episodio cuatro

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ÉLITE |
"Halloween"

Las cosas se ponían cada vez mas tensas

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Las cosas se ponían cada vez mas tensas. Luego de que Samuel haya pedido a Nano que se fuera para que dejara de provocar líos, Azucena pidió que regresara al salón para conversar sobre lo ocurrido.

── Cierra la puerta, Samuel ─ pidió cuando este llegó.

── Espero que hayas dejado bien atado al perro ─ comentó Lu de manera burlona ganándose el regaño de la directora.

── Nano es inocente hasta que se pruebe lo contrario. ─ explicó la mujer.

── O hasta que mate a alguien más ─ añadió Guzmán por lo bajo. La rubia frunció el ceño confundida.

── ¿No tendría que tener una orden de alejamiento o algo la policía? ─ inquirió Cayetana y Rebe se mofó.

── Madre mía ─ soltó ─ Lo único que ha venido a hacer es a decir tres verdades como templos, cosa que hacía falta. Tampoco ha rajado a nadie.

── Claro, porque las macarras como tú y él solo se hacen piña entre ellos. ─ se burló Lu.

── Una buena piña es lo que te hace falta a tí en la boca, guapa ─ corrigió la castaña.

── Por comportarte como una verdulera no vas a tener la razón, Rebeka ─ agregó Cayetana.─ Es la verdad.

── ¡Bueno basta! ─ ordenó Azucena ya cansada.

Cuando sonó la campana, Ema acompañó a Rebe al baño y allí en donde se encontró con Isabella, la nueva de la cual aún no había oido nada.

── Disculpadme, soy una tonta ─ dijo penosa luego de que se le cayeran los libros a los pies de las dos. ─ Soy Isabella, pero podeis decirme Isa.
─ se presentó dulcemente y ambas le dirigieron una sonrisa.

── Soy Rebe y mi socia a mi lado es la argentina, Ema ─ la presentó de manera amistosa y la mencionada le sonrió. ─ ¿Qué nos cuentas, colegui? No sabemos nada de tí desde que has llegado.

── Bueno, no soy buena haciendo amigos aquí, así que salgo con los de mi vecindario ─ explicó simpática sin borrar la sonrisa que llevaba en el rostro.

── Ni de coña, tú eres nuestra nueva amiga, y podeis venir con nosotras a la fiesta de halloween que se ha montado mi madre, se empeña en hacerme amiguis. ─ dijo mientras le hacían compañía hasta el aula.

── Que carita ─ murmuró la rubia al notar a Valerio decaído.

── Esa carita, es la de todos los días.
─ interrumpió Lu ─ ¿Verdad hermanito? Eso pasa por las mierdas que te metes. Te menten en una montaña rusa y puf, caída libre y acabas en la mierda.

ᴀꜰꜰʟᴜᴇɴᴢᴀDonde viven las historias. Descúbrelo ahora