. Siempre será ella, siempre la elegirás— me alejé.

Como siempre se quedó, aunque ya no me ardía el pecho todavía seguía abierta la herida. Solté un par de lágrimas de camino al estacionamiento, al encontrar mi auto subí y me permití llorar.

"Entiendelo de una maldita vez, siempre seré ella"

" Siguen casados ante la ley"

" El proceso demorará por lo menos unos años"

Todas las oraciones dichas se repetían una y otra vez en mi cabeza, solo había una forma de solucionar este problema.

Saqué mis llaves del bolso y empecé  a conducir. Tomé mi celular y la llamé.

—. Bueno? Elsa?

—. Astrid necesito tu ayuda.

......

Bajé del auto para subir rápido al ascensor, los pisos que avanzaban se me hacían los más lentos posibles y necesitaba llegar ya. Cuando dio al piso treinta salí del ascensor y sin esperar que dijera algo la recepcionista entre sin tocar.

Astrid se encontraba mirando la cuidad desde las paredes de cristal sólido. Me tomó unos minutos en lo que pensaba, quería preguntar por ella primera pero no me lo permitió.

—. ¿En que estupidez te metiste ahora?— me pregunto con su misma voz fría.

—. ¿Cuánto tiempo se demoraría un divorcio?.

Astrid volteó a verme, su ceño se frunció.

—. ¿Piensas divorciarte de Picht?

Sabia que me iba a regalar por ser tan estúpida en confiar en Jack pero yo en ese tiempo estaba demasiado dolida como para pensar si tenían validez esos papeles. Pero necesitaba solucionar este error.

—. Toma— le entregué los papeles que el juez me dio.

Ella volvió a fruncir su ceño mientras dirigía la vista en el documento, los minutos siguientes eran tormentos tuvo la gentileza de leer todo el documento cuando lo único que tenia que hacer era leer la primera hoja.
Su mirada se dirigió a mi, sabia que estaba furiosa pero no necesitaba eso sino otra cosa.

—. ¿Cómo mierda se te ocurre firmar algo que no lees? ¿Sabes el tamaño del problema en el que te metiste?

—. Lo sé, pero ahora no necesito tu regaño, lo que necesito ahora es que me ayudes a salir de esto.

—. No puedo estar solucionando tus problemas. Es que no entiendes, él te dejó, el prefirió a su amante, él prefirió divorciarse de ti y casarse con ella. Él hizo su vida mientras sigues estancada entiendelo a él jamás le importó tu dolor, mientras que tú nunca le guardaste rencor cuando malogró tu vida por completo ¿Quieres que siga?

—. ¿De qué te vale? ¿Guardarle rencor para estar como tú? No Astrid, por más daño que me hizo jamás le guardaría rencor porque.....

—. Porque lo sigues amando confiesalo.

—. Y tú ¿Sigues amando a Hiccup?

Las cosas sigues un poco mejor, disculpas a todos por demorarse pero en mi país lamentablemente comenzaron hace dos semanas las clases y no me dio tiempo de publicar, tal vez publique mañana. Paciencia 🙏

Besos 😘