🔖(paraplejia)✧*°[Gyjo]

✧*。(f o u r 🔖

Johnny era bien pesado cuando quería algo, Gyro eso lo sabía. por eso no le sorprendió que ese domingo haya estado todo el día recordándole que debían salir.

una vez llegada la hora donde habían acordado ir a pasear por la ciudad, Johnny fue hasta Gyro quién estaba sentado en un escritorio haciendo quien sabe que y se quedó estático mirándolo.

-¡Gyroooooo!~

el mencionado lo miró perezoso y casi cansado de la situación, notando un puchero en la cara del rubio, sonriendo casi al instante ante tal gesto.

se paró, cerrando su diario y guardandolo en un cajón bajo llave. luego de eso caminó hasta la salida donde se puso su abrigo siendo seguido por Johnny.

el rubio copio las acciones del mayor, colocándose un camperón que le doblaba en tamaño, una bufanda azul con detalles en estrellas rosadas al igual que el gorro el cual iba a juego.

Gyro en cambio se puso igualmente un camperón y como extra unos guantes. el no sufría tanto del frío como Johnny así que no era molestia que el saliera así.

cuando estuvieron listos, Gyro pasó a Johnny en la silla de ruedas hacia afuera y después de salir él, cerró la puerta bajo llave, caminando hasta la acera mientras empujaba al menor.

se dirigieron hacia el centro de la ciudad el cual estaba a quince minutos de su casa. en el camino compraron café y Johnny le contaba sobre los pájaros que veían.

cuando llegaron a su destino, comenzaron a recorrer diferentes tiendas, había algunos puestos nuevos que nunca habían visto antes y eso les llamo la atención.

Gyro se adentró en un negocio de chuches indicándole a Johnny que lo esperara afuera. para cuando salió otra vez, el rubio ya no estaba.

eso lo desesperó, Johnny nunca se alejaba sin Gyro ya que su silla de ruedas le impedía ir muy lejos. Gyro, asustado, empezó a buscar con su mirada yéndose de la tienda.

unos segundos después, Johnny volvió con un pequeño llavero en forma de estrella entre sus manos, sin encontrar al mayor donde lo había dejado. él también se asustó.

Johnny se fue en la dirección contraria a Gyro esperando encontrarlo por allí. ninguno de los dos tuvo éxito.

estuvieron varias horas buscándose mutuamente, el Zepelli empezaba a perder el control gritando el nombre del menor a todo pulmón pensando que posiblemente lo escucharía.

el rubio en cambio se quedó llorando en una fuente que había en medio del centro donde muchas personas, sobre todo parejas, iban a pedir deseos.

estaba preocupado, sabía que Gyro tambien podía estarlo buscando y para mala suerte de los dos, esa tarde de domingo el centro estaba repleto de gente paseando y disfrutando del día.

pasadas ya otras dos horas y cuando la noche estaba cayendo, Gyro de fue a sentar a la fuente, ya casi con pocas esperanzas. allí vio esa peculiar silla de ruedas que tanto conocía.

corrió hacia ella, viendo a un tiritante Johnny sentado cerca de la fuente. en la cara de este se notaban restos de lágrimas y su nariz estaba roja por el frío.

-¡Johnny!

-¡Gyrooo!~

ambos llamaron por el nombre del contrario apenas se vieron. el mayor se puso a la altura del rubio cuando estuvo frente a éste, repartiendo besos por todo su rostro.

-¿dónde estabas Johnny?

el menor no supo cómo explicarse, solo le dijo que fue a una tienda y cuando salió, él ya no estaba y eso lo asustó, lo había buscado y al no encontrarlo se quedó ahí.

Gyro comprendió que ambos se habían perdido e incluso preocupado de más. por lo cual para calmarse le ofreció comprar pizza y regresar a cenar a casa.

Johnny aceptó la idea y fue llevado por Gyro hasta una pizzería cercana, donde ordenaron la favorita de ambos, pizza de mozzarella.

esperaron unos minutos y cuando estuvo lista, volvieron a casa hablando sobre todo lo que habían visto ese día. Gyro, como de costumbre, abrió una botella de vino para cenar.

cenaron, charlaron y finalmente se fueron a dormir juntos ya que se habían echado de menos en esas cuatro horas que habían estado distanciados.

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yo dije que iba a ser corto. en fin, todo fue rápido pero me gustó igual, la idea quedó.

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