Capitulo 18

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 Naruto seguía a la pequeña que corría por toda la casa, hasta que llego a una habitación donde había un pequeño peinador rojo, se adentro con cuidado mirando a su alrededor se acerco hasta la reliquia familiar cuando su mano tocaría el mueble la pequeña Aiko hablo detrás de el —No toques eso, ahí escondí el tesoro de mi familia — el enojo estaba en la voz de la pequeña, Naruto sabia que algo iba mal —No deberías tocarlo— grito desapareciendo de la entrada del cuarto para aparecer frente al de ojos azules, dando un manotazo  — Eres tu— afirmo el rubio 

La pequeña lo miro con odio para decir —¿Sabes tu quien soy?

—Aiko— fue lo único que dijo Naruto sin despegar los ojos de la niña

—Así es, yo soy Aiko— afirmo la pequeña con una extraña sonrisa que hizo temblar al Naruto —¿ Porque finges ser alguien que no eres?— cuestiono Naruto, la pequeña Aiko sonrio de forma extraña para desvanecerse del lugar, el teléfono comenzo a sonar, Naruto lo miro indeciso pero lo tomo —¿Hola?

—Kuruma.

—Temari, encontré a la niña —dijo antes de ser interrumpida de nuevo por el demonio femenino —Kuruma, no es el espíritu de una persona muerta, es el espíritu de una anciana viva— informo Temari 

—¿Qué esta viva?— se sorprendió Naruto ante lo dicho por la rubia 

—Tienes que regresar por donde entraste, Itachi te estará esperando —dijo Temari colgando después de dar las indicaciones.

Naruto salió de la habitación encontrándose con el pasillo extrañamente solo, la alarma estaba en su cabeza, y repetía constante mente "Algo esta mal" siguió su camino con cautela hacia a fuera, sorprendentemente la casa estaba vacía su mente intentaba hallarle lógica al espíritu de un vivo —¿Cómo es eso posible?— se pregunto cuando se sintió a salvo fuera de esa casa  

Sintió un ligero empujón en el hombro, después un dolor intenso un pitido en sus oídos, se sentía desorientado sin saber la razón,  volteo su cuerpo  con dificultad se sentía flotar frente a el estaba la pequeña Aiko junto con el resto de personas, dos de ellas traían un arma de fuego que apuntaban a su dirección, el cielo nocturno fue lo siguiente que vio cuando su cuerpo callo.

El lugar comenzo a oscurecerse señal de que el rollo de la película llegaba a su fin, sentía frio y mucho dolor, humedad sus labios comenzaron a tiritar de frio, dejo de ver el cielo estrellado para ver a la pequeña que tenia una sonrisa de satisfacción antes de desaparecer ante sus ojos 

"Esto no puede ser" pensó el rubio mientras las lagrimas se aglomeraban en sus ojos "Yo tengo que salir de aquí" sus pensamientos mostraban la desesperación de estar ahí tirado sin poder moverse, con frio, con sueño sintiendo que la vida se iba "Tengo que ir con Sasuke a ver mi película favorita" la oscuridad absolvía todo el mundo de la película sus ojos se sentían cansados cuando lo vio, no supo como pero el estaba ahí sonrio antes de que perdiera el conocimiento.


Sasuke tenia miedo, mucho miedo, estaba desesperado, tanto que sin pensarlo se adentro en la película, su corazon latía acelerado el color se iba de las personas, las cosas dejaban de moverse, ese mundo solo vivía una hora, camino con paso rápido hasta una casa donde sin pensarlo se adentro, buscaba algo y ya sabia que era.

Cuando entro en los terrenos de la casa en el portón de frente (el entro por detrás) lo vio tirado, en sus ojos se veía como se le iba la vida —Naruto, resiste por favor— suplico con un grito Sasuke —Naruto, despierta—seguía llamándolo, con cuidado lo tomo en sus brazos todo a su alrededor se consumió en el fuego.

"Naruto despierta" llamaba una voz en su cabeza, el rubio abrió los ojos para encontrarse en un lugar desconocido, asustado se levanto de un salto, mirando en todas direcciones, su ropa había cambiado, ya no era ese horrendo vestido, la camisa que llevaba era de color  naranja, en su mano había un helado de fresa y estaba en el cine en compañía de Sasuke dando comienzo su película favorita —¿Cómo llegue aquí?— pregunto desorientado volviendo a tomar asiento 

Sr HadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora