❝𝐌𝐈𝐒 𝐅𝐋𝐎𝐑𝐄𝐒 𝐏𝐀𝐑𝐀 𝐓𝐈❞ ─ chaesoo [FINALIZADA]

𝐝𝐞 𝐝𝐞𝐣𝐚𝐫 𝐢𝐫 𝐲 𝐚𝐜𝐥𝐞𝐩𝐬𝐢𝐚𝐬

Jisoo mira sentada en el borde de la cama como una frágil Rosé va de aquí a allá guardando todo lo que necesita para su estadía en el hospital. Mañana es la operación y por lo que Lisa cree, la pelimorada va a pasar un par de días hospitalizada por lo avanzada que está la enfermedad Hanahaki.

ㅡ¿Ya tienes todo? ㅡpregunta cuando Rosé se sienta a su lado.

ㅡLa maleta está lista, solo debo esperar a que Jennie venga por mi. ㅡRoseanne intenta retomar el aliento después de estar corriendo por todo el apartamento.

Han sido días difíciles para ella, desde su encuentro con Sooyoung hace dos semanas ha empeorado progresivamente, se lo adjudica a que ha aceptado lo muy egoísta que ha sido y en lo tóxico que su amor por Jisoo se convirtió.

Su corazón se ha hecho débil y la enfermedad ha tomado provecho de eso. Pero mañana todo aquello que afecta a Rosé acabará.

ㅡ¿Jennie vendrá por ti?

ㅡSi, me quedaré con Lisa y ella hoy, Lili me dijo que quería monitorearme toda la noche, en la mañana iríamos juntas al hospital y sería su primera paciente de la guardia. ㅡhabla como si la chica que tiene a su lado no siente ganas de vomitar al saber que no pasará el día con ella. ㅡMi cirugía está programada a primera hora de la mañana, así que es mejor estar con ellas. Además, quiero estar con Jennie antes de esto, ella puede calmar mis nervios con solo una mirada.

La mayor tenia en mente pasar el día con Rosé, pero ahora los planes que ni siquiera había ideado se han caído en pedazos. No puede culparla y tampoco a las chicas. Es por su bien y eso es lo único que le importa a Jisoo, que Rosé esté bien.

Tal vez por eso estuvo tan feliz cuando le dijo que luego de una larga conversación con Sooyoung se decidió por la cirugía, tal vez por eso es que espera con ansias que del corazón de Rosé salga toda raíz con el nombre de tan dichosa persona que no pudo apreciar su amor. El corazón de Rosé volverá a estar solo con ella dentro y Jisoo está bien con eso.

ㅡLo que sea para que estés bien. ㅡJisoo habla dando palmaditas en la cabeza de la menor quien le sonríe como si tuviera las estrellas en la boca.

Desde el día en que Seulgi le mandó ese ostentoso ramo de Jacintos púrpuras, Rosé ha estado un poco manos decaída. Aprecio el detalle porque demuestra el buen corazón que la castaña tiene, y que es la mejor person que Jisoo podrá conseguir. Jisoo puede envejecer con Seulgi, mientras que Rosé lo hará a su lado. No es mucha la diferencia, solo está a un te amo de distancia.

Mientras ella, conseguirá a alguien más a quien amar con la esperanza de que no le traiga rosas en primavera, sino la suave brisa de esta. Rosé ya se cansó de tantas flores.

ㅡPodrás visitarme al hospital cuando salgas de la oficina, puedes ir con Seulgi y que Sooyoung se les una. ㅡRosé habla como si una fiesta de cumpleaños se tratase, con una adorable sonrisa y haciendo ademanes con las manos.

Jisoo no puede evitar sonreír, la pequeña Rosie volverá a ser la misma. ㅡPero Joohyun unnie no puede ir, así que no le digas. A Seungwan unnie tampoco.

ㅡ¿Por qué? Joohyun y Seungwan te adoran, ¿Por qué no las quieres ver?

ㅡNo es que no las quiera ver, solo que prefiero verlas otro día. ㅡla pelimorada busca las palabras correctas para no revelar lo que Sooyoung le dijo en secreto. Sin embargo, la mirada desafiante de Jisoo le pide que diga algo cercano a la verdad. ㅡNo puedo decirte, es un secreto que debo guardar.

La pelinegra se limita a sentir y a desplomarse a las anchas de la cama, Rosé hace lo mismo que ella. Ambas mirando el techo, tan cerca que sus brazos se rozan pero al mismo tiempo tan lejos que no pueden siquiera adivinar lo que la otra piensa. Y están agradecidas que sea así, no podrían verse a la cara nuevamente si supieran lo que piensan.

Hay un poco de todo dentro de ellas; hay felicidad, rencor, odio, amor, tristeza, melancolía, deseo, resignación y querencia. Si pudieran leerse la mente solo podrían descubrir un pasaje confundido de sentimientos encontrados, al menos en una de ellas, la otra ya puso en orden su propio desastre.

ㅡNos hemos vuelto buenas en guardar secretos ¿no? ㅡlas palabras que salen de Jisoo bajo un suspiro llenan los oídos de Rosé.

ㅡSupongo, pero no es malo. A veces es mejor guardarnos ciertas cosas, podemos lastimar a alguien si las decimos.

Podría perderte por completo si las digo. Guardaré silencio, guardaré lo último de amor que me queda.

ㅡ¿Algún día sabré quien es fue la persona que hizo de tu pecho un jardín? ㅡinconscientemente la mano de Jisoo busca la de Rosé, no pierde tiempo en entrelazar sus dedos cuando la consigue.

ㅡNo. Podría lastimarte si te lo digo y no vale la pena saberlo, a partir de mañana no importará. ㅡRosé intenta no perder la cordura y consigue paz en acariciar el dorso de la mano de su mayor con el pulgar.

A mi me importa hoy, me importará mañana y todos los días después de ese. Quiero saber quien tiene tanta suerte para tener tu amor.

Sin notarlo ambas chicas comienzan a llorar en el silencio de su tacto. Lágrimas que corren hasta pasar sus orejas y se estancan detrás de ellas al igual que las palabras se quedan como diálogos escritos pero nunca dichos en sus lenguas.

No hay nada que decir después de todo, un consuelo estaría de más, dar ánimos que no tienen solo sería un acto de hipocresía. El silencio es lo mejor que pueden compartir, que el sonido de sus suspiros se conviertan en nubes condensadas de sentimientos sobre ellas y lluevan todo lo que no pueden decir.

Lo único que necesitan ahora es lo que sostienen entre las manos que reconocen la suave palma que está contra la suya. Eso es todo lo que podrían necesitar hoy y mañana.

ㅡQuédate conmigo hoy, yo mañana te llevaré al hospital antes de que Lisa pueda llegar. Pero quédate esta noche. Por favor.

La voz de Jisoo que parece haber bajado una octava completa pide entre suaves sollozos. Lo necesita, necesita estar con Rosé esta noche, quiere estar con ella antes de ver su corazón renacer, quiere estar allí después de eso.

Quiere a Rosé solo por esta noche, porque ya sabe que tendrá el resto de sus días de con ella a su lado.

ㅡ¿Me darás una última noche? ㅡla pregunta rueda de la lengua de Rosé como si no pesara como lo hace.

Pero antes de Jisoo pueda cuestionarla, la pelimorada se levanta violentamente cuando desde su garganta un ramillete de Asclepcias sale por su boca.

Esa es la respuesta a los ruegos de Jisoo. Quiere que la deje ir, pero su todavía creyente corazón quiere quedarse por el resto de su vida.