Tommy fue el primero en despertar. Abrió los ojos tan rápido que la luz parecía un destello molesto sobre su cara, una sensación extraña, como de volver a nacer. Era como estar en un barco navegando sobre un mar agitado y violento.
—Pero ¿qué...? —Estaba confundido. Se levantó de un salto y prestó atención a su entorno sin saber dónde ni por qué estaba ahí. Miró su hermano tendido en el suelo y se apresuró a despertarlo, sacudiendo sus hombros con fuerza.
Billy abrió los ojos pero permaneció tendido, mirando hacia arriba con el ceño fruncido, aún atrapado en su mente. Se cubrió los oídos con ambas manos, intentando cubrir el ruido incesante de su mente, un intruso molesto que escudriñaba en las profundidades, permaneciendo un eco en el vacío de sus pensamientos .
—¿Qué pasa Billy?
—Son sus voces... has que se callen de una vez.
—No entiendo, ¿qué voces? Yo no escucho nada. Tal vez se te ha pegado la locura de mamá...
—Están sufriendo, puedo sentirlos también.
Con dificultad, Tommy ayudó a su hermano a incorporarse. se tambaleaba de un lado a otro sintiendo las piernas gelatinosas y el resto de su cuerpo desmoronándose de nuevo contra el suelo. Aquel lugar era extraño, no s e imaginaban en dónde podrían estar exactamente. habían despertado en un colchón de heno en el interior de una enorme carpa vacía y oscura.
Atravesaron una cortina de lona para darse cuenta que estaban en lo que parecía ser la carpa de un circo, una de varias esparcidas a lo largo de un campo, en donde más atracciones se levantaban a la vista, coloridos rojos brillando al punto del anochecer. Billy caminaba apoyado en su hermano mientras intentaba recobrar el sentido completo de sus extremidades
—¿Cómo llegamos aquí? —pregunto Tommy con una expresión en el rostro, entre asustado y sorprendido.
—No tengo Idea, ni siquiera se qué ha pasado, fue como un largo sueño, me sentía como si alguien me arrullase durante el camino.
—Era Agnes quien nos cuidaba, ¿será que ella nos ha traído hasta aquí? Lo último que recuerdo era estar en el sofá, luego me sentí adormilado.
—Tal vez ella nos trajo.
—No puede ser, no parece que estemos cerca de casa, la única manera en que nos haya traído es....
—¿Qué hacen aquí? Deberían hacer fila como los demás —un acróbata de aspecto algo burdo, con un notable golpe en la nariz los interrumpió cuando salieron de la carpa— ¡se perderán del espectáculo!
Tommy y Billy se miraron con extrañeza. el último lugar en el que hubiesen pensado en despertar, era en un circo, en donde ni un solo niño estaba formado antes de entrar.—Gracias, pero no —respondió Billy con amabilidad— estamos buscando a nuestra madre, tal vez pueda ayudarnos a buscar, no sabemos dónde estamos y se está haciendo de niche ya.
—Ese no es problema —respondió el acróbata— pediré ayuda a uno d elos payasos, creo que estaban cerca del carrusel...
El hombre se levantó para pedir ayuda, y los gemelos aprovecharon la velocidad de Tommy para escabullirse, pero ¿a dónde ir? No sabían si regresar a casa fuera una buena idea, y tampoco sabían cómo regresar. Podían reconocer las casas en la lejanía. "Basta con correr hasta llegar a casa" pensaba Tommy, pero Billy respondió con una negativa, sorprendiendo a su hermano al notar que había escuchado sus pensamientos. Un viaje no era tan factible sin saber a dónde irían, pues no sabían que encontrarían al llegar con su madre, con Agnes y eso los atemorizaba; además el cielo y el ambiente que los rodeaba era inestable. Miraron hacia arriba, en donde parecía ser de noche y de día. Era como ver una galaxia, estrellas y polvo cósmico, desmoronando se frente a ellos, trastornando sus ideas y las de esa gente. Se volvieron para ver a los cirqueros, de momento parecían más lúcidos, como si despertaran de un largo sueño hipnótico, actuando de manera extraña, como si se preguntaran por qué estaban vestidos así. De pronto, como de cristal se tratase, el cielo se rompió en mil pedazos, que a su vez se fragmentaron en un polvo brillante de color rojo con tonos violetas y azules.
—Parecen los poderes de mamá.
—Espero que se encuentre bien —dijo Tommy asustado.
Billy giró la cabeza hacia el circo, todavía eran ellos, pero había algo diferente, ya no estaban entre la realidad y la fantasía. El hombre que había intentado ayudarles los miró con ojos certeros mientras que, con una seña de la mano, indicó a algunos de sus compañeros acercarse. No tardó en notar que estaban dispuestos en fila como un ejército que se encaminaba hacia ellos, a capturarlos a toda costa.
—Tommy --- la voz de Billy se notaba temblorosa y preocupada
---¿Qué?
---Debemos encontrar a mamá y papá
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Wandavision. Perspectiva de los niños
FanfictionBilly y Tommy son los hijos de Wanda Maximoff dentro de esa realidad ficticia. Mientras ella parece no darse cuenta de lo que sucede, sus hijos deberan aprender a dominar y descubrir sus habilidades mutantes en un ambiente escolar y hostil. Mientras...