|| Kilig___Natasha Romanoff || [FINALIZADA]

X "Mi perfecta adicción"

Un silencio eterno dominó la llamada mientras la rusa sentía su corazón encogerse, no la escuchaba luego del golpe y se estaba desesperando.

Verónica por su parte se levantó adolorida mientras su labio sangraba, buscando salir pero el hombre la alcanzó a agarrar antes que pudiera escapar, alzandola contra la pared al tenerla por el cuello.

--¿Se te acabaron los truquitos?--murmura Ivan entredientes--bloqueaste las cámaras, filtraste un video a los medios, hackeaste el sistema de armas y me tiraste agua hirviendo en el rostro--dice mientras aprieta el agarre--aplastar tu cuello sería demasiado fácil y aún quiero usarte contra Tony, así que te mantendré atada para que no puedas hacer nada más

--¿Te asusta una niña?--exclama Verónica casi sin voz mientras esboza una sonrisa arrogante--Creo que aún me quedan algunos

Dice al patearlo en los testículos con todas sus fuerzas para ser soltada en lo que se quejaba adolorido.

--¡Dejaré que los guardias hagan su trabajo en acabarte!, Seguramente no están muy contentos contigo

Verónica se levantó rápidamente mientras recuperaba el aliento para salir corriendo hasta el panel de control al escabullirse entre los rincones y dejar las industrias sin electricidad en lo que buscaba algún escape.

Tenía un nudo en la garganta mientras su corazón estaba desbocado ante el miedo inminente de no saber que le puede ocurrir a tu vida. Miedo que aumentó al divisar a un par de hombres a la distancia que aún poseían los bastones de electricidad e iban directamente a su dirección.

Tenía metros de ventaja pero iban disminuyendo considerablemente al no poder correr correctamente en tacones y en cuanto llegó a la salida, cayó de golpe al pasto.

El par de hombres se convirtió en una docena para ella sólo poder maldecir al idiota de Hammer que sólo le trajo ropa inútil cuando le pidió para pasar los días en la empresa.

Tirando los zapatos lejos y tener que escapar descalza, ¡¿Dónde mierda estaba esa rusa?!.

Natasha aún en la expo, presionó la llave hacia el hombre para acercarse a su oído mientras tira de su cabello.