Capítulo 4

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Capítulo 4


Felem sabía que era momento de pelear y demostrar lo que había aprendido en su vida como estudiante

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Felem sabía que era momento de pelear y demostrar lo que había aprendido en su vida como estudiante.

Su miedo se convirtió en ira.

-  Te vengare Danova!

Gritó y corrió  hacia la bestia.
Esta intentó golpearlo pero rápido la esquivó y blandiendo su espada Felem atacó. La bestia logró hacerse a un lado, sin embargo logró cortarle un poco en el brazo izquierdo.

Continuaron peleando entre las piedras del santuario.

Felem parecía tener la delantera, aprovechaba su tamaño y el terreno para incomodar los ataques de la bestia.
Sin embargo en un descuido terminó tropezando, su enemigo aprovechó y con sus largas manos lo golpeo, lanzandolo varios metros del suelo y golpeandose en una gran roca a la orilla del santuario.

Después de ese golpe Felem quedó muy herido, rápido de su mochila sacó una pócima alquímica que regenera su energía y cura sus heridas.
Al beberla se levantó para continuar peleando.

Sin embargo notó que la bestia se estaba llendo, rápido fue tras ella.
Apesar de sus esfuerzo, no era lo suficiente veloz y termino perdiendo su rastro entre la penumbra.

Lleno de ira gritó al no poder vengar la muerte de su amada

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Lleno de ira gritó al no poder vengar la muerte de su amada.
Resignado, caminó de vuelta al santuario.

Una vez ahí comenzó a tener malestares.
La posión que le ayudó a recobrar su energía y sanar sus heridas rápidamente, era demasiado fuerte para su organismo. 

Aún no podía controlar su sistema inmunológico para hacerlo más resistente a ese tipo de magia.

Comenzó a sentirse mareado.
Intentó ponerse de pié, pero al hacerlo perdió el equilibrio y cayó junto a las vísceras del santuario.
Felem quiso levantarse, pero no podía. Sentía como su corazón comenzaba a latir cada vez más lento y poco a poco comenzó a perder el conocimiento.

Sus ojos se estaban cerrando. Entonces escuchó ruidos de pisadas acercarse,  intentó abrir los ojos y antes de desmayarse logró ver que la bastia había regresado hacia él.

 Entonces escuchó ruidos de pisadas acercarse,  intentó abrir los ojos y antes de desmayarse logró ver que la bastia había regresado hacia él

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La voz de la nocheDonde viven las historias. Descúbrelo ahora