―Win, ¿qué demonios te pasa?
Win miró a Gun con una mirada impasible mientras le metía un palito de helado a Jennie en la boquita. La hija de Off se había enfermado los últimos días debido a la ola de frío que azotaba la ciudad, y no era la única: ese día, Win tenía su agenda llena por lo menos durante una semana más.
No le importaba demasiado, porque Win amaba a los niños.
Siempre había querido un niño dentro de su familia, y el sueño de adoptar uno seguía ahí metido en su cabeza a pesar de la inestabilidad con Bright.
Inestabilidad. Como si fuera eso. Como si estuvieran pasando un mal momento y no le hubiera pedido el divorcio oficialmente tres días atrás.
En esos tres días, Win no había tenido noticias de su todavía marido, pero no lo iba a llamar para presionarlo.
Win conocía a Bright lo suficiente como para saber qué decisión iba a tomar finalmente.
―Tose, cariño ―le pidió dulcemente a Jennie, que obedeció.
La hija de Off, que había sido producto de su exnovia, era un encanto con todo el mundo. Era educada, bonita y tierna, criada por sus dos padres a pesar de que no estuvieran juntos ya que todavía conservaban una gran amistad aun cuando hubieran sido novios en el pasado.
Ella no tenía problemas en que Jennie pasara semanas completas con su padre pues tenía un trabajo pesado como gerente de una empresa de moda y solía viajar durante largos períodos de tiempo; sin embargo, no era una madre ausente como muchos solían pensar. Llamaba a Jennie cada noche preguntando como le fue en el día, y cuando su mamá estaba en casa, le ponía total atención a su hija. Además, conocía a Gun también, la actual pareja de Off, y no ponía reparos en que Gun fuera como un segundo padre para Jennie.
―Has estado comiendo helado a escondidas de tu tío Gun, ¿no es así, enojona? ―se burló dulcemente Win de la pequeña niña, que enrojeció por la culpa y vergüenza.
―No me cambies el tema ―reclamó Gun detrás de él―. Win, demonios, ¿cómo se te ocurre...? ¡Bright no merece ninguna oportunidad! ¡Te engañó con su asistente!
El breve recuerdo de ver a Bright tomándole la mano a New en su oficina, hablándole al oído mientras provocaba que se riera, causó una punzada de dolor en su corazón, pero fingió una indiferencia que no sentía para que Gun no siguiera retándolo.
Win nunca se había considerado a sí mismo como una persona celosa, no así como Bright. Mientras Bright era todo posesividad y gruñidos, Win era calma y silencio, porque Bright nunca le había dado motivos para dudar de él en esos ocho años que estuvieron juntos.
―Bronquitis aguda ―le dijo a Gun―, sólo descanso, mucho líquido y acetaminofén para bajar la fiebre.
Gun murmuró por lo bajo mientras comenzaba a abrigar a Jennie.
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Apego [ BrightWin ]
Fanfiction─¿Qué es esto, Bright? ─Una carta de divorcio. Lo siento, Win, pero ya no te amo. [ derechos de autor capitanamomo ]