Advertencia de: Mucho texto (capítulo más largo de lo usual. Lean con paciencia mientras se toman un tecito :'3) <3
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—¿Deberíamos irnos a casa, ya? Veo que estás temblando un poco por el frío, unnie.
—Estoy bien. Me gusta este lugar.
Chaeyoung se quedó a mi lado, apreciando conmigo como la vista de aquella gran capital se hacía presente frente a nuestros ojos.
Habíamos seguido evitando el contacto con otras personas durante aquella noche, por lo que fue necesario quedarnos albergadas en aquel acogedor, pero frío balcón. La presencia de Chaeyoung a mi lado hacía que el ambiente no se tornara completamente gélido. Su brazo sobre mis hombros y su mejilla sobre un lado de mi cabeza me daban el calor suficiente para seguir estando en aquel lugar compartiendo una conversación casual.
—¿Por qué nunca hacemos esto en nuestro balcón? —preguntó en medio de una pequeña risa.
—Porque solo llegamos a comer y a dormir a medias, Rosie —respondí tristemente encogiéndome de hombros.
A veces me preguntaba si realmente valía la pena tanto desgaste físico. A veces mis sentimientos también se veían sobrepasados y lo único que se repetía en mi mente era el abandonar absolutamente todo.
—Para tu cumpleaños comeremos bien. No dejaré que nadie te moleste para que puedas dormir más de 6 horas de corrido, unnie —dijo Chaeyoung, apretándome más contra ella, en un abrazo mucho más cálido.
Sí, a veces quería dejar todo atrás, sin embargo, pensaba en mis compañeras, sobre todo en Chaeyoung siendo feliz mientras cantaba y bailaba sobre algún escenario. En ese momento podía sentir que mis ganas de seguir se renovaban, también por mí, porque era una de mis pasiones y también porque quería seguir estando a su lado y sentir esa extraña felicidad suya que siempre me contagiaba.
—Agradezco que quieras velar por mi sueño ese día, pero será un día como cualquier otro, Rosie. —Un fuerte suspiro de su parte hizo que algunos de mis cabellos se desordenaran —. Aunque ese día no tengo que grabar para el drama —agregué con el fin de que Chaeyoung no me regañara, como todos los años, por menospreciar el día de mi nacimiento.
—Lo pasaremos juntas. No intentes decir que no, unnie.
Había estado recordando esa pequeña parte de nuestra conversación durante toda la semana. Me sentía inusualmente emocionada por aquel día. Hace tiempo no hacíamos planes para quedar juntas para algo que no fuese relacionado con lo laboral.
—Feliz navidad atrasada, Jisoo —dijo Lisa, casi lanzándome una bolsa gigante a mis brazos.
—¿Navidad? —pregunté. Lisa se encogió de hombros —. Me debes el de cumpleaños igualmente, Manoban.
—Pero si a ti no te interesa tu cumpleaños —mencionó con un puchero.
—¿Por eso me das el de navidad hoy justamente y ahorras un regalo?
Ella solo volvió a encogerse de hombros. Realmente Lisa era astuta. Todos los años hacía lo mismo.
—¿Esperas a alguien? —preguntó, sentándose a mi lado en el gran sillón de nuestro pequeño estudio de grabación — Se supone que hoy tienes libre.
Murmuré levemente el nombre de Chaeyoung, algo avergonzada. Era el primer año que no me quedaba encerrada en casa, tomando mi día libre, esperando que las horas pasaran para volver a mi rutina. No debía sentirme cohibida por querer hacer algo diferente, sin embargo, lo estaba sintiendo, más aún al ver la sonrisa burlona de Lisa, la cual estaba a punto de explotar en mi cara.
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Cambiaría todo por ti [Chaesoo - Suse/Rozy] (Libro II)
RomanceRoseanne Park simplemente debía cumplir con su trabajo como idol. Enamorarse de Kim Jisoo fue inesperado e irremediable. «Como el amor no obedece a la razón, no puedes planear desenamorarte, únicamente puedes vivir con ello o actuar en consecuenc...