Momo suspiro con sus piernas y manos temblorosas frente a la puerta de la biblioteca con su regalo pegado a su pecho.
--- Tranquila, Momo.--- se dijo a si misma, mordiendo sus labios para entrar a la zona de guerra.
Miro el asiento vacío donde Katsuki siempre estaba, caminando hacia el y dejando el regalo sobre esa silla en específico.
--- Oh, no le puse mi nombre...--- ir hasta el salón por su mochila sería muy largo, no llegaría a tiempo si quería que Bakugou supiera quién le entrego esa solicitud de cortejo.
--- ¡Ah!--- jadeo corriendo hacia donde la bibliotecaria tenía su escritorio, siempre tenía plumas bonitas y de diferentes colores, ¡Funcionaría!... Solo que Katsuki llegó antes de lo que esperaba.
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El rubio miraba con recelo el regalo que fue depositado sobre su santuario, admitía que tenía curiosidad de ver la asquerosidad que le habían regalado.
--- Hmnm...--- cerro sus ojos mientras un puchero aparecía en su rostro.
--- Maldito infierno.--- gruño tiernamente desgarrando toda la envoltura hasta que, de manera aún más agresiva, abrió la caja y-Oh.
Oh.
Sus ojos se abrieron con sorpresa al ver la sudadera blanca perfectamente guardada dentro de ese pequeño compartimento, acariciando la suave tela mientras su Omega revoloteaba ante la emoción.
Oler, oler, oler.
Su Omega interior necesitaba que sintiera las feromonas de quienquiera que le dió ese regalo, sería un pena que no tuviera.
Así que tomo la tela entre su manos y aspiro con lentitud, llenado sus pulmones de aquel aroma...
Te de manzanilla con rocío.
Era apenas los tonos ligeros de un Alfa, por lo general eran amargos y dominantes, estás, en cambio, eran soltadas cuando querían que sus Omegas estuvieran cómodos y seguros...
Y estaba funcionando.
Porque no mucho tiempo después se encontraba ronroneando, dejando que sus barreras cayeran por segundos antes de tomar las envolturas que tiro al suelo, mirando a su alrededor tratando de encontrar al dueño pero solo encontró los mismos estantes de libros que tanto conocía.
Luego se dio cuenta de la mierda que había hecho.
Había. Aceptado. El. Maldito. Cortejo.
Su rostro se sonrojo fuertemente pero no soltó la ropa que le habían regalado, sosteniéndolo contra su pecho para salir de su santuario.
Por otro lado, Yaoyorozu, quien estaba detrás de un estante teniendo un ataque de ternura por todo lo que había visto.
[...]
--- Lindo suéter...--- se burló Kaminari mientras Bakugou caminaba con aquella tela más grande que su cuerpo de color blanco.
--- Cállate, rata.--- entraron a su salón de clases, ahora solo por la época de cortejo, siendo alcanzados por Jirou.--- ¡A-ah! ¡J-J-Jirou! Yo quería-
--- ¿Quién te regalo eso, Bakugou?--- se puso frente al rubio con sus brazos cruzados.
--- ¿Disculpa?--- cuestionó confundido por su agresividad.--- ¿Quién te está cortejando?--- sinceramente, no sabía.
--- Uh, no lo vi, solo me dejó esto y ya, ¿Por-
--- ¿Qué hiciste?--- Katsuki apretó sus labios, frunciendo su seño ante la agresividad que tenía la pregunta.
--- ¿A qué te refieres?---
--- ¿Que fue lo que ella vio en ti?--- soltó un sollozo dando la vuelta, dejando confundidos a los dos chicos tratando de entender todas sus palabras.
[...]
Katsuki sabía que aceptar el cortejo de ese Alfa sería su perdición en muchas formas.
Admite que esta opción, de todas, es la que menos quería atender.
--- ¿Por qué tienes eso puesto?--- una gran mano cayó justo al ladeó de su cabeza, golpeando la pared.
--- Fue un regalo de Hitoshi.--- contesto con ambas manos cubiertas por las mangas del mismo suéter, apretando la orilla de este mientras los otros Alfas lo rodeaban.--- Sabes que eres mío, cachorro, ¿Tengo que recordártelo de nuevo?--- gruño, acercándose más al rubio de lo que era necesario.
--- No, que asco.--- fue golpeado fuertemente contra la pared provocando que un mareo recorriera su cuerpo.--- No me obligues a herirte, Omega, sabes que puedo.--- Katsuki, aunque muy extraño de él, guardo silencio.
Si, sabía de lo que era capaz.
«- admito que está muy corto, lo siento unu
¿Quién creen que sea ese Alfa del coño?
Gente, en este historia no pretendo odiar a Jirou, las cosas se darán diferente a lo que piensan, tan solo es... Un amor extraño.
¿Qué es lo que esperan ver en esta historia?
¿Que más le regalará Momo a Katsuki?
¡Lxs amo!
❤️
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¡Hazme Caso, Omega! [MomoBaku]
FanfictionYao-Momo era una Alfa única, hija de padres importantes en la economía de Japón, era el sueño de cualquier Omega tener la marca de esa familia tan prestigiosa sobre su cuello. Lástima que los deseos de ella se fijaran solamente en una persona. Bakug...