By your side - Intenabo

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Gustabo había acabado desplomándose en medio de la carretera, no era un lugar donde pasaban demasiados vehículos, asique se quedó en el lugar inconsciente varias horas, empezó a llover, y él seguía ahí tirado sin fuerzas, hasta que abrió los ojos viendo borroso, una silueta desconocida lo agitaba para que despertara

-Señor, señor, despierte- Una voz desconocida, estaba a centímetros suyo, pero lo escuchaba a kilómetros de distancia, volvió a cerrar los ojos.

Despertó más tarde, abrió los ojos y observó a su alrededor, no conocía de nada el lugar, vio su cuerpo, estaba vendado, al parecer alguien le había tratado sus heridas, se alteró y puso en alerta a escuchar a alguien acercarse

-Vaya hombre, despertó al fin, pensé que moriría- Un hombre de estatura baja y tés morena atravesó la puerta sonriente

-Quien es usted?

-Un gusto, me llamo Christian, te encontré tirado a unos kilómetros de aquí, estabas en la mierda la verdad, por suerte pude hacer algo por tus heridas

-Dónde estoy?, ¿Por qué no me llevó al hospital?

-Pues porque queda muy lejos de aquí, estamos demasiado alejados de la civilización, por eso te traje aquí

-Perdón por no agradecer, muchas gracias, de no ser por usted seguro estaría muerto, ¿podría darme algo con lo que pudiera comunicarme por favor?

-Claro hombre, no se preocupe, y lo ayude porque lo vi casi muerto, y no creí que nadie más pasaría, no podía dejarte morir ahí bajo la lluvia- dijo para pasarle un celular, algo antiguo, pero funcionaba

-Muchas gracias de verdad- marcó rápidamente al número de Jack rogando por que este le respondiera, no sonó ni un minuto y escucho a través de la línea su voz

-Sí? - era un tono demasiado frio, a cualquiera le intimidaría

-Amor? - Gustabo le habló algo tembloroso, aun no podía creer que salió vivo

-Amor?, Gustabo dónde estás- Su tono de voz cambió rotundamente, hasta se podía escuchar como esta se quebraba

-E-Estoy, no sé dónde, pero te estoy enviando la ubicación- envió su ubicación rápidamente- Por favor ven

-Estoy de camino mi amor, llego pronto, espérame

-Te estaré esperando- cortó la llamada

-Uyy la novia, que bonito el amor- con una sonrisa comentó Christian

-Si es muy bonito la verdad- su estómago gruñía, haciéndolo apenarse un poco- usted ya ha hecho mucho por mí, pero ¿podría invitarme algo de comer?, no aguanto del hambre- pidió con una tímida sonrisa

-Claro, por supuesto, disculpa, anda sígame- salió de la habitación

Gustabo con mucha fuerza se levantó, aún le dolía todo, tal vez incluso peor que antes, pero tambaleándose llego junto al hombre que ya estaba poniendo comida en una pequeña mesa redonda, Gustabo se sentó viendo el plato de comida, para ser sinceros, no tenía muy buena pinta, tampoco ningún olor en particular, pero tenía demasiada hambre como para juzgar un platillo, asique comió no sin antes agradecer

-No hay de que, ya te aviso, no soy el mejor cocinero del mundo, pero hice lo que pude, mi mujer salió a la casa de su hermana y vuelve apenas en tres días, de lo contrario te hubiera preparado un festín te lo aseguro

-Está muy bien, ahora mismo me comería hasta papel- dijo con la boca llena

-Sí que tenías hambre

-Bueno, no como hace 5 días, apenas y me dieron agua- dijo sin dejar de meter cucharadas de comida a su boca y tragando rápidamente. Así siguieron unos minutos y termino de comer, hasta que escucho las hélices de un Helicóptero y el ruido de las llantas raspando el suelo