DESCUBRIENDO MI ADICCION

CONOCIENDO MI DOLOR OCULTO

Quedé mal después de la terapia de introspección, mi cerebro no paraba de recrear sucesos. Al dormir solo soñaba con esa niña que había visto, despertaba sudada y llorando, lo extraño era que  no lograba recordar nada de lo soñado. Pasaron 5 días sucediendo lo mismo, era tedioso tener que pedir sábanas a diario, en serio empapaba de sudor todo (sábanas, colcha, forro de almohada). Empecé a tornarme de nuevo muy fastidiosa y apática. Hacía la limpieza que me asignaban, Me duchaba, me vestía, desayunaba, lavaba platos y me quedaba tiempo para sentarme en el mueble a pensar un poco, pero hasta pensar me cansaba ya. Para evitar sentirme mal conmigo misma (lo cual era usual) empezaba a provocar problemas con mis compañeras, iniciaba las peleas o las ofendía, con Elo siempre me resultaba más fácil pelear, sin embargo también agarré a dos compañeras (la líder de cocina y la líder de grupo) para fijarme en sus errores y reportarlas o simplemente obtener algún beneficio por no reportarlas (tenia comida extra o simplemente me evitaba hacer ejercicios). Cada que me sentía mal conmigo misma buscaba escapar de esa forma, era más fácil ver errores de los demás antes que aceptar que yo no estaba bien. (Eso es un patrón que adquirí al ir creciendo, lo veía "normal" ya que muchísimas personas usan eso para el diario vivir).

Entre tantos turnos de vivenciales volvió a tocarle a mi Vivencial favorita <Luli>, -LULIIIII!! QUE EMOCIÖN VERLA- ¿Podemos hablar?; ¡Claro Nayib, dime!, Luli no me he sentido bien, me siento como diablo en botella, detesto sentir esto y realmente a mi lista de cosas en que pensar ahora ronda también esa niña de la terapia que hice con Julito<el vivencial>. Nayib no es correcto el comportamiento que has tenido con tus compañeras, te van a castigar, recuerda que esta semana vas a hablar con tu pareja, compórtate.

-MIERDA- pensé, es cierto Luli, que boba he sido, haciendo lo que me da la gana en vez de pensar que al fin voy a escuchar al amor de mi vida. Luli me quedó viendo y me dijo: -¿El amor de tu vida? ¿Y tu hija?, ¡Ay Nayib! esperaré a que te des cuenta de las cosas por ti misma!, -NO ENTIENDO- respondí; Mira más tarde hablaremos, ahora nos toca realizar las terapias matutinas; ¡Otra conversación inconclusa! -le dije-.

Entramos a terapias matutinas (eran 4 horas diarias solo en las mañanas, fuera de las terapias de las tardes y los recuentos de las 24 horas en las noches), decidí hablar en mi expresión de sentimientos: -Necesito ayuda, de verdad siento que estoy perdiendo tiempo, no logro ni siquiera recordar que es lo que sueño por las noches, mis ansiedades han aumentado, me duele muchísimo la cabeza, ya no tolero a las voces en mi cabeza-. Me interrumpió Paco <el vivencial de lunes a viernes> ¿Nayib hasta cuando buscas afuera de ti? ¿No te das cuenta que la enfermedad viene dentro de ti?. -Vamos a hacer algo-. Todas cierren los ojos, empiecen a recordar lo más increíble de sus vidas (el nacimiento de mi hija y el nacimiento de mi hermana), ahora recuerden a las personas que más extrañan y que esta lejos por las cosas que han venido haciendo (mi familia), recuerden un viaje que hayan realizado y haya sido el mas gratificante de sus vidas hasta ahora (El Oriente con Cartón), por último recuerden las lagrimas que han sacado a cada una de las personas que han amado y el motivo. Ahora saquen una hoja y escriban una carta dónde les van a hablar a su adicción, expresen todo lo que se les ocurra:

DE: MI                  PARA: MI ADICCIÓN

HOLA ADICCIÓN.. (realmente no supe que escribir y me quedé en blanco)

-Paco pidió las hojas.-

La mía en serio no tenía nada, pero veía a mis compañeras que tenían los mega textos y me quedé admirada, incluso mientras escribían lloraban demasiado. En serio el trabajo más duro de una persona es trabajar en uno mismo, pero yo me sentía aun bloqueada. Paco creyó que no estaba poniendo de mi parte (inconscientemente yo no planeaba formar parte del equipo) pero refutaba que hacía lo que podía. Me pasaron al frente, siéntate en la silla del medio, cierra los ojos, haremos meditación. <Seguí las instrucciones de lo que me decían y luego solo me dormí> Este viaje fue diferente. Regresé en el tiempo, me vi toda pequeña en la casa de mi abuela materna, yo jugaba por una máquina de coser que tenía mi abuela, tenía una barbie en mi mano y yo traía un vestido hermoso, de los que amaba usar, esos frondosos de princesas con mis medias de arandelas (cual montubia con plata jajajaja) y mis zapatitos de vestir. <Estaba hecha una diva a esa edad>. Luego vi a un tipo acercárseme <Un tío que hasta la fecha logro recordar su rostro>, meterme detrás de la máquina de coser, empezó a decirme: -Juguemos a las escondidas, ven escóndete conmigo que ya nos vienen a buscar, NO DEBES HACER NADA DE BULLA- . ME VÍ ASUSTADA, TAN NIÑA E INDEFENSA Y ESE TIPO EMPEZABA A TOCARME, YO VI LA EXPRESIÓN, SENTÍ RECORRER EL FRIO EN MI, CUANDO SACÓ SU MIEMBRO, HIZO QUE ME SENTARA EN ÉL, LA NIÑA EMPEZÓ A LLORAR DEL DOLOR (YO SENTÍA ESE DOLOR COMO SI LO ESTUVIERA VIVIENDO DE NUEVO), AL RATO EL TIPO SOLO ME DECÍA -CALLATE- -NO DIGAS NADA O TE HARÉ PEGAR DE TU MAMA POR DECIR MENTIRAS-.