Despierta

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Después de aquel duro combate contra su mejor amigo lo que obtuvo como resultado fueron largas pesadillas en la camilla de un hospital, las escenas se repetían constantemente una tras otra, la masacre de su clan, la muerte de su hermano, Sasuke solo gritaba detente Itachi pero este no lo escuchaba antes de asesinar a sus padres, luego se veía con su katana atravesando el cuerpo de su querido hermano mientras este le pedía perdón, el dolor era lo suficiente como para volverse loco, después de eso sus pecados se convertían en enormes sombras con ojos rojos que lo arrastraban lejos de su familia para hundirlo en un pozo sin fondo, gritos desesperados de gente muriendo, sangre sobre sus manos, seguramente estaba en el infierno, para luego tocar el suelo y todo volvía a repetirse una y otra vez.

Una calidez tan relajante detuvo aquellas acciones en su subconsciente de negro paso a blanco, una vos tan suave que podía envolverlo con cada palabra que pronunciaba, una tranquilidad que lo llenaba de pies a cabeza, quien era quien lo llamaba debía averiguarlo, intento abrir los ojos pero sus párpados eran tan pesados que solo logro ver un poco y realmente borroso.

Una silueta se revelaba gracias a la luz de la luna que entraba por la ventana, cabellos largos, una mano delicada y suave tocaba su frente con una suavidad incomparable, su vos tan dulce, reconfortante, tranquila y melodiosa -solo es un mal sueño Sasuke-kun, no te dejare solo.-  quien era la dueña de aquella vos que llenaba a sasuke de una paz inmensa quería averiguarlo pero sus ojos no obedecían a sus intenciones por lo que sin mas se cerraron, en un lugar blanco sin nada mas encontraba a su querido hermano, tan tranquilo e impecable justo como lo recordaba con una sonrisa adornaba su pacifico rostro.

Itachi: has crecido Sasuke.

Sasuke: por que no me dijiste la verdad Itachi hubiera entendido, estaríamos juntos ahora.

Itachi: mi muerte ya estaba prevista yo estaba enfermo y lo sabes, no fue tu culpa, debes dejar atrás el pasado y vivir tu presente.

Sasuke: cual presente si me he quedado solo. Konoha no merece tu sacrificio.

Itachi: yo moriría tarde o temprano si ese golpe de estado se llevaba acabo y tu también estarías muerto, te di la oportunidad de ser fuerte y ocupar mi lugar en la aldea, intenta ser feliz como yo lo fui sabiendo que tu seguías respirando sasuke.

Sasuke: por que no mejor irme con ustedes que caso tiene seguir aquí.

Itachi: quiero verte feliz, formar vínculos nuevamente, un hogar, una familia, que seas tan honorable como alguna ves el clan lo fue, quiero que hagas todo lo que te arrebate y todo lo que yo no pude tener en esta vida, por eso sigues aquí Sasuke.

En un intento fallido por detener a su hermano este se fue sin mirar atrás no sin antes decirle unas palabras de despedida a su pequeño hermano menor - te amo sasuke no lo olvides- las lagrimas se dieron paso sobre las blanquecinas mejillas de su rostro sabia que no volvería a ver a su hermano y le dolía en el alma quería gritar y salir corriendo tras el como si fuera un niño pequeño pero se vio detenido por aquella vos que volvía a resonar sobre el.

-Sasuke-kun es solo un mal sueño yo estoy contigo no estas solo, muchas personas te esperamos con ansias.

En esta ocasión abrió los ojos de golpe aunque aun seguía todo borroso pero se fue aclarando y se percato de las lamparas que colgaban del techo azulino sobre el, miro a su costado y vio unas cuantas mesas con botellas y lo que parecían ser jeringas, algunas toallas y vendas, miro a sus pies y estos eran cubiertos por una sabana de un tono tan deprimente, levanto ambas manos y ambas parecían estar en buen estado giro hacia su otro lado y vio a una chica de piel blanquecina con una enorme sudadera color lila, un cabello lacio y negro como la noche con ligeros destellos azules, sus enormes perlas la delataron una Hyuga estaba frente a el.

Ojos de lunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora